La Comunidad de Madrid agotó a finales de septiembre las ayudas para la compra de coche eléctrico y para la instalación de puntos de recarga, según ha podido saber EL ESPAÑOL de fuentes de la Consejería de Medioambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid.
En concreto, desde que comenzara el Plan Moves 3 de ayudas a la movilidad eléctrica, Madrid ha gestionado un total de 134,4 millones de euros de los que 83,1 millones se corresponden con ayudas a los vehículos y 51,3 millones son subvenciones para puntos de carga.
Estas subvenciones se han recibido a lo largo de varios pagos. Una primera aportación inicial de 57,15 millones asignados por la población de Madrid, seguida de varias ampliaciones de fondos por valor de 81,4 millones y que se corresponden con la demanda de coches eléctricos y puntos de recarga.
Estos fondos, que se han distribuido a los solicitantes "según estricto criterio de orden de llegada", se "agotaron a finales de septiembre al asignarse todas las ayudas a las personas y empresas que habían gestionado algún tipo de solicitud", afirman desde la consejería de la Comunidad de Madrid.
"Por ello se ha abierto una lista de espera ordenada también por orden cronológico. Actualmente hay 204 solicitudes en esta lista de espera y por ello se estima solicitar una cuarta ampliación de fondos en las próximas semanas que pueda cubrir todas las solicitudes que se presenten hasta final de año", concluyen.
Cuánto dinero queda de ayudas a los eléctricos
Puestos en contacto con el IDAE, desde este organismo nos recuerdan que todo el dinero atribuido a las diferentes comunidades, como es el caso de la Comunidad de Madrid, ha sido transferido y está en poder de los diferentes gobiernos autonómicos, como es el caso de Madrid.
Por tanto, "son las diferentes comunidades las que tienen que solicitar las ampliaciones de fondos cuando lo consideran necesario en función de las solicitudes recibidas y su ritmo de gestión", afirman fuentes del IDAE. "Por tanto, cada una establece su calendario", afirman.
En relación con el dinero que queda, según el IDAE "de la dotación total de 1.200 millones de euros del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia se han asignado 909,6 millones, quedando así un remanente de 290,3 millones de euros".
Esta es la cifra que queda actualmente. Unas ayudas que en agosto y septiembre no han variado puesto que ninguna comunidad ha pedido nuevas subvenciones. En este sentido, desde el IDAE señalan que si alguna comunidad pide nuevas ayudas "se atenderán sus peticiones con toda celeridad mientras haya presupuesto disponible y según los criterios establecidos".
Además, desde este organismo también recuerdan que la "fecha límite para que las comunidades soliciten fondos del Plan Moves 3 es el 31 de diciembre de 2023".
¿Por qué se tarda tanto en recibir las ayudas?
Es una de las preguntas del millón. Entre otras razones porque hay usuarios que pueden llegar a tardar más de un año e incluso dos años en recibir las subvenciones. En este sentido, desde el IDAE afirman que el plazo entre que la comunidad pide la ayuda y este organismo atiende la subvención es de "menos de un mes".
Lo cierto es que cuando un usuario instala un punto de recarga o compra un coche eléctrico se genera un proceso que es complicado. Una vez que se realiza la compra o la instalación se crea un documento que se conoce como Boletín de Solicitud de Incentivo (BOSI) y se genera un expediente.
Y a partir de ahí será el usuario y la compañía instaladora o el concesionario los que tendrán que aportar un gran número de documentación (boletín de solicitud, DNI, certificado de residencia fiscal en España, certificado de obligaciones al frente de la Agencia Tributaria, certificado de obligaciones frente a la Seguridad Social, certificado de no tener deudas con la comunidad correspondiente)...
Toda esta documentación se deberá presentar para solicitar la ayuda en una primera fase. Y una vez que se revise la documentación, habrá que subir una nueva documentación que deberá presentar en un plazo de 18 meses. Después se volverá de nuevo a subir el resto de documentación para que el organismo que gestiona las ayudas -en Madrid es la Fundación de la Energía de la Comunidad de Madrid– vuelva a revisar los documentos.
En este sentido, desde compañías instaladoras de puntos de recarga consultadas por EL ESPAÑOL nos señalan que en la Comunidad de Madrid "cientos de expedientes apenas han avanzado durante meses" si bien últimamente sí han notado "más ritmo".
Una lentitud que viene determinada porque cada fase tiene un extenso margen de validación y porque, además, no todos los "instaladores invierten en tener personal dedicado exclusivamente para la gestión de subvenciones", nos comentan.
Por ello es fundamental también que la empresa instaladora cuenta con personal dedicado íntegramente a esta labor, que de media estos expedientes "tardan alrededor de 12 meses" en recibir el dinero, señalan.
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