El fabricante británico Lotus siempre se ha caracterizado por la calidad de sus realizaciones, principalmente destinadas a una utilización deportiva, con una alta proporción de uso en circuito, donde cualquiera de sus modelos, desde el más básico, se siente muy cómodo.

No obstante, siempre hay configuraciones que destacan por encima de otras, gracias a una puesta a punto más agresiva. Es el caso de la última creación de la marca inglesa, bautizada Exige Cup 380. Ya la propia denominación va dando pistas acerca del enfoque de este modelo, extremadamente deportivo. 

El Exige Cup 380 está basado en la carrocería del Exige, con una carga tecnológica más extensa y un cuidado pack aerodinámico, perfectamente estudiado para mejorar el rendimiento. La presencia del nuevo deportivo británico es absolutamente apabullante, con un frontal muy bajo y agresivo en el que destacan las grandes entradas de aire y los apéndices laterales. 

Todo en el Exige Cup 380 está diseñado de acuerdo a una función. En el interior, los asientos de otras versiones se han sustituido por unos buckets de competición fabricados en fibra de carbono y alcántara. Se mantiene, en un guiño a la estética, la maravillosa caja de cambios parcialmente a la vista, seña de identidad de las últimas creaciones de Lotus. 

Mecánicamente esta versión monta un propulsor 3.5 V6 de origen Toyota, sobrealimentado convenientemente para alcanzar los 380 CV y 410 NM y que envía la potencia al eje trasero, siendo capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3.4 segundos, alcanzando una velocidad punta que ronda los 300 km/h. 

No solo de las prestaciones vive este Lotus, que cuenta con diversos componentes mecánicos y electrónicos que le permiten destacar en curva, como un control de tracción y estabilidad con seis posiciones de funcionamiento, así como amortiguadores y estabilizadoras regulables. Sirvan como dato los 200 kg de empuje descendente que generan todos sus componentes aerodinámicos a una velocidad de 280 km/h.