La segunda generación del Toyota C-HR vio la luz el pasado año. Este modelo continúa una saga de éxito, ya que, su predecesor lanzado en 2016, consiguió unos volúmenes de ventas en Europa muy favorables. De manera concreta, durante su vida comercial superó las 750.000 matriculaciones, un claro indicador de triunfo.
En el acumulado del año en España, con la comercialización del nuevo Toyota C-HR, las ventas ascienden a 10.916 unidades. Esto hace que el SUV japonés sea el tercer coche más vendido de la marca en nuestro país, por detrás del Toyota Corolla y el Toyota Yaris Cross. No obstante, la diferencia respecto al Toyota Yaris es mínima (10.914 unidades).
Con una longitud de 4,36 metros, el Toyota C-HR pertenece al segmento C -tamaño mediano-, aunque es uno de los SUV más pequeños de esta categoría, la cual, por cierto, está muy reñida. Podemos compararlo con modelos como el Hyundai Kona, Kia Niro, Cupra Formentor o Alfa Romeo Tonale, entre otros.
Estética disruptiva
Algo que ha caracterizado al C-SUV desde su nacimiento es una estética disruptiva, con un carrocería de todocamino y líneas de tipo coupé. En esta nueva generación su silueta es aún más dinámica, con una caída del techo más alargada y pronunciada.
El tratamiento del frontal presenta el nuevo estilo del fabricante, con los faros en forma de C que también se observan en el Toyota bZ4X. En el lateral se insertan los tiradores de las puertas a ras del cuerpo, visto por primera vez en un modelo de la firma. Por su parte, puede calzar llantas de 17 a 20 pulgadas.
Además, el exterior se ha trabajado desde el punto de vista aerodinámico. De esta forma, se ha conseguido optimizar el paso del aire por encima y por los lados del vehículo, con detalles como el preciso perfilado del paragolpes frontal y el formato del alerón trasero de techo. Por su parte, destaca logotipo iluminado en los grupos ópticos de la zaga.
Interior con acabado GR Sport
El interior, de formas sinuosas, cuenta de serie con un nuevo cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas. Presenta unos gráficos nítidos, donde la pantalla se puede ajustar para priorizar las preferencias del conductor. De hecho, dispone de tres configuraciones predeterminadas que se pueden personalizar mediante unos mandos en el volante.
En función de la versión, en el centro del salpicadero se ubica una pantalla táctil de 8 o 12,3 pulgadas, con asistente virtual y conexión inalámbrica con smartphones mediante Apple CarPlay o Android Auto. Para el híbrido enchufable (PHEV), como nuestra unidad de pruebas, el sistema ofrece información de autonomía en modo eléctrico y estaciones de carga cercanas.
El coche que nos ha cedido la marca está configurado con el acabado GR Sport, el deportivo de la gama. Este equipamiento incluye asientos delanteros de tipo bucket, con la insignia GR en el reposacabezas o en el volante de cuero sintético. Asimismo, cuenta con cargador inalámbrico de smartphone; asientos, volante y espejos retrovisores calefactables e ionizador de partículas para el habitáculo, entre otros.
Por otro lado, también destaca el sistema de iluminación ambiental, con un amplio repertorio de colores (hasta 64). Introduce opciones de iluminación interior directa e indirecta para reflejar el entorno del habitáculo (frío o cálido) o la hora del día. Respecto a su maletero, esta variante tiene una capacidad de 310 litros.
Motor híbrido enchufable
Como hemos mencionado, nuestra unidad de pruebas es un Toyota C-HR híbrido enchufable, también llamado 220PH. Esta variante es la más potente de la oferta mecánica del SUV, con 223 CV de manera combinada. Por un lado, equipa un motor de gasolina de 2.0 litros y 152 CV, y por otro uno eléctrico de 163 CV.
Asimismo, cuenta con una batería de 13,8 kWh con la que puede recorrer 62 kilómetros en modo eléctrico. Por este motivo, cuenta con la etiqueta cero de la DGT, con la que puede acceder a los núcleos urbanos sin restricciones y estacionar en la calle es totalmente gratis.
En cuanto a la recarga, admite una potencia máxima de 6,6 kW, por lo que el tiempo necesario para alimentar la batería es de 2,5 horas. El resto de la gama del Toyota C-HR está compuesta por versiones híbridas no enchufables (140H y 220H), las cuales tienen 140 y 197 CV, respectivamente. Estas tienen la etiqueta eco de la DGT.
Precios
Los precios del Toyota C-HR PHEV comienzan en 37.600 euros con el acabado Advance. Con el resto de equipamientos, estas son las tarifas:
Toyota C-HR | PVP |
Advance | 37.600 € |
GR Sport | 40.700 € |
Premiere | 46.100 € |
GR Sport Premiere | 45.900 € |
Además, no hay que olvidar que con el Plan Moves 3 se pueden descontar hasta 5.000 euros si se entrega un coche viejo para achatarrar. Si no se cumple ese requisito, el descuento es de 2.500 euros. Por tanto, el coste final puede ser de 32.600 euros, prácticamente lo mismo que los 32.050 euros de la versión híbrida convencional (HEV).
Así es en carretera
Esta opción híbrida enchufable nos ha parecido un producto redondo. Para empezar, con el depósito lleno de combustible nos indica una autonomía de 635 kilómetros, mientras que la eléctrica es de 65 kilómetros.
Además, con la batería cargada, podemos elegir entre cuatro modos de actuación del sistema de propulsión: eléctrico (EV), automático (auto EV/HV mode), híbrido normal (HV Mode) y modo de carga de la batería, los cuales se eligen desde dos botones que están en la consola central.
Por tanto, para la ciudad es un coche muy acertado. De manera diaria, se le puede hacer un uso exclusivamente eléctrico, como, por ejemplo, para ir al trabajo, sobre todo si disponemos de un punto de recarga en casa.
Sin embargo, en autopista el Toyota C-HR también tiene mucho que ofrecer. Con 223 CV el SUV nipón tiene muy buen empuje y, a diferencia de otros modelos de la firma, es bastante menos ruidoso. Cabe destacar que hay varios modos de conducción: Eco, Normal, Sport y Custom, los cuales inciden en la respuesta del acelerador, la dirección o la climatización. Y, por si fuera poco, la frenada regenerativa también cuenta con tres niveles.
Uno de sus puntos más destacables es el consumo. Durante nuestra experiencia hemos obtenido una media de unos 4,5 l/100 km. No cabe duda de que se trata de una cifra excelente, que ligado a una autonomía eléctrica bastante generosa, pasar por la gasolinera se reduce considerablemente.