Era una de las cuestiones que tarde o temprano también terminarían afectado al automóvil, principalmente en la transición a la movilidad eléctrica en la que nos encontramos.

Hablamos de las continuas subidas de la luz de las últimas semanas que, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), podrían empezar a tener repercusión en el bolsillo de los propietarios de un vehículo eléctrico.

Esta organización señala que recargar actualmente un coche eléctrico supone un coste anual de 447 euros con una distancia total recorrida de 10.000 kilómetros. Estas cifras toman como referencia los precios de la luz en la semana del 24 al 30 de septiembre.

Por el contrario, si tomamos como referencia, la media mensual de todo el mes de septiembre, la OCU señala que el coste anual sería de 302 euros. Esto significa que recargar el coche con los precios de hace una semana tendría un coste anual 145 euros inferior.

Y, por último, si lo que hacemos es analizar la media anual del pasado año, el coste de 10.000 kilómetros sería de 190 euros, según esta organización.

Por tanto, con la escalada de precios de la luz estaríamos hablando de que se ha pasado de 190 euros anuales a los actuales 447 euros, es decir, que ha aumentado en 257 euros.

Para realizar este cálculo, la OCU ha estimado unos 10.000 kilómetros al año recorridos por un usuario. Un kilometraje que se traduce en unos 2.000 kWh de electricidad para un coche eléctrico. Este cálculo se está realizando sobre un consumo medio de unos 20 kWh cada 100 kilómetros, una cifra que incluso podríamos decir que es 'tirando a alta'.

En cuanto a las tarifas, la OCU ha tomado como referencia la hora valle que suponía, según esta organización, un coste de 0,09 euros en 2020 de media anual y un coste actual de 0,22 euros según los precios de la semana del 24 al 30 de septiembre. Esto supone un incremento del 59% respecto a 2020 y del 135% si se toma la última semana de referencia.

¿Merece la pena el coche eléctrico?

Ya sabemos lo que cuesta la recarga de un coche eléctrico con la subida de la luz. Ahora, la cuestión, por tanto, es… ¿Merece la pena frente a un coche diésel o de gasolina? Pues bien para responder a esta cuestión la OCU ha tomado como referencia un consumo medio de 6 litros para un diésel (que es algo elevado) y de 7 litros para un gasolina.

Y para ello ha comparado los precios de la gasolina en 2020 (cuando costaba 1,17 euros) y los de la última semana (1,43 euros).

Y lo mismo con el diésel con 1,07 euros hace un año y 1,29 euros hace algunos días:

Pues bien, según estas cifras tenemos el siguiente cuadro:

Y ahora por tanto el coste final… Según todas estas cifras tenemos que recorrer 10.000 kilómetros con un eléctrico tendría un coste de 447 euros, con un coche de gasolina serán 1.006 euros y con un diésel son 775 euros.

En definitiva, el coche eléctrico, siempre que se realice la recarga lenta y en horas valle, sigue mereciendo la pena, a pesar del incremento de la luz.

Por lo tanto, y en definitiva, el coche eléctrico sigue meriendo la pena en términos de pago por consumo. Otra cuestión será la diferencia entre el precio de un coche de combustión y uno eléctrico y saber en cuánto tiempo se amortizará la inversión.

En este sentido, desde la OCU señalan que el plazo para amortizar la diferencia de precio ente un coche eléctrico y un modelo convencional equivalente se ha alargado en torno a un año y medio. En definitiva, un nuevo escollo para la implantación del coche eléctrico que veremos cómo evoluciona.