Un aspecto que genera ciertas dudas a la hora de comprar un coche eléctrico es la autonomía. Sobre todo cuando se realizan viajes en autopista a velocidad media y con temperaturas muy bajas. Este escenario es uno de los peores para un coche eléctrico, ya que las baterías es cuando más sufren.
Por este motivo, en EL ESPAÑOL hemos querido hacer una prueba real en estas condiciones con uno de los últimos lanzamientos. Se trata del Kia EV3, un SUV 100% eléctrico que está llamado a ser uno de los grandes protagonistas del año, puesto que de él se esperan unas ventas de aproximadamente 4.000 unidades al año. La versión de mayor autonomía de este SUV eléctrico cuenta con una batería con alrededor de 80 kWh de capacidad real, una cifra más que interesante para un coche eléctrico de su categoría.
El plan que nos han preparado desde Kia es un viaje ida y vuelta a Burgos en el día, principalmente por autopista. A mitad de ruta haremos, además, una parada en una estación de Zunder para realizar una recarga y seguir el camino.
Viajar con un eléctrico con mucho frío
Son las 10 de la mañana de un frío día de diciembre. La temperatura exterior es de solo tres grados, por lo que la sensación de frío es notable. Nuestro coche, el Kia EV3, está aparcado al exterior con alrededor del 95% de batería, si bien no se ha preclimatizado el habitáculo, lo cual es una situación mejorable.
Hay que tener en cuenta que climatizar un habitáculo frío supone un gasto elevado de energía que merma la capacidad de la batería. De ahí que lo ideal sería programar nuestra salida y que mientras que el coche carga al mismo tiempo hace que el habitáculo se caliente para salir a una temperatura más confortable.
Comenzamos el viaje con el Kia EV3 en dirección hacia Burgos. Partimos desde Alcobendas, en Madrid, así que rápidamente tomamos la A1. Es un buen momento entonces para situar el control de velocidad a 120 km/h y así poder comprobar el consumo.
Como al principio tenemos frío porque el habitáculo no está climatizado, ponemos el climatizador a la máxima temperatura. Es entonces, cuando vemos que el coche comienza a incrementar el consumo. En concreto, este Kia EV3 nos dice que la calefacción a esta temperatura supone un gasto de 4 kWh cada 100 kilómetros.
Por este motivo, una vez ya que hemos entrado en calor bajamos rápidamente la calefacción hasta los 20 o 21 grados para que así el consumo del climatizador ronde 1 kWh cada 100 kilómetros, una cifra mucho más razonable.
Es hora de mantener la velocidad constante entre los 120 y 125 km/h de marcador y así viajar tranquilo. Mientras tanto vamos disfrutando del excelente confort de marcha de este coche incluso dese las versiones básicas.
Es un SUV que está perfectamente aislado, que es muy cómodo ya que filtra las irregularidades del pavimento de forma sobresaliente y que destaca por su comportamiento en general y su tecnología.
En este trayecto de decenas de kilómetros comprobamos que el consumo del Kia EV3 a una velocidad media de 120 km/h y con una temperatura fría es de 21 kWh. Se trata de una cifra que está por encima del consumo según la norma WLTP y que fija el gasto de energía en 14,9 kWh. Pero hay que tener en cuenta que este consumo es de un consumo combinado y no de un viaje a alta velocidad como circular por autopista.
Por lo tanto, desde aquí pensamos que los 21 kWh conseguidos son una cifra más que razonable para las condiciones de viaje que tenemos. De esta manera, la autonomía real de este coche será de aproximadamente unos 350 kilómetros.
Carga rápida en el Kia EV3
Tras recorrer 134 kilómetros, llegamos al área de servicio de Tudanca, en Aranda de Duero. Es cierto que no necesitamos esta parada porque la batería del coche está al 57%.
Esto nos indica que hemos gastado aproximadamente el 38% de la batería en este trayecto de 134 kilómetros, lo que nos confirma una autonomía real de 352 kilómetros reales viajando en autopista con frío y el climatizador encendido.
No obstante, como Kia tiene un acuerdo con Zunder, la compañía especializada en infraestructura de recarga rápida y ultrarrápida, desde la marca nos piden que paremos en esta estación para hacer una recarga rápida. Recordamos en este sentido que los usuarios que hayan comprado un Kia y recargen en Zunder pagan a 0,45 euros el kWh, lo que supone un descuento de 10 céntimos.
Mientras aprovechamos para tomar un café, el coche inicia la recarga, operación que hemos podido realizar bien con la app de Zunder, la de Kia Charge o simplemente con una tarjeta de crédito con el TPV. Al llegar con cerca del 55% no estaríamos ante el escenario óptimo pero tampoco es el menos malo. De ahí que el coche empiece a cargar a 81 kW de potencia. En este sentido, desde la organización nos dicen que unos días antes, este Kia EV3 ha cargado a cerca de 120 kW, energía muy próxima a su potencia máxima.
Tras el café, volvemos a recoger el coche. La batería ya se encuentra al 77%, lo que significa que hemos cargado aproximadamente el 20% de la batería -unos 17 kWh- en unos 25 minutos aproximadamente.
Viaje de regreso
Tras recoger de nuevo el Kia EV3 es el momento de llegar a nuestro destino en Burgos. Allí, además, desde la marca nos explican con más detalles la colaboración que tiene la marca con la Fundación Atapuerca y el Museo de la Evolución Humana.
En concreto, esta Fundación cuenta con un Kia Sportage vinilado con el cráneo de Miguelón (en honor a Miguel Induráin) y que se corresponde con el cráneo de un varón encontrado la Sierra de Atapuerca que confirma cómo era este homínido que vivió hace 400.000 años de edad y que es un antepasado del Neardental, antecesor inmediato del Homo sapiens.
Tras la parada, llega el momento de volver a Madrid. Un recorrido de 210 kilómetros que realizaremos en una hora y 50 minutos, lo que nos deja una velocidad media de 114 km/h. Aquí al viajar a una velocidad media algo más alta, el consumo ha sido mayor, de alrededor de 24 kWh. Una cifra, no obstante, que nos sigue pareciendo buena ya que nos permite realizar 333 kilómetros con una recarga.
Cuánto cuesta viajar en coche eléctrico
Pues aquí para responder a esta pregunta dependerá mucho de si la recarga es doméstica o pública. Haciendo una media de 21 kWh de consumo y un precio de la recarga doméstica de 0,20 euros, tenemos que el coste por cada 100 kilómetros con el Kia EV3 es de 4,2 euros aproximadamente.
En el caso de que solo optemos por recarga pública, con este mismo consumo y un precio de 0,45 euros el kWh tenemos que el coste es de 9,45 euros cada 100 kilómetros.
Ambas cifras, no obstante, son más accesibles que si hiciéramos el mismo viaje en un SUV de gasolina, por ejemplo. Un Kia Sportage presenta un gasto de 6,9 litros cada 100 kilómetros lo que multiplicado por 1,53 euros, estaríamos hablando de 10,5 euros cada 100 kilómetros. Y todo ello sin mencionar los más de 60 kilos de CO2 que hemos emitido a la atmósfera con el coche de gasolina.