Con motivo del Mobile World Congress de Barcelona, los responsables de la ROBORACE han decidido aprovechar una de las mayores convecciones tecnológicas a nivel mundial para presentar la imagen definitiva del que será el primer vehículo autónomo de competición. Hasta el momento, tan sólo habíamos podido ver una mula de pruebas que los técnicos han estado utilizando desde el pasado verano para el desarrollo de los principales sistemas y del software base con el que contarán los equipos en la primera temporada del campeonato.
El diseño del ROBOCAR, realizado por Daniel Simon -responsable de los departamentos de diseño de películas como Oblivion o Tron- ha sido creado con el objetivo de ser capaz de superar los 320 km/h de velocidad punta y hacer el 0 a 100 km/h en menos de dos segundos, todo ello sin un piloto detrás de su volante que sea capaz de domar los 1.000 CV de potencia que se espera que tenga cada unidad 100% eléctrica. Será un sistema de sensores, radares y cámaras los que se encarguen de transmitir toda la información de lo que sucede en pista y las acciones del resto de vehículos que le rodean.
Los responsables se han afanado a asegurar que esto no se trata ni de una acción de marketing ni de una historia de ficción. Denis Sverdlov y Daniel Simon han defendido en más de una ocasión la utilidad de esta nueva serie con vehículos autónomos y han llegado a asegurar que es una nueva dimensión dentro del automovilismo. Ahora serán los fabricantes de automóviles los que determinen el éxito de la misma como laboratorio para sus propios sistemas. No obstante, estamos hablando de coches de 975 kilógramos con cuatro motores eléctricos de 300 kilovatios cada uno, lanzados a más de 300 kilómetros por hora en un circuito.
Comienzo accidentado en Argentina:
Durante el ePrix de Buenos Aires, los responsables del campeonato hicieron una carrera a modo de exhibición entre dos de sus DevBot. Estas unidades, con chasis de Ginetta LMP3 y todo el sistema de cámaras, sensores, ordenador y propulsor eléctrico, lograron rodar juntas durante unos metros hasta que el segundo prototipo sufría un fuerte accidente que le impedía completar una vuelta al circuito urbano provisional de la ciudad bonaerense. La unidad número uno sí lo conseguiría e incluso rozaría los 200 km/h de punta.
Esto no ha frenado el avance imparable del proyecto, el cual, a pesar de que no cuenta con fecha definitiva de debut, ni nombres de los equipos que participarán en ella, sí ha visto como los socios se han ido sumando durante los últimos meses. NVIDIA será el gigante tecnológico que suministrará el software, su Drive PX2, mientras que Michelin hará lo propio con sus neumáticos específicamente diseñados para estos vehículos no-pilotados. Allianz, DHL, o VISA, patrocinadores de la Fórmula E, no han querido perderse la oportunidad de estar involucrados en esta aventura.