El ‘troleo’ de Elon Musk, el fundador de Tesla, a Ford, el ‘padre’ de la automoción

Que Elon Musk, el fundador de Tesla, es un directivo visionario es algo de lo que, hoy en día, ya no hay duda. Pero que este emprendedor y radiante ejecutivo, que el próximo domingo cumplirá 49 años, tiene los dedos muy rápidos a la hora de ‘tuitear’ en la popular red social también queda patente día tras día.

La última polémica viene porque Musk ha ‘troleado’ a Ford en la red social Twitter. En concreto, la firma del óvalo publicaba en la tarde del jueves un tuit en el que señalaba que “abordar el impacto del cambio climático es un aspecto destacado en los derechos humanos y una prioridad estratégica para Ford”.

“Es por eso –continúa la marca norteamericana- que estamos trabajando para lograr ser neutros en carbono para 2050, con objetivos provisionales para conseguir ese camino”.

Y aquí es donde Elon Musk no se ha podido reprimir y ha contestado a Ford que en realidad no haría falta de esperar a 2050 para ser neutros en carbono ya que “podría ser un poco más rápido”, ha señalado en un tuit este directivo de Tesla.

Llama la atención en este sentido que Elon Musk haya contestado de esta manera a Ford. Si bien es cierto que el primer eléctrico puro de Ford (el Mustang Match-E) no llegará hasta 2021, también hay que otorgarle el mérito a este fabricante (y a Henry Ford) de ser el creador del Ford T, el vehículo que inauguró la producción en cadena, de la que se beneficia hoy en día Tesla.

Ford, por su parte, no ha querido entrar en polémicas y no ha respondido, al menos en las primeras horas, el tuit de Elon Musk.

Elon Musk y sus polémicas

Esta, no obstante, no es la primera vez que Musk se mete en una polémica en Twitter, ya sea iniciando él la discusión o bien respondiendo a otro interlocutor o simplemente anunciando una noticia.

Entre las ‘intervenciones’ en la red social más sonadas recordamos que a principios de mayo las acciones de Tesla se desplomaron hasta un 12% en un fatídico viernes después de que Musk asegurase en la red social que los precios de los títulos de la compañía estaban “demasiado altos”.

Musk, además, señalaba por aquel entonces que también tenía previsto vender sus pertenencias y que no quería tener casa en propiedad. Unas palabras que hicieron que sus acciones se devaluaran cerca de 80 euros en un solo día.

Imagen de un establecimiento de Tesla.

Pero sin duda, uno de los más llamativos fue el que publicó en agosto de 2018 señalando que estaba considerando de forma seria privatizar Tesla y sacarla de la Bolsa con un precio que en su día anunciaba de 420 dólares la acción (hoy vale casi 1.000 dólares).

Este tuit, no obstante, le costó a Tesla pagar una multa de 20 millones de dólares y dejar la presidencia de la compañía.

Asimismo, Musk no solo ha utilizado Twitter para tratar temas de Tesla. También lo ha hecho para dar a conocer parte de su vida personal. Por ejemplo, hace unas semanas, Elon Musk utilizó Twitter para anunciar el nombre su primer hijo con la cantante Grimes. Inicialmente la pareja bautizó al recién nacido como X Æ A-12, un nombre que luego pasó a ser X AE A-Xii.

Y precisamente fue la suegra de Musk la que también le recriminó por twitter que no fuera partidario de un confinamiento estricto por el coronavirus.

El millonario Elon Musk

Si bien no se sabe a ciencia cierta cuánto dinero tiene Elon Musk en acciones, se estima que podría rondar los casi 39 millones de acciones, lo que podría suponer casi el 21% de la compañía y un patrimonio en la Bolsa cercano a los 40.000 millones de dólares.

Elon Musk, en este sentido, siempre se ha prodigado por ser un ejecutivo diferente. Por ejemplo, en 2019 se ‘bajó’ el sueldo hasta algo menos de 24.000 dólares por su labor al frente de Tesla.

Elon Musk durante el lanzamiento de la nave espacial Dragon Endeavour de SpaceX.

A cambio, Musk ha fijado un sistema de retribución por objetivos para los próximos 10 años que le permitirán (si cumple con lo estimado) convertirse en uno de los hombres más ricos de la tierra.

Eso sí, no lo tendrá fácil. Por ejemplo, uno de los objetivos propuestos es que la compañía pase a tener un valor bursátil de 650.000 millones de dólares, una cifra muy elevada puesto que ahora está en algo más de 180.000 millones. Desde aquí no sabemos si lo considerará pero de lo que está claro es que seguirá ocupando titulares.