En el Salón del Automóvil de Ginebra hay que diferenciar entre tres tipos de stands: los que tienen presentaciones oficiales, los que muestran experimentos que buscan una financiación para seguir desarrollándose y los Concept Cars. En este último escalón hay que diferencia los prototipos que nunca verán la luz en nuestras calles y aquellos modelos que tienen posibilidades de ser llevados finalmente a producción. En el caso del Audi Q8 Sport Concept parece pertenece a este último y limitado grupo.

La firma de los cuatro aros ha querido anticipar con este Concept las líneas del que será su nuevo SUV de gran tamaño, el homólogo del A8 en versión todocamino. Audi ve el futuro Q8 como un robusto vehículo con buenas capacidades off-road y que no renuncia a unas líneas estilizadas, bien definidas, que no renuncia a la deportividad y que toma la imagen que ya lucen otros modelos del fabricante como el R8 o el TT Coupé.

Aunque lo más destacado del Concept presentado en la cita helvética no ha sido precisamente el exterior, algo que habíamos visto en la presentación que se realizó hace unas semanas en Estados Unidos, sino que la gran novedad está en su interior. En esta ocasión, el Q8 Sport Concept montaba un motor V6 de gasolina con compresor eléctrico que permitía elevar la potencia hasta los 476 CV.

Este tipo de sistema, asociado a un KERS o recuperador de energía de gran tamaño, permite eliminar la dependencia de los gases de escape que tienen los turbos convencionales, permitiendo mantener la presión estable y por tanto mejorando las prestaciones del propulsor. La tecnología ya la utiliza otro modelo de Audi, el SQ7 TDI, pero como bien indican las siglas, en este caso va de la mano de un motor diésel, mientras que el presentado por los alemanes en Ginebra se trataba del 3.0 V6 FSI de gasolina.

Mejor rendimiento con menos consumo. Eso es lo que asegura Audi que habla de unas prestaciones superiores incluso a las de un V8 atmosférico y con consumos de bloque de cuatro cilindros. Los datos así lo evidencian, con un espectacular 0 a 100 km/h de sólo 4,7 segundos y una velocidad punta de 270 km/h. En cuanto al consumo se habla de que estaría en una media de 7 litro a los 100 kilómetros, gracias en gran parte al sistema KERS de 20 kW que le permitiría bajar un litro de los consumos normales.