La sanidad es uno de los pilares fundamentales de la sociedad. Tras la pandemia causada por el coronavirus, la labor de estos profesionales ha quedado más que demostrado. Entre todos ellos, este sector cuenta con un número muy elevado de empleadas mujeres. Doctoras, auxiliares, enfermeras, celadoras se hacen cargo a día de cientos de pacientes con patologías diferentes.

En MagasIN, hemos entrevistado a 8 protagonistas que trabajan en diferentes centros hospitalarios y de salud en nuestro país. Todas ellas han respondido a las siguientes cuestiones acerca de aspectos esenciales como la igualdad. 

1. El próximo 8 de marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer ¿se ha encontrado alguna dificultad u obstáculo en su carrera por ser mujer?

2. ¿Hemos avanzado en igualdad?

3. ¿Qué mensaje enviaría a las mujeres jóvenes?

4. ¿Qué tenemos que reivindicar este 8 de marzo?

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    Julia Falcón

    Tras haber terminado la carrera universitaria de Enfermería en 2010 y después de estar trabajando muchos años en Madrid, Falcón trabaja en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla desde noviembre de 2018, en la Unidad de Cuidados Intensivos de Trauma. En ella, Falcón y sus compañeros tratan a pacientes que sufren accidentes de tráfico, trauma medular, hemorragias cerebrales, grandes quemados y otras patologías.

    La enfermera asegura no haberse encontrado ninguna dificultad en su trayectoria profesional por su condición de género. "En mi categoría somos más mujeres que hombres y no existe diferencia entre un hombre y una mujer, ni a nivel salarial ni a nivel de condiciones", declara. "Se suele recordar más la figura del típico jefe médico con un hombre y para la de una enfermera o auxiliar, una mujer. Pero, hoy en día ya hay diferencias con eso, por ejemplo, la directora médica del Virgen del Rocío es una mujer". 

    Sin embargo, no todo es tan bonito. Esta profesional sí asegura haber recibido tratos discriminatorios por parte de algunos pacientes. En la entrevista, nos cuenta que en un hospital de Madrid, un usuario se negó a ser ayudado por enfermeras mujeres a la hora de hacer sus necesidades. Por historias como esta, Falcón nos cuenta que, aunque hayamos avanzado en materia de igualdad, es necesario seguir luchando y reivindicando. Sobre todo, hace hincapié en la lucha por los derechos de las mujeres de otros países en los que la situación esta mucho peor que en España.

    Si tuviera que aconsejar a una mujer joven, lo tiene claro: "Que no se ponga limitaciones por el hecho de ser mujer, que luche por hacer realidad sus sueños y conseguir sus objetivos a pesar de que la sociedad fije ciertas condiciones. Nos tenemos que valorar y creer a nosotras mismas, eso es fundamental y respetarnos también. Unidas seremos más fuertes que por separado".
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    Eva Ciruelos

    Eva Ciruelos es coordinadora de la Unidad de Mama de HM CIOCC en Madrid y médica adjunta en el Servicio de Oncología Médica en el Hospital 12 de Octubre. Aunque comenzara sus estudios con una vocación intermedia como nos cuenta, eligió el modelo del esfuerzo y del sacrificio y esto le permitió realizar la especialidad de Oncología médica. Ahora, declara sentirse satisfecha con su trabajo diario: "Cada día me siento más cómoda y más feliz cuando ayudo a alguien. Si pueden estar unidas las dos cosas, el esfuerzo y la ayuda, mucho mejor. La medicina ejemplifica muy bien esto, y la oncología médica en particular porque quién necesita más ayuda que un enfermo con una enfermedad crónica, grave y terminal".

    Si hay algo que Ciruelos cambiaría en las condiciones de este trabajo, es la conciliación familiar. Esta controversia tan debatida actualmente es uno de los aspectos que esta profesional reivindica. "En los primeros 5 o 10 años de tus hijos, es cierto que los padres ayudan muchísimo pero, en las enfermedades o cuando los niños se tienen que quedar en casa, la lactancia materna (cuando te incorporas al trabajo esta posibilidad prácticamente desaparece)... yo creo que ahí queda un poquito por mejorar", declara. "La posibilidad de teletrabajar, de tener permisos o excedencias o tiempos de conciliación con la familia cuando los hijos son menores, por debajo de 7 u 8 años. Ahí sí creo que todavía hay que mejorar".

    Ciruelos tiene la suerte de no haber sufrido ningún obstáculo todos estos años atrás, pero como ella deja claro, eso no quiere decir que otras mujeres no los tengan. La médica cree que el esfuerzo es la clave para conseguir todas las metas y no hay mejor ejemplo que ella misma para demostrar esto. Ha sido presidenta de uno de los dos grupos cooperativos que existen en España de Cáncer de Mama, el grupo Solti, un grupo que comprende más de 120 hospitales y cerca de 500 socios en 4 países diferentes. Cuando le preguntamos qué le diría a una chica joven, la médica afirma que el esfuerzo y la ambición son esenciales. Una programación metódica y una autoexigencia moderada son los ingredientes clave para conseguir todo lo que una quiera en la vida. 

    Entre otras iniciativas, la doctora expresa que, el 9 de marzo en el hospital HM de Sanchinarro se van a celebrar unas jornadas nombradas La Mujer en el Cáncer, para abordar la posición del género femenino en esta enfermedad y en los cuidados sanitarios en general. A través del siguiente link, https://hmhospitales.zoom.us/webinar/register/WN_hQ3J_WAwReSEZBEeUuAGHA, cualquiera se puede registrar para acceder al evento.

     
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    Mariló Fuentes

    Mariló Fuentes es celadora en la UCI de Trauma del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla desde hace 5 años. Día a día, se encarga de las tareas fundamentales de movilizar a los pacientes, llevarlos a las pruebas y ayudar constantemente a sus compañeros del hospital. 

    La sanitaria admite que sí ha recibido menosprecios o comentarios desafortunados en su trabajo, incluso en su entorno más cercano. "Una vez una compañera enfermera me dijo un comentario que no me gustó nada. En la UCI antes había muy pocos celadores hombres, y como las camas de UCI pesan mucho, me dijo una enfermera que prefería que estuviera otro compañero trabajando". No obstante, aclara que en este sector las condiciones laborales son igualitarias no como en otros, como en la hostelería: "Me han pagado menos por hacer el mismo trabajo que un compañero. Pero yo me negaba a ir a trabajar". 

    En la entrevista declara que, aunque hemos avanzado a lo largo de los años, nos queda mucho por reivindicar. Para la celadora, la clave de todo está en la educación de las nuevas generaciones. A ellas, les manda un mensaje claro: "Que no se dejen avasallar, ser utilizadas ni tratadas como un objeto. Que se valoren a sí mismas y tomen sus propias decisiones, deben ser independientes".
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    Inmaculada Cobo

    El hospital no es el único espacio donde las profesionales sanitarias actúan, las emergencias extrahospitalarias es una de las áreas fundamentales en la ayuda a los pacientes. Cobo lleva 17 años en este tipo de urgencias, trabajando en una ambulancia con el equipo médico completo. Además de esto, llevo trabajando como enfermera desde que terminó su carrera en el año 1993.

    En su día a día, la sanitaria nos cuenta que sí se ha enfrentado a situaciones machistas. "Ha habido que pelear para quitar la idea de médico varón y enfermera mujer. Incluso, al estar en el mismo estamento que un compañero, el paciente se ha dirigido a él como el médico y a mí como la enfermera. Se da por hecho". Por esto, Inma afirma que nos queda por avanzar en materia de igualdad. 

    La enfermera reitera la necesidad de facilitar la conciliación familiar para las mujeres. Como explica, actualmente no es compatible dedicar tiempo a tu trabajo para llegar a puestos directivos y atender a tu familia, siempre hay que poner las cosas en una balanza y elegir. "Hoy en día sigue existiendo el estereotipo de que si una mujer es independiente, con actitud, ganas de avanzar y es competitiva, es una amargada o no tiene un novio al lado", declara. 

    Para Cobo, es muy importante expresarse y decir lo que una piensa en todo momento. A las chicas más jóvenes, les aconseja tener su propia voz: "Que se hable con claridad, cuando haya comentarios con segundas o mal intencionados que no lo dejen pasar y lo aclaren. Tienen que darse a valer por el hecho de ser una persona válida independientemente del género".

     
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    Mercedes Avilés

    Mercedes Avilés es auxiliar de enfermería en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. En los 5 años y medio que lleva en ese puesto, se ha encargado de la atención directa con el paciente y con su equipo, ayuda a enfermería en todas las técnicas que haya que realizarle al paciente y todo lo que se necesite.

    La profesional reitera las declaraciones de las mujeres de este artículo. En el sector sanitario, las condiciones laborales son iguales para los hombres y las mujeres, pero sí sigue habiendo espacio para la discriminación. Una vez más, esta viene de parte de los usuarios. "Cuando ven que eres mujer, te preguntan si tú vas a poder con ellos. A otros compañeros hombres no se lo dicen", expresa Avilés. 

    La conciliación familiar es uno de los aspectos que la auxiliar resalta para reivindicar. "Nos falta avanzar muchísimo en la conciliación familiar, hay campos profesionales que discriminan a la mujer por ser madre", declara. "Las mujeres estamos en la lucha y demostramos que a la vez que somos madres, podemos ejercer nuestra profesión, estamos en dos campos a la vez".

    A la pregunta "¿qué le diría a las mujeres jóvenes?", Avilés responde: "Si alguien menosprecia su trabajo, no te vengas abajo, que valemos mucho. Tenemos que seguir adelante, es una pena que no valoren el trabajo que haces por ser mujer".  
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    Susana Prados

    La doctora Susana Prados es Jefa de Servicio Médico en el Hospital HM de Sanchinarro, Madrid. Especializada en medicina digestiva oncológica y procedimientos endoscópicos, comenzó su trayectoria profesional en el Reino Unido. Desde hace más de 15 años trabaja en la capital española con un equipo muy variado. Además de ello, colabora con algunas fundaciones como Woman Forward. En su web, publicó un artículo, sobre salud y mujer. "Como somos multitask, nos olvidamos de cuidarnos a nosotras mismas. Como médico y como mujer, la vida se ha complicado mucho para nosotras".

    Fue la experiencia en el extranjero lo que le hizo darse cuenta de que, en muchas ocasiones, los puestos de responsabilidad eran un mundo de hombres. Aun así, Prados no se rindió y apostó por su carrera. "Yo creo que sí hemos avanzado. Es cierto que a nivel de jefatura, en muchas especialidades, sigue siendo masculina. Muchas veces pasa porque hay mujeres que no quieren ceder ciertas cosas para llegar ahí. Es decir, dentro del mundo de la igualdad, la conciliación sigue siendo un tema muy complicado para hombres y mujeres. Pero, debe de ser igualitario, si queremos tener altos cargos, tenemos que tener las mismas opciones que los hombres", nos cuenta.

    Por ello, alerta a las nuevas generaciones: "De alguna manera, no creo que se vayan a encontrar obstáculos por ser mujeres, pero sí que tenemos un nivel de exigencia personal y profesional que el género masculino no tiene. Ellos ven la vida de manera diferente, debemos de tener los mismos derechos pero sí que no somos iguales o no pensamos igual. Tenemos muchas cargas que muchas veces nos cargamos nosotras mismas. Las mujeres debemos de cambiar este chip y ellos deben también adaptarse e incorporarse a nuestro mundo". 
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    Dalia María Afonso

    La pandemia ha afectado de lleno al sector sanitario, que ha tenido que hacer frente a múltiples dificultades en tiempo récord. Dalia María Afonso lo sabe muy bien, como enfermera gestora de casos en el centro de salud de Carmona, Sevilla, ha estado al mando de una de las tareas esenciales en estos dos últimos años. Ahora, se encargará de la gestión de casos de la Unidad de Residencias de Mayores, tratando de mejorar la atención en este aspecto.

    La enfermera nos hace ver que sigue existiendo discriminación es cuestiones tan interiorizadas como utilizar el término "médico" en masculino la mayoría de las veces. No obstante, admite que se ha avanzado bastante en el sector. Una vez más, la conciliación familiar es la controversia por resolver. " En el sector de la sanidad, el hecho de ser mujer hace que tengas que ceder en algunas cosas para dedicarte a la crianza de los hijos, compaginar con la vida familiar y el trabajo", declara Afonso. 

    En lo personal, reconoce que los padres y las madres sienten más miedo cuando una niña sale a la calle que cuando lo hace un niño. "Por muchos que digamos que la igualdad existe, todavía se notan las diferencias en muchísimos aspectos", nos cuenta. Por esto, incide en la importancia de apoyarnos entre todas: "A las mujeres jóvenes le diría que no se rindan ante los comentarios porque mucha gente les va a decir que eso no es para ella. En el sector sanitario también van a tener que enfrentarse a situaciones de desigualdad, pero tenemos que revertirlo".
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    Sagrario Mayoralas

    Médica de formación y especialista en Neumología, Sagrario Mayoralas es gerente y directora médica el Hospital Quirónsalud San José, en Madrid. A lo largo de su trayectoria, ha desarrollado su carrera en ambos ámbitos: la medicina y la gestión, porque como nos cuenta, a ella le gusta liderar.

    Basándose en su experiencia, la doctora nos cuenta que en la sanidad, como mujer tienes el hándicap de demostrar ciertas cosas cuando tienes puestos de responsabilidad. "Además se dan situaciones como las reuniones, en la que eres la única mujer y es incómodo por algunos comentarios fuera de lugar, sobre todo hace años. Pero, yo siempre he dicho algo cuando no me sentía cómoda y se ha respetado el cambio de dinámica", declara Mayoralas. 

    El trato con pacientes también ha provocado situaciones de discriminación al darse por supuesto que un hombre es el responsable médico. "En algunas situaciones, he llamado a compañeros masculinos porque solo querían hablar con ellos y era conversaciones de besugo. Nunca lo he vivido como una agresión sino como una falta de conocimiento y por prejuicios".

    Si tuviera que señalar algún aspecto en el que se refleje el avance de la sociedad, lo tiene claro: "Hemos avanzado sobre todo en que la mujer da su opinión, dice lo que piensa y trabaja según le parece". Pero, como ella apunta, hay que seguir reivindicando. "Hace años, tenías que comportarte como un hombre para llegar a un puesto directivo y eso no tiene que ser así. Yo lo que reivindico es mi papel, lo que yo aporto a una empresa como mujer en el papel de mujer. Cuando se reconozca ese valor por igual a todas las cosas, dejará de haber discriminación".

    Como consejo, Mayoralas sostiene que debemos darle valor a lo importante, porque como ella dice, "no hace daño el que quiere, sino el que puede".