En 2004, hace ya la friolera de 16 años, Seat convocaba a la prensa en sus instalaciones del Centro de Diseño de Sitges (hoy ya no existen porque todo se centraliza en Martorell, Barcelona) para conocer de primera mano un coche que nos dejaría con la boca abierta.
Se trataba del ‘Seat Toledo Prototipo’, un modelo que anticipaba el que sería el Seat Toledo de tercera generación y que estuvo a la venta entre los años 2004 y 2009.
Este Seat Toledo no solo era un coche original por sus formas (mezclaba conceptos como los de monovolumen y berlina) sino también por sus colores.
Y decimos colores puesto que fue uno de los primeros coches que pudimos ver en la industria de la automoción ‘pintado’ en dos colores.
Aquello, además, no solo fue una unidad para llamar la atención. También fue un coche que se comercializó y se vendió.
Si bien es cierto que aquella carrocería bicolor no ‘triunfó’ de manera elocuente, sí podemos llegar a pensar que fue un anticipo de lo que hoy en día consideramos algo normal. Hablamos de las carrocerías bicolor, de coches que tienen dos colores.
Aunque Seat dio un paso más en aquel momento, también hay que reconocer que fueron otros los fabricantes que, previamente se habían atrevido con mayores dosis de personalización.
Por ejemplo, Mini en su Mini de primera generación de la era moderna, bajo el sello de BMW, ya se atrevía a pintar los techos del coche de un color diferente de la carrocería.
Este techo bicolor, en cambio, es una opción que ofrecen casi todos los fabricantes y que, además, suele ser muy demandada.
Entre otras razones porque los usuarios o clientes de automóviles buscan, cada vez más, personalizar el vehículo, para que su coche no sea igual que el que tiene, por ejemplo, el vecino del barrio.
Sin embargo, lo que suele trascender es que la personalización se paga, porque eleva complejidad en la fabricación del coche.
Hay que tener en cuenta que un coche con un techo bicolor es un coche “que se pinta dos veces”, señalan a El Español fuentes de una de las fábricas más importantes de coches en España.
En concreto el coche recibe una primera capa de pintura para toda la carrocería y después una segunda capa solo para el techo con una tonalidad diferente.
El Opel Mokka tiene dos colores
Pues bien, ahora Opel ha dado un paso más allá a esta personalización del techo bicolor y nos presenta, con la nueva generación del Mokka, un coche con dos colores.
En concreto, este nuevo Opel Mokka con la posibilidad de disfrutarlo con la carrocería bicolor será una opción tanto de la versión 100% eléctrica (Opel Mokka-e) como de la variante con motores de combustión.
En este sentido, Opel han optado por incorporar un primer color a la parte inferior de la carrocería, de la línea inferior de las ventanillas hacia abajo) y un color diferente al techo. Además, a esta solución, se suma la posibilidad de incorporar un capó también en el mismo color que el techo.
De esta manera, la sensación que ofrece el nuevo Opel Mokka es que está pintado a dos colores, uno para superior y otro para la parte inferior.
Opel que lo ha denominado revestimiento negro ofrece esta opción en el acabado más alto de gama del nuevo Opel Mokka que se corresponde con el nombre de GS Line.
Nuevo SUV urbano
Dejando, no obstante, la curiosidad de los dos colores, conviene tener en cuenta que estamos ante uno de los lanzamientos de Opel más importantes de los últimos años. Este nuevo Opel Mokka, la segunda generación de este modelo, es un SUV de tamaño reducido y orientación urbana.
Con sus 4,15 metros de largo y 2,67 metros de distancia entre ejes el Opel nuevo Mokka destaca porque tiene una longitud muy contenida y, en cambio, su batalla (la mencionada distancia entre ejes) es muy grande.
Por longitud vemos que se sitúa muy cercano a los más pequeños de la categoría, como son el Volkswagen T-Cross (4,11 metros), Seat Arona (4,13 metros), Kia Stonic (4,14 metros), Citroën C3 Aircross (4,15 metros) o Hyundai Kona (4,16 metros), entre otros.
A continuación, en esta tabla, se puede ver cuáles son los rivales del Opel Mokka por su longitud…
Modelo | Largo | Ancho | Alto |
Ford Puma | 4.20 | 1.80 | 1.53 |
Audi Q2 | 4,19 | 1.79 | 1.51 |
Kia e-Soul | 4.19 | 1.80 | 1.60 |
Suzuki Vitara | 4.17 | 1.77 | 1.61 |
Hyundai Kona | 4.16 | 1.80 | 1.55 |
Citroën C3 Aircross | 4.15 | 1.75 | 1.59 |
Opel Mokka | 4.15 | - | - |
Kia Stonic | 4.14 | 1.76 | 1.52 |
Seat Arona | 4.13 | 1.78 | 1.55 |
Volkswagen T-Cross | 4.11 | 1.78 | 1.55 |
Ford EcoSport | 4.09 | 1.76 | 1.65 |
Sin embargo, por distancia entre ejes, con los 2,67 metros, el Opel Mokka de los más grandes de la categoría tal y como se puede ver a continuación:
Modelo | Distancia entre ejes |
Opel Mokka | 2,67 |
Skoda Kamiq | 2,65 |
Nissan Juke | 2,63 |
Peugeot 2008 | 2,60 |
Seat Arona | 2,56 |
Volkswagen T-Cross | 2,56 |
Volkswagen T-Roc | 2,59 |
Interior digital
Junto a los dos colores de la carrocería, la distancia entre ejes grande, los voladizos cortos... el Opel Mokka también se caracteriza por un interior completamente digital.
De esta manera, el cuadro de instrumentos digital tiene hasta 12 pulgadas de diámetro y la pantalla central también digital puede tener entre 7 y 10 pulgadas.
En cuanto a la gama de motores, este nuevo Opel Mokka está disponible con motores de combustión y un motor eléctrico 100%.
Los motores de combustión son:
• 1.2 gasolina 100 CV | Manual 6 velocidades
• 1.2 gasolina 130 CV | Manual 6 velocidades
• 1.2 gasolina 130 CV | Automático 8 velocidades
• 1.5 diésel 110 CV | Manual 6 velocidades
Además, también está disponible el Opel Mokka-e, que incorpora un sistema de propulsión 100% eléctrico similar al del Peugeot e-208 y Peugeot e-2008.