Sánchez se cita con responsables de SAIC (MG) en China para traer a España una fábrica de coches eléctricos
Galicia y Asturias podrían ser las posibles localizaciones, compitiendo con República Checa y Hungría.
10 septiembre, 2024 02:24Pedro Sánchez trata este martes de avanzar e incluso cerrar uno de los objetivos empresariales del año más importantes para España. En concreto, el presidente del Gobierno tiene como meta convencer a la multinacional SAIC (propietaria de firmas de coches como MG) para que elija España como destino de su próxima fábrica en Europa.
El encuentro tiene lugar este 10 de septiembre, en Shanghái, según ha podido saber EL ESPAÑOL por fuentes cercanas a Presidencia del Gobierno. A la cita acuden Pedro Sánchez y el primer ejecutivo de SAIC a nivel global, Wang Xiaoqiu.
Esta visita de Sánchez a China ha sido organizada por la Fundación Consejo España China que, junto con la Asociación para la amistad del Pueblo Chino con el extranjero, busca plataformas de diálogo entre España y China y fomentar las relaciones comerciales.
El primer día de la visita fue el lunes, día en el que Pedro Sánchez intervino en la inauguración del Foro España-China junto al presidente de la Fundación Consejo España China, Francisco J. Riberas; además de varios altos cargos chinos.
Después, Sánchez, junto con una delegación española en la que están, entre otros, el ministro Carlos Cuerpo, viajó a la zona de Xiong’An, un polo de desarrollo urbano a unos 100 kilómetros de Pekín.
La reunión de este martes es una de las citas clave de la visita de Sánchez. Busca convencer a Wang Xiaoqiu, primer directivo de SAIC, de que elija España para instalar su nueva fábrica de coches eléctricos. Cabe recordar que, en este sentido, SAIC (matriz de MG) ya ha señalado que busca una localización en Europa para esta nueva planta.
Entre los países europeos finalistas que optan a esta nueva planta se encuentran República Checa, Hungría y España. Los países del Este tienen como virtud que la mano de obra es más barata y que han sido elegidos en las últimas decisiones de fabricantes chinos para instalar las nuevas plantas en el viejo continente.
Además, están muy cerca de mercados principales, como el alemán. Como contrapartida, son países que no apuestan por las renovables y están más cerca de zonas de Europa donde puede haber problemas logísticos por los últimos conflictos bélicos, como el Ucrania.
Con estas bazas, Sánchez quiera convencer a SAIC (MG) de que España es un país idóneo para instalar su nueva fábrica. Y cuenta con más argumentos: nuestro país es el segundo fabricante europeo de automóviles, dispone de un gran parque de proveedores en los alrededores de las fábricas y se ha hecho una importante apuesta por las energías renovables con lo que el gasto energético es más favorable.
Más económico
"En los últimos años, España ha bajado el coste de la mano de obra y fabricar en República Checa o Hungría sólo es un poco más barato. Sin embargo, en España al precio de la electricidad es más económico. La diferencia, al final, entre asignar la producción a un país como España o a otro del Este de Europa es de sólo unos pocos euros", señalan a EL ESPAÑOL fuentes conocedoras del proceso de negociación.
Además, España dispone de espacio físico para la instalación de una fábrica de las dimensiones que requeriría SAIC (MG). Galicia dispone de él y puede ser un enclave importante ya que está cerca de Reino Unido, país donde se ha instalado la matriz de SAIC en Europa.
Junto a Galicia, también habría posibilidad de elegir terrenos en Asturias, que tiene también una posible salida de los coches por mar, si bien cuenta con un parque de proveedores inferior.
Según fuentes cercanas de la compañía china, SAIC, ya avanzó hace algunos meses que España estaba entre las finalistas para optar a esta fábrica. De ahí que ahora sólo falta que tome la decisión, que se debería conocer antes de que termine septiembre.
Aranceles
Para SAIC, esta fábrica en Europa es más que necesaria para el fabricante chino, puesto que actualmente está siendo penalizado por los aranceles impuestos por la Unión Europea, que son del 37,6%.
A SAIC le interesa fabricar cuanto antes en Europa para esquivar estos aranceles. Ahora bien, esto puede ocurrir recurriendo a alguna instalación ya existente infrautilizada o desarrollando una fábrica desde cero.
El argumento que utiliza Sánchez en la visita es de "acercar las sociedades y potenciar el entendimiento mutuo entre España y China, que tienen unos lazos sólidos y una asociación estratégica para fortalecer nuestros vínculos en todos los ámbitos".
Sin embargo, aquí es donde Sánchez tiene el difícil equilibrio de conseguir nuevas inversiones cuando, en principio, la postura de España como país dentro de la Unión Europea es que votará sí a la imposición de los aranceles a los coches eléctricos chinos, que principalmente penalizan a marcas como SAIC.
De ahí que sea más que probable que SAIC pida a Sánchez que cambie el sentido de su voto. Este es el fino alambre en el que se mueve el presidente en su visita al país asiático.