Llega el momento de cambiar de coche. Es entonces cuando nos surgen las primeras preguntas. ¿Compro un coche SUV o un turismo tradicional? ¿Un coche de gasolina? ¿Un diésel? ¿Un híbrido?
Pues bien a estas dudas (que son normales) ahora, con la inclusión de nuevas normativas, hay que sumar otras variables a la ecuación. Hablamos de plantearnos diferentes alternativas a la compra y adquisición de un vehículo.
Es decir, incorporar nuevas posibilidades como la opción de un renting o bien o un leasing. Pues bien para saber si es mejor la compra de un coche o un renting, vamos a intentar averiguarlo a continuación.
Y para ello vamos a tomar como ejemplo, un coche con un buen nivel de ventas: el Hyundai Tucson. Analizaremos los gastos que supone comprar este modelo o contratar por renting este SUV.
Para ello hemos elegido el Tucson con el motor 1.6 CRDI de 116 CV, cambio manual y el acabado acabado SLE.
Gastos de la compra de un coche
Comenzando por el precio del coche, este Hyundai Tucson tiene un precio al contado de 31.515 euros. Si optamos por la financiación de la marca (a 48 meses) obtenemos que esta cifra inicial del coche se queda en 25.481 euros como oferta, que será el precio a financiar y que nos sale una cuota de 379,24 euros al mes, sin entrada, según señala la página de compra online de coches carwow.
Como contrapartida, este contrato con la financiera incluye una cuota final de 12.740 euros. Y a ello hay que sumar el precio del mantenimiento (calculamos unos 1.600 euros con un cambio de neumáticos), el del seguro (unos 2.600 euros) y el de los impuestos municipales (500 euros).
Sin embargo, también hay que tener en cuenta que un coche es un activo. Es decir es un bien con un valor determinado que se devalúa (en torno al 60% al quinto año según Carfax) pero del que podremos sacar un rendimiento si, al cabo de unos años, lo vendemos con un vehículo de ocasión.
Por ello en la ecuación también tenemos que añadir la cifra de dinero que conseguiríamos si vendemos el coche al cabo de cuatro años. Una cifra que nosotros hemos estimado en 17.000 euros con una devaluación aproximada del 46%.
Con todo ello, hemos obtenido que el gasto total del vehículo ha sido de 35.643 euros, cifra a la que hay que restar los 17.000 euros de la venta del coche en cuatro año como un vehículo de ocasión. Por tanto, esto nos queda un gasto real por este coche en cuatro años de 18.643 euros. Una cifra que si la calculamos al mes, nos sale que el gasto real es de 388 euros.
Conviene recordar que, a cambio, tenemos la ventaja de no contar con una limitación en el kilometraje, como sí ocurre con el renting. A continuación detallamos lo que supone la compra del vehículo:
Gastos | Compra Hyundai Tucson |
PVP del vehículo | 31.151 euros |
Precio con oferta | 25.481 euros |
Financiación / Contrato | 4 años |
Cuota mensual | 379,24 euros |
Cuota final | 12.740 euros |
Seguro (4 años) | 2.600 euros |
Mantenimiento y ruedas | 1.600 euros |
Impuestos | 500 euros |
Gastos total vehículo | 35.643 euros |
Kilometraje | Ilimitado |
Valor del vehículo VO a 4 años | 17.000 euros (aprox.) |
Gasto real (4 años) | 18.643 euros |
Gasto real (mensual) | 388,39 euros |
Adquirir un coche por renting
Ya conocemos el coste que tiene la adquisición de un vehículo. Ahora vamos a analizar el gasto que supone esta misma unidad con un coche de renting.
A la hora de optar por el renting lo primero que hay que tener en cuenta es que desaparece el concepto de propiedad. Entre otras razones, porque el coche no es nuestro si firmamos un contrato de renting. El coche sigue siendo de la compañía con la que hemos sellado el contrato.
Esto es muy importante a tener en cuenta porque, a diferencia de la compra, lo que estamos haciendo es contratar movilidad durante un período de tiempo (por ejemplo de cuatro años). A cambio lo que hacemos es pagar una cuota mensual. De esta manera, lo que nos evitamos principalmente es la compra y la depreciación del vehículo.
También hay que tener en cuenta que no pagaremos por los costes de mantenimiento del vehículo, si bien sí estaremos limitados por los kilómetros a recorrer en un año (o en todo el período, que en el ejemplo el límite está en 60.000 kilómetros).
Como contrapartida, empresas de renting como ALD Automotive señalan que esta opción hay que tenerla en cuenta principalmente en el contexto actual, con una legislación cambiante y con una transformación en los hábitos relacionados con la movilidad.
No obstante, desde ALD Automotive señalan: "Sin embargo, cada modalidad se debe seleccionar de acuerdo a las necesidades, las condiciones y los intereses de cada cliente".
En este sentido, la compañía ha destacado que entre las ventajas del renting se encuentran que no es necesario realizar una gran inversión y el usuario sabe "con certeza" la cuota mensual a pagar.
En este sentido, por ejemplo, con el ejemplo que hemos seleccionado, nos sale que la cuota de este mismo coche (el Hyundai Tucson mencionado), con el IVA incluido, es de 415 euros al mes, lo que supone un gasto de 19.920 euros al cabo de cuatro años.
Gastos | Renting |
PVP del vehículo | |
Precio con oferta | |
Financiación / Contrato | 4 años |
Cuota mensual con IVA | 415,03 euros |
Cuota final | |
Seguro (4 años) | |
Mantenimiento y ruedas | |
Impuestos | |
Gastos total vehículo con IVA | 19.921 euros |
Kilometraje | 60.000 kilómetros |
Valor del vehículo VO |
Compra vs. Renting: todos los gastos
Pues bien para finalizar recogemos en este cuadro cuáles son los gastos de las diferentes opciones (compra o renting).
Hay que tener en cuenta, eso sí, que estamos hablando de unos gastos aproximados y que varían dependiendo del tipo de seguro escogido y, sobre todo, del precio del valor de venta del coche comprado como vehículo de ocasión.
Aun así, tal y como se puede ver en la siguiente tabla, observamos que al final la cuota mensual entre la compra y el renting no es tan diferente para el coche elegido: un Hyundai Tucson 1.6 CRDI de 116 CV, cambio manual y acabado acabado SLE.
Gastos | Compra | Renting |
PVP del vehículo | 31.151 euros | |
Precio con oferta | 25.481 euros | |
Financiación / Contrato | 4 años | 4 años |
Cuota mensual | 379,24 euros | 415,03 euros |
Cuota final | 12.740 euros | |
Seguro (4 años) | 2.600 euros | |
Mantenimiento y ruedas | 1.600 euros | |
Impuestos | 500 euros | |
Gastos total vehículo | 35.643 euros | 19.921 euros |
Kilometraje | Ilimitado | 60.000 kilómetros |
Valor del vehículo VO | 17.000 euros (aprox.) | |
Gasto real (4 años) | 18.643 euros | 19.921 euros |
Diferencia (4 años) | -1.278 euros | |
Gasto real (mensual) | 388,39 euros | 415,03 euros |
Diferencia (mensual) | -26,64 euros |
Por tanto, tal y como se puede ver en esta tabla, optar por un renting con estas condiciones tiene un sobrecoste de unos 1.278 euros, unos 26 euros más mensuales.
Pero recalcamos una vez más que estas cifras son orientativas, ya que depende del seguro contratado, del mantenimiento, del precio de venta del vehículo como segunda mano.
No obstante, sí es una orientación para saber que el renting ya se está convirtiendo en una posibilidad para los conductores.
La compra de un coche, que sigue siendo la opción más demandada por los usuarios, cuenta ahora con la ventaja de que se están ofreciendo grandes descuentos.
Y, el renting, por su parte, cuenta con que el usuario sabe siempre cuál es la cuota mensual que pagará por su vehículo. Además, no se compromete con ninguna tecnología, algo que es clave ante una normativa cambiante.
¿Y el leasing?
Tampoco podemos descartar el leasing, que se trata de un alquiler con derecho a compra. Esto último permite al usuario acceder a un vehículo durante un tiempo mediante el pago de una cuota y al término de ese periodo, puede devolver el coche o comprarlo.
Entre las diferencias con el renting, se encuentra que el cliente es quien administra el vehículo, es decir, tiene que cubrir los costes de mantenimiento por su cuenta.
"Son, sin duda, tres opciones que están disponibles en la actualidad para los conductores. Para decidirse por una modalidad u otra el cliente debe hacer un análisis de sus necesidades de movilidad en el momento en el que se encuentra, teniendo en cuenta los kilómetros que puede realizar al año, los costes del mantenimiento del vehículo y por supuesto el desembolso económico que está dispuesto a asumir", explican desde ALD Automotive.