Toyota sigue preparando a su gama de vehículos para afrontar un prometedor año 2018. El fabricante japonés ha querido dar más alicientes para aquellos que buscan la deportividad entre sus vehículos y es por ello que, han buscado reforzar la propuesto de uno de los coupés de tracción ligeros de propulsión más interesantes del mercado. En este caso, el Toyota GT86 comenzará montar de serie en toda la gama un nuevo sistema de frenos Brembo, además de otras novedades menos llamativas.
Concretamente el nuevo sistema de frenado equipa discos de 326 milímetros en el eje delantero y de 316 milímetros en el posterior, en ambos casos, con unas llamativas pinzas en color rojo que destacan sobre el conjunto, especialmente con la llegada de unas nuevas llantas de aleación de 17 pulgadas bi-tono plata/negro, cuyo diseño de diez radios finos deja aún más al descubierto las novedades en el apartado de frenos que estrena el GT86, el modelo que fue creado al alimón entre Subaru, Toyota y Scion para recuperar esa esencia de los deportivos la década de los noventa.
Por último, estrena un nuevo mando de apertura remota, ahora con líneas más redondeadas. Estas ligeras novedades se suman a las recibidas a principio de 2017, cuando presentó alteraciones en el diseño de las ópticas delanteras, nuevos faros traseros con tecnología LED, modificaciones en el paragolpes delantero y un nuevo alerón trasero fabricado en aluminio y con acabado en negro. Todo ello para actualizar un vehículo que salió al mercado hace ya un lustro.
No habrá modificaciones en lo que respecta a su mecánica, manteniendo el motor bóxer de cuatro cilindros que eroga hasta 200 CV de potencia Se sigue ofertando tanto en su opción de transmisión automática como con caja de cambios manual, pero lo que no es posible elegir es su configuración ‘todo atrás’, tal y como mandan los cánones. En cuanto a sus acabados, no hay lugar para elecciones, sólo estando disponible en la opción Sport. El precio para esta actualización del Toyota GT86 es de 34.490 euros o por 386 €/mes con Pay Per Drive (la financiación de pago de la marca) y está ya disponible en los distintos puntos de venta de la red de concesionarios de Toyota España.