La apuesta de Mazda por la eficiencia es algo ya conocido dentro de la industria automovilística. No en vano, estamos hablando de uno de los fabricantes más innovadores, que ha optado por un camino diferente al de la tendencia actual, que ha hecho del downsizing su mejor arma.
Tras demostrarse que el empequeñecimiento de los motores de combustión no siempre trae consigo ventajas en cuanto a consumo y emisiones contaminantes, Mazda se ha revelado como uno de los fabricantes más inteligentes de los últimos años, apostando con fuerza por el perfeccionamiento de las tecnologías ya existentes. Esa es parte de su filosofía, denominada como Skyactiv.
A día de hoy todos los motores de la marca japonesa cuentan con el apellido Skyactiv, algo que se expande también a otros componentes mecánicos e incluso a sistemas de control de emisiones. Tras años demostrando que su filosofía era bastante más real y correcta que la de muchas otras marcas, los de Hiroshima ya están pensando en la próxima generación de propulsores.
Mazda prevé lanzar en 2018 una nueva generación de motores térmicos desarrollados bajo la premisa de la "hiper-eficiencia", que permitirá rebajar hasta un 30% los niveles de consumo y emisiones respecto a un motor de 2016, manteniendo el rendimiento de los propulsores tradicionales.
Para ello, los ingenieros de Mazda están centrados en el desarrollo y perfeccionamiento de una tecnología denominada Homogeneous charge compression ignition (HCCI). Bajo esta rimbombante enseña se esconde una tecnología para motores de gasolina que los hace funcionar de forma similar a la de un motor de ciclo diésel.
Un motor de gasolina necesita, a día de hoy, de una chispa para iniciar la combustión de la mezcla aire-gasolina que se comprime en los cilindros, chispa proporcionada por una bujía. Sin embargo, los motores HCCI no necesitan de bujía para que la mezcla explote, recurriendo a una gran compresión para que la mezcla inicie su combustión.
Esta tecnología no es nueva, ya ha habido varios fabricantes que se han interesado por ella con mayor o menor éxito, pero ninguna ha lanzado al mercado ningún motor que la utilizase, por lo que Mazda se convertiría, en el caso de lanzarla el año que viene, en el primer fabricante en comercializar un motor de estas características.