A la hora de hablar de un coche eléctrico las cifras que suelen barajarse rondan los 30.000 o 35.000 euros. Un precio que todavía está muy por encima de la mayoría de los presupuestos de los españoles.
Sin embargo, dentro de la gama de modelos eléctricos a la venta en España, existen algunos otros coches que son muchos más baratos.
Y en EL ESPAÑOL, en concreto, hemos probado el más barato de todo el mercado. Hablamos del Seat Mii electric.
Este vehículo parte de un precio oficial de 21.300 euros.
Sin embargo, a esta cifra hay que restarle los descuentos que aplica la marca por acogerse a la financiación (y que se sitúan entre los 2.200 y los 2.500 euros) y las ayudas del Plan Moves (el plan de incentivo a la movilidad eficiente que ya se ha aprobado, si bien falta que las comunidades lo activen).
Estas ayudas pueden ser de 5.500 euros si se achatarra un vehículo.
En total estaríamos hablando de un descuento de 8.000 euros que restados del precio oficial de 21.300 euros, nos da la cifra mencionada y que permite hacerse con un eléctrico por 13.300 euros.
Cómo es el Seat Mii eléctrico
Antes de comenzar con la prueba de este modelo, vamos a realizar un pequeño repaso de cómo es el Seat Mii electric. Y lo primero que conviene tener en cuenta es que se trata de un coche que no nació como un eléctrico puro.
El Seat Mii fue lanzado en 2011. Se trataba de un coche pequeño de orientación urbana que compartía elementos con el Volkswagen Up! y el Skoda Citigo. Por aquel entonces solo se comercializaba con motor de combustión.
Sin embargo, llega el año 2019 y Seat decide decir adiós a los motores convencionales y lanzar el Mii solo como eléctrico.
En realidad no fue una decisión de Seat sino de todo el Grupo Volkswagen, ya que ocurría lo mismo en las otras marcas del grupo: Volkswagen y Skoda.
Una de las razones por las que Seat (y el resto de marcas) ha optado por esta decisión es para bajar la media de emisiones de CO2.
Recordamos en este sentido que en 2019 todas las marcas del grupo superaban con creces el objetivo de los 95 gramos de emisiones: Seat (118 gramos), Skoda (118 gramos) y Volkswagen (121 gramos).
Por ello, el Seat Mii, junto con la llegada de otros modelos eléctricos o electrificados, será clave para Seat en este sentido, ya que la firma española tiene pensado lanzar un total de seis coches (entre eléctricos e híbridos enchufables) de aquí al 2021.
Hablamos de este Seat Mii electric, pero también del Cupra Born, el nuevo Seat León híbrido enchufable, el Seat Tarraco híbrido enchufable, Cupra León y Cupra Formentor.
Motor eléctrico
En cuanto al moto Seat ha introducido un motor eléctrico de 83 CV (61 kW) que ofrece un par motor de 212 Nm desde el primer instante. Este generador se alimenta de una batería y transmite toda su potencia al eje delantero por medio de un cambio automático con solo una velocidad.
En cuanto a las prestaciones, el Seat Mii electric tiene una aceleración de 0 a 100 km/h de 3,9 segundos y su velocidad máxima es de 130 km/h.
Una vez en marcha, tenemos que reconocer que dependerá mucho la carretera escogida para apreciar sus prestaciones del modelo.
Es decir, si circulamos por una carretera secundaria de un puerto de montaña, el Mii electric nos parecerá que se quedará corto de potencia. Y lo mismo ocurrirá en autopista, donde su velocidad máxima está limitada.
Sin embargo si, por el contrario, estamos hablando de una circulación por ciudad, entonces pensamos que el Mii sí puede tener una buena agilidad, con una aceleración razonable.
Eso sí, a la hora de desplazarnos tendremos que tener en cuenta los modos de conducción. En concreto, el Seat Mii electric cuenta con los modos Normal, Eco y Eco+.
Y esto decimos que es importante conocerlo porque dependiendo del modo que use, variará mucho la autonomía y, también, variará los elementos de confort. Por ejemplo en el modo Eco+ no funciona el sistema de calefacción.
También hay que tener en cuenta que, aunque el cambio es automático y tiene solo una velocidad, se puede variar la capacidad de retención.
De esta manera, el la posición D no tendría retención alguna y si damos un toque a la izquierda o a la derecha aumentaremos el nivel de retención entre 1, 2, 3 y 4. En el caso de que circulemos en D y bajemos la palanca pasaremos directamente al modo 4. Decir, eso sí, que salvo que tengamos una bajada muy pronunciada como un puerto de montaña no es recomendable utilizar la retención.
Baterías en lugar de depósito de combustible
Otro de los aspectos que nos ha parecido curiosos en este nuevo modelo es que los elementos vitales del coche, como es la estructura, no han necesitado, según Seat una reestructuración.
Es decir, se ha utilizado el lugar donde estaba el depósito de combustible para introducir las baterías y se ha cambiado el motor de combustión por el eléctrico.
En este sentido, las baterías son de iones de litio y tienen una capacidad útil de 32,3 kWh (cifra que sube hasta los 36,8 kWh de capacidad total).
Y, aunque desconocemos el peso de las baterías, puesto que Seat no ha faciliado ese dato, sí conocemos que el peso del vehículo ronda los 1.235 kilos, unos 300 kilos más que una versión de combustión de gasolina.
Esta solución de ingeniería es cuanto menos curiosa ya que todos los valores del coche se mantienen intactos.
Hablamos de la longitud (3,55 metros), de la anchura (1,64 metros) y de la altura (1,48 metros). Además la distancia entre ejes tampoco varía (2,41 metros). Y lo mismo ocure con el maletero que tampoco pierde capacidad y se queda en los 251 litros.
Autonomía
En cuanto a la autonomía con la batería mencionada de 32,3 kWh de capacidad, Seat anuncia una autonomía de 259 km con una sola carga, según el ciclo combinado de homologación WLTP, una cifra que aumenta hasta los 358 km en el uso urbano.
Durante nuestra prueba de alrededor de 100 kilómetros, nosotros hemos tenido un consumo de 15 kWh en autopista y carretera convencional y de 10 kWh en ciudad. Por tanto, sí que pensamos que esta autonomía es factible y que, al menos, los 200 kilómetros se pueden alcanzar, sobre todo si se circula en ciudad.
Recordamos en este sentido que de serie viene con un enchufe convencional (el cable con el Modo 2 es opcional) y que la toma de carga (Seat ha firmado un acuerdo con la empresa Wallbox) también se incluye en el vehículo (la toma de carga tiene un precio de unos 720 euros). Esta toma de carga puede recargar el vehículo a 7,4 kW.
Lo que no se incluye en el vehículo es la instalación, es decir el cableado necesario para tener corriente en la toma. En este sentido, desde Seat señalan que la instalación viene a costar entre 600 y unos 1.500 euros, dependiendo de los metros de cable necesarios.
Tiempos de carga
Es otro de los apartados interesantes, a tener en cuenta sobre este eléctrico. Sobre todo porque al no contar con una batería excesivamente grande los tiempos de carga no son tan elevados como en otros modelos, aunque todo dependerá del tipo de conexión que tengamos.
En este sentido, y siempre según la información facilitada por Seat, estaríamos hablando de los siguientes tiempos de recarga:
Modo
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Fuente
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Potencia
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Amperios
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Tiempo – 0 a 80%
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Modo 2
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Enchufe doméstico Schuko
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2,3 kW AC
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10A
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13-16 horas
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Modo 3
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Enchufe doméstico Mennekes
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7,2 kW AC
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32A
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4 horas
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Modo 4
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Carga rápida con CCS
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40 kW DC
7,2 kW AC |
32A
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1 hora
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Coche conectado
Además, es el primer coche de la marca que ofrece el sistema de conectividad Seat Connect, que permite la conexión con el teléfono móvil y que permite consultar el estado de la batería, gestionar el proceso de la carga, conocer los datos de conducción del vehículo, localización, accionar el climatizador a distancia…
Conclusión
Frente a muchos eléctricos que son difíciles de justificar, este modelo sí nos parece un coche coherente de cero emisiones.
En primer lugar, porque es un coche pequeño, pensado para la ciudad. Y, a nuestro juicio, los eléctricos tienen que ser precisamente eso: coches urbanos.
Además, cuenta con una autonomía razonable. Con unos 200 kilómetros asegurados y unos 250 kilómetros posibles (con un consumo de 15 kWh en carretera y unos 10 kWh en ciudad), estaríamos hablando de una o dos cargas completas semanales, a unos 50 kilómetros diarios. Por lo tanto, no sería necesario cargarlo todos los días.
Si tenemos en cuenta ese consumo (unos 12 kWh de media) y pagando la electricidad en casa ronda a 0,19 € el kWh estaríamos hablando de un gasto cada 100 kilómetros de unos 2,28 euros.
Entre los aspectos mejorables, destacamos que con los modos Eco+ la climatización, por ejemplo, no funciona. Y también pensamos que habría sido una buena oportunidad para hacerle un lavado de caro y actualizarle ligeramente, ya que a nuestro juicio desde el punto de vista estético y en el apartado de información y entretenimiento, está algo desfasado.
Valoración
Diseño: 6
Espacio interior y maletero: 8,5
Motor, cambio y prestaciones: 6,5
Confort y terminación: 7
Equipamiento en seguridad y tecnología: 7
Diversión al volante: 5
Precio: 9