El enfrentamiento dentro del movimiento feminista por la Ley trans ha traspasado una línea roja: la de las amenazas directas a la vicepresidenta primera Carmen Calvo en una plaza de Santiago de Compostela. 

Este viernes 19 de febrero ha aparecido colgada una muñeca con la cara de Carmen Calvo en la plaza de 8 de Marzo de Santiago de Compostela con un cartel que decía: "Me he perdido, ¿por dónde queda el patriarcado?", en alusión a la postura de la socialista frente a la Ley trans que tramita el Ministerio de Igualdad, según las fotografías que aparecen en el periódico El Común.

La propia Carmen Calvo ha denunciado en Twitter esta dantesca acción asegurando que "Ni la violencia ni las amenazas caben en una democracia. Así no". Una respuesta muy contundente a los autores de esta grave performance.

La vicepresidenta primera ha sido una de las caras socialistas más importantes que se han opuesto a algunos puntos de la Ley trans e incluso se ha reunido con la ministra de Igualdad, Irene Montero, para tratar de acercar posturas.

Calvo ha asegurado que le "preocupa la idea de pensar que se elige el género sin más que la mera voluntad o el deseo, poniendo en riesgo los criterios de identidad del resto de españoles. Eso tendrá que tener garantías y unos criterios de seguridad". 

Estas declaraciones le han granjeado muchas críticas de activistas transexuales pero ella y otras históricas feministas de este partido han insistido en que la nueva ley, que establece la autodeterminación de género como base principal, no puede salir adelante a costa de los derechos de las mujeres que tanto sufrimiento ha costado sacar adelante. Y denuncian lo que consideran un borrado de las mujeres por parte de Igualdad.

De hecho, quienes han llevado a cabo esta acción de manera anónima no han elegido por casualidad el lugar donde han colgado la ahorcada muñeca de Carmen Calvo puesto que esa es la plaza donde las feministas de Santiago se reúnen cada 8 de Marzo para reivindicar los derechos de las mujeres, de donde le viene el nombre a dicho espacio.

Las mujeres de la asociación Radfem Compostela, en declaraciones al periódico El Común, han denunciado esta dantesca imagen e incluso han asegurado que "nosotras respetamos la libertad de expresión pero creemos que la lucha debe manifestarse por otras vías".

Por ahora, la ministra de Igualdad, Irene Montero, no ha hecho ningún tipo de referencia a esta amenaza ni siquiera en Twitter. Sí lo ha hecho una de las activistas transexuales más conocidas, la diputada socialista Carla Antonelli, quien ha mostrado su rechazo ante esta agresión a Carmen Calvo y ha querido manifestar todo su apoyo y solidaridad a la vicepresidenta.

Carla Antonelli denunció esta semana "un ataque tránsfobo" por parte de un diputado de Vox en la Asamblea de Madrid que en la comisión de Servicios Sociales se refirió a la diputada socialista como "el representante del PSOE".

También Cuca Gamarra, portavoz del Grupo Popular en el Congreso, se ha solidarizado con la vicepresidenta a través de Twitter.

"Mi solidaridad con ⁦Carmen Calvo. La violencia nunca tiene justificación y nunca es el camino" ha escrito Gamarra en la citada red social.

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