Si hay un senador republicano que resumía el alma de Arizona, ese era John McCain, el que fuera candidato a la presidencia en 2008, derrotado por Barack Obama en una campaña limpia y en una elección rápida. Era un héroe de guerra, capturado en Vietnam, donde pasó cinco años en una cárcel. Fue un hombre emprendedor, un empresario de éxito y un amante de las barbacoas, de los valores conservadores de la familia y de EEUU.
Pero para Trump era simplemente perdedor por dejarse capturar: "Me gusta la gente que no fue capturada", llegó a decir de su antecesor en el partido republicano. El candidato derrotado que se libró de luchar en Vietnam por unos espolones atacó a McCain donde más le dolía: Vietnam.
Y no paró ni después de la muerte del senador, en 2018 por un cáncer cerebral: "Nunca fui fan de John McCain y nunca lo seré". Eso le costó ni siquiera ser invitado a su funeral donde sí estuvieron tanto Obama como Biden, con quien McCain había trabajado con respeto durante años en Washington, aunque fuera desde lados opuestos.
Así que tampoco los McCain son muy fans de Trump. Y ahora le han podido hacer pagar una factura muy cara en esta elección gracias al trabajo de su viuda, Cindy McCain (66 años), que le ha servido en bandeja a Biden Arizona, un estado tradicionalmente republicano, en lo que muchos medios de comunicación aseguran ya es la mayor venganza de McCain al "irrespetuoso" Trump.
"Mi esposo John vivió con un código: el país primero. Somos republicanos, sí, pero antes que nada somos estadounidenses. Solo hay un candidato en esta carrera que defienda nuestros valores como nación, y ese es Joe Biden", escribió ya el 22 de septiembre Cincy en su cuenta de Twitter, cuando arrancaba la campaña electoral.
A partir de ahí, la empresaria que dirige una gran cervecera en Phoenix, que hace un trabajo de filántropa importantísimo en el estado a través del Instituto McCain en la Universidad Estatal de Arizona y que es una luchadora por los valores que han marcado su vida, participó incluso en actos de Joe Biden y Kamala Harris en Arizona.
De hecho, se le vinculaba igualmente con el movimiento que empapeló varias zonas de este tradicional estado donde se leía: "Republicanos por Biden".
Y no ha estado sola en esta lucha de los McCain contra Trump. Una de sus hijas, Meghan, que es copresentadora de un programa de televisión en ABC, The View, no ha perdido oportunidad de criticar las posturas del candidato republicando apostando claramente por Biden.
Es más, cuando ya se confirmó que Arizona era demócrata (ningún republicano ha llegado jamás a la Casa Blanca sin este estado) escribió en su cuenta de Twitter: "Me alegro de que haya ganado un presidente que respeta a los prisioneros de guerra". Y hasta utilizaba una foto de su padre para devolverle el meme a Trump y asegurar: "Me gusta la gente que no pierde Arizona".
En el equipo de Biden
Pero el servicio de Cindy McCain a una restauración de los valores que siempre ha defendido su marido no ha terminado todavía. Joe Biden y Kamala Harris la han incluido en el equipo de transición que han designado para el traspaso de 'papeles'. El comunicado oficial asegura que buscan un grupo "diverso y bipartidista" que pueda "sanar" el país con una administración no dividida ni por colores ni por partidos. Y Cindy ha dicho que sí.
Ted Kaufman, copresidente de este grupo, ha querido destacar de la viuda de John McCain su experiencia como "mujer de negocios, filántropa y defensora de los problemas que afectan a las mujeres y los niños" asegurando que sus conocimientos serán muy valiosos en la situación de pandemia y de crisis económica que sufre el país.
Cindy McCain, quien felicitó a Joe Biden como presidente electo el pasado 7 de noviembre advirtiendo de que "es hora de ir más allá de la política y construir un Estados Unidos más fuerte", ha insistido en que ella trabaja por el bien de su país, como siempre hizo su marido: "John fue uno de los que defendió el profundo honor y el proceso democrático que representa este país".
"Él siempre fue una voz para la razón, especialmente en los temas de trabajar juntos y asegurarnos de que lo hacemos por el bien del país y no por beneficio personal", aseguró hace unos días a la cadena de televisión CNN.