Los ladrones innovan cada vez más es sus maniobras, inventando cada vez formas más surrealistas. En este sentido, la llegada de internet ha facilitado a todos estos estafadores la posibilidad de cometer un ciberfraude con el que conseguir los datos bancarios de la víctima para después vaciar su cuenta.
Así pues, si hace unos días veíamos casos frecuentes en los que estos se hacían pasar por la DGT para avisar sobre una multa de tráfico falsa a través de un mensaje, esta vez los ladrones han ido más allá con papeles que simulan multas, y además, combina con un daño en el coche que aparentemente es accidental.
La estafa en sí es muy sencilla: los ladrones golpean el vehículo y dejan una nota con un número de teléfono en el parabrisas para que la víctima pueda llamar. La persona afectada incluso llega a agradecer el acto de haber dejado sus datos de contacto para solucionar los daños ocasionados.
Hasta el momento todo parece normal. Sin embargo, es a continuación cuando van a proceden a estafar e intentar robar todos los datos para así acceder a la cuenta bancaria.
Este mensaje, que suele estar redactado de forma cortés, viene con un número de teléfono para poder contactar con la persona causante de los daños y así poder solucionar el entuerto con la compañía de seguros.
Al realizar la llamada, la persona que responde muestra una actitud de buena fe y menciona que su aseguradora se comunicará para gestionar la reparación del coche afectado.
Esta persona asegura que para iniciar el proceso de reclamación es necesario que la víctima complete algunos datos a través de un enlace el cual lleva a una página web de la compañía de seguros.
Dicha página imita la imagen corporativa de la compañía, pero el enlace que aparece no es la URL oficial. De hecho, puede darse incluso que al intentar acceder al enlace de la supuesta página de la compañía de seguros nos salga la advertencia de Google Chrome de que están intentando robar nuestra información personal.
Así, en el momento que se accede a dicho enlace, los ladrones podrán introducirse en todos los datos del teléfono, e incluso puede que pidan alguna contraseña, los nombres y apellidos e incluso el DNI. De esta manera, estos pueden acceder a las tarjetas de crédito, cuentas bancarias, documentos de identidad e incluso contraseñas.
Consejos para evitarlo
Lo primero que hay que tener en cuenta para evitar ser estafado con este tipo de prácticas, es que es fundamental desconfiar siempre de cualquier mensaje que lleve un enlace y que solicite diferentes pagos.
Lo más recomendable si nos encontramos en una situación parecida es acudir a nuestra aseguradora utilizando los números oficiales que ya conocemos. Igualmente, siempre debemos evitar pinchar en cualquier enlace, ni tampoco descargar documentos adjuntos, podría contener un malware y robar todos nuestros datos.
Por último, si seguimos con la incertidumbre, es aconsejable llamar al 062 o incluso al teléfono de contacto de la Dirección General de Tráfico, que serán quienes nos podrán solucionar cualquier duda.