¿Quién no ha escuchado alguna vez cómo alguien ha relacionado la falta de apetito sexual con la asexualidad? Pero, ¿realmente sabemos lo que significa ser asexual ¿Estamos utilizando este término de la forma correcta? La realidad es que, al igual que sucede con otros términos más modernos en el mundo de las relaciones sentimentales como pocketing o breadcrumbing, en torno al término asexualidad también existe mucho desconocimiento y a menudo la sociedad tiende a relacionar esa falta de interés en el sexo con personas reprimidas o que no han conocido a la pareja adecuada. Ideas totalmente alejadas del verdadero sentido de la asexualidad.

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Hablamos entonces de una orientación sexual que hasta entonces ha estado erróneamente relacionada una especie de celibato y en torno a la que existe una gran falta de información. A continuación, te contamos la realidad sobre esta orientación y detallamos algunas situaciones que podrán orientarte si crees que ese puede ser tu caso.

¿Qué significa ser asexual?

Ser asexual se relaciona con que la persona en cuestión puede experimentar poca o ninguna atracción sexual hacia otra persona y/o ningún deseo de contacto sexual. También engloba a aquellas personas que pueden experimentar cierta atracción sexual pero siempre bajo algunas circunstancias y cuyas experiencias se relacionan más con la asexualidad que con otro tipo de orientaciones.

Por lo tanto, es una creencia errónea pensar que las personas asexuales no pueden mantener relaciones sexuales de forma satisfactoria, sentirse atraídos por alguien de forma romántica o intelectual o masturbarse. Pero sí son lo contrario por lo tanto a las personas alosexuales, las cuales sí experimentan atracción sexual hacia otras personas.

En las personas asexuales, puede presentarse una excitación física y placer en esas relaciones, pero no hacia una persona en concreto, sino más bien por sentir el placer de la otra persona o por sentirse sentimentalmente más cercanos a ella.

Una orientación sexual alejada del celibato o la abstinencia

Constantemente se ha relacionado de forma equivocada la asexualidad con el

celibato o la abstinencia, algo para nada relacionado con el verdadero sentido de esta palabra. Una de las razones más evidentes es que tanto el celibato como la abstinencia son posturas ideológicas de carácter voluntario, mientras que la asexualidad es una orientación sexual y no una elección.

A menudo, las personas asexuales también se sienten atraídas por otras de forma romántica y pueden desear una relación emocional más profunda con alguien, abrazarse, besarse, enamorarse o tener una relación platónica que vaya más allá de una mera amistad. Tristemente, en nuestra sociedad, una mayoría sigue sin entender la realidad de este término.

¿La razón? Ya sea por falta de educación sexual o por estar inmersos en una sociedad hipersexualizada, todavía hoy son muchos los que aún no comprenden por qué hay personas que no pueden sentirse atraídas sexualmente por otras.

¿Cómo saber si lo soy?

Si piensas que te puedes identificar con esta orientación sexual a continuación te detallamos algunas situaciones relacionadas con la asexualidad que podrán orientarte, pero no olvides que tú y solo tú tendrás siempre la última palabra. Nadie mejor que uno mismo para conocerse y para autoexplorarse.

  • Puedes llegar a sentir presión por disfrutar del sexo: a menudo escuchas a otras personas hablar del sexo como algo maravilloso, pero para ti solo suscita falta de interés y en ocasiones incluso presión por tener que sentir algo que realmente no deseas.
  • No sientes atracción sexual por otras personas: puedes llegar a engancharte de alguien de forma intelectual y romántica, pero no sentirte atraído por el lado sexual o desear un acercamiento físico.
  • A menudo la sociedad te define como una persona fría, distante o despegada por esa falta de deseo sexual.
  • Puedes llegar a disfrutar del sexo en ciertas ocasiones pero solo si hay un vínculo especial con esa persona.
  • A menudo sientes que el sexo te aburre

Tras comprender la realidad del término asexual y si aún tienes dudas al respecto, no dudes en contactar con algun profesional de la sexología para que pueda ayudarte a resolver cualquier duda y asesorarte al respecto.