Agosto sigue siendo el mes elegido por la mayoría de ciudadanos para disfrutar de las vacaciones estivales. De hecho, es el que concentra el mayor número de desplazamientos de larga distancia del año, según la DGT están previstos 48,3 millones de salidas. En esta época, es frecuente cruzarse con coches cargados hasta arriba con todo tipo de objetos. Y es que algunas familias parece que vayan a mudarse de casa en lugar de ir a pasar unos días de descanso

Seguro que no es la primera ni la última vez que nos vemos en la tesitura de tener que colocar el equipaje en el maletero y que ocupe más espacio del que realmente admite. En estos casos, algunos optan por llevar el maletero hasta arriba. Pero aquí no hay duda: ocupar toda la parte trasera no está permitido, ya que se atenta contra seguridad vial. Así, acarrea una multa de 200 euros y la retirada de hasta 3 puntos del carné de conducir. 

Concretamente, su regulación la encontramos en el artículo 14 del Reglamento General de Circulación, el cual reza de la siguiente manera: "la carga transportada en un vehículo, así como los accesorios que se utilicen para su acondicionamiento o protección, deben estar dispuestos y, si fuera necesario, sujetos".

Imagen de archivo de un maletero.

La sujeción de estas maletas debe ser tal que no puedan "arrastrar, caer total o parcialmente o desplazarse de manera peligrosa, comprometer la estabilidad del vehículo". Tampoco de tal forma que produzcan "ruido, polvo u otras molestias que puedan ser evitadas" o que puedan "ocultar los dispositivos de alumbrado o de señalización luminosa, las placas o distintivos obligatorios y las advertencias manuales de sus conductores". 

Sin embargo existen excepciones, ya que se puede obstruir la visión a través de la luneta posterior, siempre y cuando se cumpla lo que establece el Reglamento de Vehículos respecto a los retrovisores que debe equipar el coche en el caso de que el central quede inhabilitado por alguna circunstancia.

Así, será imprescindible que el vehículo cuente con dos espejos exteriores (izquierdo y derecho), cuando el interior esté inutilizado. Esto no debe suponer ningún problema, ya que la mayoría de turismos equipan de serie retrovisores en ambos lados, aunque tan solo estén obligados por normativa a llevar el izquierdo y el central.

Si cuentas con los dos retrovisores exteriores, no debería suponer un problema no contar de manera puntual con visibilidad por la luneta trasera. No obstante, si las autoridades detectan deficiencias en el vehículo en cuestión y estas, se consideran un peligro que pueda poner en compromiso la seguridad vial, podría acarrear una multa de hasta 200 euros e incluso la inmovilización del vehículo.

Consejos de la DGT

El organismo regulador de tráfico pone a disposición de los conductores una serie de recomendaciones y consejos para evitar multas y, sobre todo, accidentes de tráfico por llevar la carga mal colocada:

- En primer lugar, es importante recalcar que todo el equipaje debe estar dentro de las maletas y sujeto con una red de contención, para que no se desplace. Los objetos sueltos (ya sea en los asientos o en la bandeja del maletero, por ejemplo) pueden convertirse en proyectiles: según señala la DGT, a una velocidad de 60 km/h, la inercia multiplica aproximadamente por 56 el peso de objetos y personas.

- Asimismo, la DGT apunta que la carga no debe llegar en ningún caso hasta la parte delantera del habitáculo. En tal caso, deben utilizarse vehículos de transporte como las furgonetas.

- Otro consejo que ofrece el organismo es abrochar los cinturones de seguridad traseros, incluso si no viaja nadie en ellos. De esa manera, en caso de accidente, la carga del maletero no penetrará dentro del vehículo.

- Una mala distribución de las maletas y bolsas puede significar que el vehículo pierda estabilidad. Por lo que deberemos distribuir correctamente la carga, con los objetos más pesados debajo. Y, ten en cuenta que, a diferente peso, diferentes distancias de frenado y reacciones del coche.

- Por último, deberemos colocar una cubierta del maletero, o bien una manta, sobre la carga. Esto no solo garantiza la visibilidad, sino que retiene los objetos que puedan soltarse.