Una de las grandes dudas que presenta el coche eléctrico (aquí se pueden ver todos los coches eléctricos a la venta en España) es cuánto tiempo tarda una recarga. La situación idónea en un coche eléctrico es que cargue por la noche de forma lenta

Este tipo de cargas son más propicias porque el precio de la luz es más económico, la demanda de electricidad más baja, y las baterías se conservan mejor

Pero, lo cierto es que también hay momentos en los que necesitamos una carga rápida. Todos nos hemos visto en situaciones en las que vamos justos de autonomía y tenemos que continuar la marcha…

O bien en otras en las que tenemos que realizar un viaje de larga distancia no llegamos a nuestro destino así que no nos queda otra que cargar por el camino. Son circunstancias, todas ellas, donde necesitamos una carga rápida.

Por este motivo nos hemos preguntado… ¿Cuánto tarda la carga rápida en un coche eléctrico? ¿Cuánto cuesta? ¿A qué velocidad se recarga?

Mensaje en el cuadro señalando que solo nos queda un 9% de batería.

Hacemos una recarga rápida con un Volkswagen ID.4

Pues bien para responder a estas preguntas le hemos pedido a la filial española de Volkswagen que nos ceda una unidad del Volkswagen ID.4 para comprobarlos en primera persona.

Recordamos en este sentido que el Volkswagen ID.4 es uno de los últimos coches eléctricos en salir al mercado y que se caracteriza por ser un SUV de tamaño grande y amplio espacio interior. Es, además, el quinto coche eléctrico más vendido en España solo por detrás del Tesla Model 3, Kia Niro, Renault Zoe y Fiat 500.

Listado de estaciones de carga cercanas a nuestra posición.

Elegimos la red de carga de Ionity

Y para saber cómo carga de rápido, en cuánto tiempo y cuánto cuesta nos hemos ido a una de las redes de carga, probablemente, con más prestigio, si bien también con un precio muy elevado.

Hablamos de Ionity, que cuenta con una estación de carga en Madrid (en la gasolinera Cepsa de Campo de las Naciones) que destaca por su elevada potencia de carga y buen funcionamiento.

Recordamos en este sentido que Ionity comenzó en 2017 como una joint venture de BMW, Daimler, Ford y el Grupo Volkswagen. Todos estos fabricantes se aliaron para crear una red de carga de alta potencia para vehículos en Europa. Inicialmente el objetivo era que Ionity tuviera 400 estaciones de carga en 2020. Hoy, a finales de 2021, cuenta con 379 estaciones de carga y se están construyendo 38. Por tanto, podemos decir que la red de Ionity estará formada por 417 estaciones de carga.

Además, para algunos países Ionity se aliaba con Shell y para otros como es España optaba por Cepsa firmando un acuerdo para instalar hasta 100 puntos de recarga ultrarrápida (hablamos de cargadores no de estaciones de servicio). Hoy, la red Ionity cuenta con cerca de 11 estaciones de recarga y varias decenas de puntos de carga ultrarrápida. La previsión es que en 2021 estén listas 35 estaciones de servicio de Cepsa con Ionity.

Estación de carga de Ionity en Campo de las Naciones, en Madrid.

Hasta cuánto puede cargar una recarga rápida

Estos puntos de recarga se caracterizan porque son ultrarrápidos. Para ello cuentan con el sistema de carga combinada (CCS), un estándar europeo que utilizan los vehículos eléctricos actuales y futuros. Esta red de carga de Ionity tiene una potencia de hasta 350 kilovatios (kW)…

Sin embargo, hay que reconocer que no todos los coches eléctricos admiten esa potencia. De hecho, podemos decir que solo lo admiten los coches eléctricos que cuentan con una arquitectura de 800 voltios que son Porsche, Audi, Hyundai y Kia.

De esta manera, por ejemplo, el Porsche Taycan y el Audi e-Tron GT pueden cargar a un máximo de 270 kW. Y Hyundai y Kia pueden cargar hasta 240 kW. Ambas cifras, por tanto, permiten cargas muy rápidas y entre 20 y 30 minutos podemos tener la batería al 80%.

El Volkswagen ID.4 pudo cargar hasta 128 kW de potencia.

Cargamos el Volkswagen ID.4

Hasta aquí, la teoría. Ahora vamos con la práctica. Y para ello lo que hacemos es dirigirnos con el Volkswagen ID.4 a la estación de carga de Ionity de Campo de las Naciones, en Madrid. Son las 9 y 15 minutos de un día laborable y cuando llegamos a la estación vemos que solo hay un coche recargando en los cargadores de Ionity. Esto significa, por tanto, que nos quedan tres libres.

Aparcamos junto a uno de ellos e iniciamos el proceso de carga. Previamente nos hemos descargado la aplicación en el móvil (en realidad lo habíamos hecho meses antes) y accionamos la aplicación. Sin embargo, algo no funciona. Comienzan los problemas. La aplicación nos sale un mensaje muy 'raro' señalando que no hay conexión a internet del teléfono, cuando el móvil tiene cobertura de datos sin problema. Pensamos que es un error de la aplicación, así que llamamos por teléfono al número que aparece en el poste de carga.

Nos comenta que puede que no tengamos la aplicación actualizada correctamente y nos surgiere pagar directamente con el móvil. Para ello tendremos que leer un código QR en la estación de carga, que nos llevará a una web de pago de Ionity. Y ahí únicamente metemos los datos de la tarjeta para decirnos que ya podemos proceder a la recarga. El sistema lo que nos ha hecho es cargar un euro de prueba para ver que funciona bien y a partir de ahí ya nos dejará suministrarnos.

La recarga ultrarrápida nos permitió una autonomía de unos 80 km por 10 euros.

Comenzamos la carga

Son las 9:22 de la mañana… Hemos tardado unos 7 minutos en el proceso de aparcar el vehículo, comprobar que nuestra 'app' no funcionaba, llamar a atención al cliente y pagar de nuevo con el móvil por medio de una pasarela de pago en el navegador web.

A partir de aquí, ya no tendríamos que tener inconveniente alguno. Una vez conectada la manguera, el poste de carga comienza a prepararse para cargar. Y empieza con 69 kW para segundos después alcanzar la potencia de 129 kW… Es lo máximo que hemos visto cargar en el Volkswagen ID.4.

Nuestra intención es simular una recarga rápida. Es decir, llegar con muy poca batería (en torno al 9% y una autonomía de 45 kilómetros), cargar rápido y continuar la marcha. Así que continuamos observando cómo aumentan los kWh de la batería hasta llegar a la cifra de 14 kWh. Hemos decidido cortar aquí, porque es, más o menos, el consumo que estamos haciendo a este coche cada 100 kilómetros.

Así que ahora toca parar el cronómetro y ver cuánto ha tardado. Y aquí está la clave. Con esta recarga ultrarrápida el Volkswagen ID.4 ha tardado aproximadamente unos 8 minutos en cargar los 14 kWh que necesito para otros 100 kilómetros. Por lo tanto, podemos decir que la recarga ha sido todo un éxito en lo que a rapidez se refiere.

El Volkswagen ID.4 es un SUV 100% eléctrico.

Cuánto vale la carga rápida

Aquí es donde está el quid de la cuestión. Ionity nos ha cobrado 10,54 euros por estos 14 kWh, lo que supone un coste aproximado de unos 0,75 euros el kWh. Además, también nos ha retenido un euro adicional para comprobar que el cobro se podía hacer con esta tarjeta. Ionity en su web habla de 0,79 euros el kWh. Y también ofrece una opción de cobrar el kWh a 0,35 euros si se opta por una suscripción de 17,99 euros al mes.

Una vez dentro del coche comprobamos que ahora tenemos autonomía para 127 kilómetros (antes de la carga la autonomía era de 45 kilómetros). Por lo tanto, esto supone que hemos cargado en 8 minutos para recorrer unos 82 kilómetros y con un coste de unos 10,5 euros. En el caso de contar con la tarjeta de Ionity el coste sería de 4,9 euros cada 100 kilómetros.

Conclusión

La recarga rápida es cara. De esto no hay duda. Y además, están las dudas de si este tipo de recargas podría perjudicar el uso de la batería. Si a esto sumamos la recarga ultrarrápida de redes como la de Ionity, todavía veremos que es más cara todavía con unos 12 euros por cada 100 kilómetros recorridos.

A cambio, este tipo de estaciones de recarga nos permiten poder emprender viajes sin temor a quedarnos sin batería en un eléctrico. Y también nos sirve de conclusión que los coches eléctricos sí están preparados para este tipo de recargas ultrarrápidas... Y la tecnología solo acaba de llegar. Así que imaginemos cómo puede cambiar la movilidad en cuestión de décadas…