En España, una de las mayores preocupaciones de los conductores es evitar, por todos los medios, que se cumpla o esté próxima la caducidad de sus respectivas inspecciones técnicas. Y es que, circular con la pegatina de la ITV caducada es motivo de multa. No hay justificación que valga: cuando expira la validez de la inspección, hay que ir a renovarla. Sin embargo, a muchos conductores les toca ahora, durante el mes de agosto y en medio de las vacaciones; situación que hace que muchos se echen las manos a la cabeza.

La famosa ITV es una inspección del vehículo obligatoria para certificar que nuestro coche pueda circular por la carretera sin problemas. Por ello, resulta esencial para garantizar la seguridad vial, nuestra y la del resto de conductores y acompañantes. Además, la pegatina es totalmente obligatoria llevarla en el coche.

Sin embargo, tal y como hemos dicho anteriormente, hay situaciones que pueden provocar tensiones al no saber qué se puede hacer si nos pilla de vacaciones. La forma más sencilla y efectiva de evitar problemas es planificar con antelación. Verifica la fecha de vencimiento y, si sabes que estarás de vacaciones cerca de esa fecha, programa la inspección antes de viajar. 

En este sentido, los vehículos pueden renovar su ITV hasta 30 días antes de la fecha de caducidad sin perder días de validez en la nueva pegatina. De esta manera, los conductores se aseguran de salir de viaje con el coche en condiciones y sin riesgos de recibir una multa de tráfico.

No obstante, también puede ocurrir que nos demos cuenta cuando estemos disfrutando de un merecido descanso. Si es así, tenemos la posibilidad de acudir a una estación de ITV cercana al lugar de vacaciones. Y es que se puede pasar la revisión en cualquier otra provincia o comunidad autónoma, con independencia de la que esté matriculado el automóvil. Eso sí, es imprescindible que nos encontremos en España, de lo contrario tendremos que exponernos a dicha sanción. 

Asimismo, desde la DGT aconsejan no pasar la ITV con el tiempo justo, puesto que un resultado negativo supondría resolver los desajustes en el taller de confianza y volver a pedir cita para presentarse de nuevo y superar así el reconocimiento del coche.

En el supuesto caso de tener que pasar la ITV en otra comunidad, debes saber que los precios pueden variar de forma exponencial. Las tarifas dependen de si la gestión de los operadores es pública, privada o mixta. Por ejemplo, en algunas como Madrid las estaciones son privadas y es la zona más cara de España con datos en 2023 de 51 euros de media para los turismos de gasolina. En su contra, las comunidades que tienen los precios más bajos son Extremadura y Mallorca, con unos costes de media de 15 y 17 euros, respectivamente.

ITV caducada

Tal y como se ha mencionado anteriormente, la ITV es un requisito legal obligatorio que asegura que los vehículos en circulación cumplen con los estándares de seguridad y emisiones. 

Circular con la revisión caducada supone cometer una infracción grave que está sancionada con 200 euros, que pueden llegar a los 500 euros si el agente de tráfico considera que las deficiencias detectadas pueden poner en peligro la seguridad vial. En algunos casos, especialmente si ha caducado por un período prolongado, las autoridades pueden incluso inmovilizar el vehículo hasta que pases la inspección. 

Además, también podría tener consecuencias con el seguro. En el desafortunado caso de sufrir un accidente, la compañía de seguros podría negarse a cubrir los daños, alegando que el vehículo no cumplía con las normativas de seguridad en el momento del siniestro.