Los todoterrenos puros son una especie en peligro de extinción. Su concepción prácticamente anacrónica hace que a día de hoy casi no tengan hueco en el mercado, aunque aún es posible encontrar alguna alternativa, como el Mercedes-Benz Clase G o el protagonista de este artículo, el Jeep Wrangler.
El Wrangler es la expresión actual de lo que hace años fue el origen de la firma Jeep, el Willys. Poco a poco el mencionado modelo evolucionó de una concepción más civil, menos militar, manteniendo sin embargo un planteamiento rudo, carente casi en su totalidad de comodidades, con un estilo robusto y unas capacidades fuera del asfalto absolutamente indudables.
Ahora el Wrangler se renueva por completo, manteniendo intacto su espíritu. El Wrangler 2018 ha sido desvelado hace unos días en EEUU, y aunque aún no se conocen todos los detalles del modelo americano, las primeras imágenes dejan al descubierto una evolución muy destacable.
Estéticamente el diseño del Wrangler 2018 se puede calificar de continuista, aunque en realidad todas las piezas utilizadas son nuevas. Sus formas son casi iguales que las de su predecesor, aunque las líneas están ligeramente más redondeadas para dotar al Wrangler de una imagen más moderna.
La firma americana aún no ha facilitado imágenes del habitáculo, aunque en las fotografías se puede apreciar un salpicadero de nuevo muy similar al de su antecesor. No obstante, se espera que se mejoren las calidades de realización, ampliando también la posible dotación tanto tecnológica como de confort.
Mecánicamente la nueva generación del Wrangler mejorará sustancialmente las cualidades del modelo que se ha vendido hasta el momento, ya que FCA, el consorcio italoamericano propietario de Jeep instalará nuevas unidades motrices tanto de cuatro como de seis cilindros diésel y gasolina. La mayor novedad será, sin duda, la llegada por primera vez de una versión híbrida, que marcará un antes y un después en la trayectoria de este mítico todoterreno.