Vivimos en una situación en la que cada vez son más las mujeres que acuden a gimnasios comerciales y que por llevar a cabo determinadas acciones (las cuales no deberían ser juzgadas) acaban siendo el centro de atención de la sala y optan por darse de baja.

Hablamos de situaciones en las que una mujer se acerca a la zona de entrenamiento muscular, rodeada de hombres levantando pesas y que, a la que ella decide acercarse para hacer lo mismo, se le clavan por la espalda miradas de hombres juzgándola.

Parece mentira que en pleno siglo XXI, una chica no pueda acercarse a esos espacios habituales en los gimnasios comerciales. Zonas todavía no aceptadas como 'aptas' para todos los clientes por igual.

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La incomodidad es tal, que ciertas acciones que observamos en el gimnasio pueden ocasionar una situación de violencia de género y que en ocasiones la incomodidad de la mujer no solo viene por parte de las clientas.Las monitoras también sufren comentarios o incluso desprecios ante los que tienen que elegir entre una clase impartida por un hombre o mujer.

Esta actitud primitiva dominante, priva a las demás usuarias de utilizar espacios del gimnasio libremente, sin miedo a estar vigiladas por cualquier otra persona.

Una realidad que ha reflejado un informe sobre el acoso en los gimnasios. Una problemática que persiste y que afecta directamente a la retención de clientes en las instalaciones deportivas, hasta el punto que es el causante de hasta un 15% de las bajas.

Las mujeres sufren más del doble de situaciones de acoso que los hombres, pero el 92,31% de las veces no se denuncia. El acoso es un mal que persiste dentro de los gimnasios, que afecta a 3 de cada 5 mujeres, y que influye directamente en la percepción que los clientes tienen del centro deportivo, hasta el punto de ser motivo para causar baja.

El acoso en los gimnasios acaba repercutiendo en la retención no sólo para el centro deportivo en el que ocurren casos, sino para la industria en general, que ve en entredicho su imagen.

Tal es el punto que el estudio destaca que el 14,42% de las mujeres y el 19.64% de los hombres que sufren acoso dejan de acudir a centros deportivos por completo.

Pero para que esto deje de ser un problema además de denunciarse comienzan a haber espacios en dónde las mujeres se puedan sentir cómodas y puedan ejercitase sin sentirse juzgadas por ello.

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B3B exclusivo para mujeres

El Ceo y Fundador, Juan Garaizar Arbeo, asegura que la creación del Women Studio es en parte porque se detecta a un colectivo de mujeres cuyas necesidades de entrenamiento no estaban cubiertas.

B3B desarrolla un método de alta intensidad, muy eficaz y eficiente exclusivo para mujeres urbanas, con poco tiempo, que buscan resultados, y que al mismo tiempo disfrutan de un rato agradable y forman parte de una comunidad de mujeres activas.

Al gimnasio llegan mujeres "con diferentes backgrounds" y es que existen algunas que llegan por primera vez a un gimnasio en su vida y se lanzan a una actividad encontrando su sitio como otras que ya están acostumbradas.

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Las que vienen de gimnasios “comerciales” aprecian todas las facilidades que se

encuentran, el método, el ambiente, el que todo esté pensado para ellas y en el que se puedan relajar y "bajar la guardia en un clima mágico", añade el fundador.

El gimnasio ofrece sesiones en las que las mujeres pueden invitar a cualquier persona en la que también los hombres están incluidos. "En nuestras sesiones “Boys Are Welcome” nos dicen que deberíamos tener algo parecido para hombres", explica Garaizar Arbeo.

El concepto de especialización resulta muy atractivo pero si todavaía no hay de hombres es porque no han sentido la necesidad ni la incomodidad de crear un gimnasio solo para un determinado género al mismo punto en cómo lo viven las mujeres.

"Creemos que es un plus, no es que segreguemos por género sino que nos

hemos especializado en crear un método específico para la mujer", añade Garaizar.

B3B nace porque no había ninguna propuesta de alta intensidad dirigida y pensada para las mujeres de inicio a fin. Muchas de estas actividades estaban más bien concebidas para hombres y cuando se pensaba en propuestas exclusivas para mujeres siempre se tendía a actividades "un poco más light", añade el Ceo.

Sin duda, B3B y otros gimnasios exclusivos para mujeres buscan concienciar de la importancia de los ejercicios 'para todos' y que ningun entrenamiento es de género.