Se les conoce como ‘Las leonas del motocross’. Gabriela Seisdedos y Daniela Guillén forma la selección femenina española de motocross y hacen honor a su apodo, en un deporte considerado hasta ahora ‘de hombres’, y en el que se han tenido que abrir camino a base de quemar rueda, saltar baches y muchas caídas.
No en vano, Gabriela atiende a magasIN desde la cama de un hospital porque acaba de ser operada de una lesión de rotura del ligamento colateral cubital del dedo gordo de la mano derecha, por una mala caída.
“A nivel deportivo quiero ser lo más competitiva siempre y mejorar respecto al año anterior, aunque veces no es posible. Ahora por ejemplo, me lesiono justo antes de la primera carrera del Mundial, y eso hace que cambien los planes. Quiero recuperarme el dedo lo antes posible y poder ir al Gran Premio de España en tres semanas que quedan. Esa es mi meta ahora mismo”, asegura la 9 veces campeona de España de MXF.
Y continúa: “La meta en mi vida, en todo lo que hago, es dar el 100% y hacerlo lo mejor posible”.
¿A qué edad comenzaste a practicar motocross?
Tengo 28 años y empecé a competir con ocho años. Llevo toda mi vida dedicada al deporte. Comencé porque a mi padre le gustaban las motos a nivel aficionado. Empezó a hacer motocross a la vez que mi hermana y yo, lo hicimos todos a la vez. Lo que ocurrió es que yo, a diferencia de mis hermanos, tenía claro que quería competir.
9 veces campeona de España de MXF, ¿no tienes rival en nuestro país?
Para mí, no ha habido rival hasta ahora. Es verdad que yo tenía un nivel superior, ya que hice el Mundial durante años, y tenía nivel suficiente para venir a España y ser la más rápida. Es verdad que cada año, todos los campeonatos cuestan.
Miro para atrás y veo nueve veces campeona de España, y para mí es un logro importante. Solo un fallo de motor en una carrera y dejas de luchar por el título de inmediato. Sé que he sido una referente para muchas pilotos, sobre todo ahora. Y Daniela ha cogido el relevo, muy bien cogido porque está en lo más alto del Mundial y es una buenísima piloto.
Has abierto la vía para muchas otras mujeres en este sector, ¿lo tuviste difícil como mujer para comenzar?
Al principio no te das cuenta, eres pequeña, vas a correr con los chicos, no hay categoría de chicas, y lo mismo que en un parque juegas con niños y niñas, no te fijas. Y lo mismo me ocurría a mí que competía con chicos, y hasta ese punto no había problema.
El problema vino cuando yo empecé a correr más rápido en el Campeonato de España. Y sobre todo, cuando pasé a moto grande.
Estaba siendo bastante rápida y a los padres de los pilotos no les gustaba que ganara una niña y siempre está el típico que te insulta. Menosprecios a los que no me gusta darles demasiada importancia porque no lo merecen.
Mucho machismo...
Machismo… no lo sé. Simplemente cuando quería ir al mundial, no había ayudas para nosotras. Y me tuve que abrir camino de alguna manera, y así en general con todo. Los inicios fueron bastante difíciles sobre todo con tema patrocinadores y ayudas. Para las marcas yo era como una niña a quien no tomaban en serio. Pero a base de persistir, de hacer méritos, me fui abriendo camino. Y seguro que tanto yo como muchas otras chicas, por ejemplo Laia Sainz, han tenido que hacer lo mismo.
¿Vamos por buen camino?
El tema de la igualdad, creo que estamos mejorando muchísimo. Porque si miro atrás, ahora no tiene nada que ver. Es decir, ahora estoy en un equipo profesional, que cuentan conmigo, que me valoran como piloto, como persona y valoran mi trabajo, y eso ya es un cambio abismal.
Pero hay ciertos sectores que juegan a que haya igualdad de cara a la galería y después no es así. Ahora se supone que estamos de moda, y parece que todo el mundo apoya, no es realmente esto. Vamos por buen camino, seguimos luchando todas, no solo las pilotos, sino también periodistas, promotoras, desde las federaciones, cada vez somos más mujeres que nos entendernos y que en un deporte de riesgo y mayoritariamente masculino, sí se nota el apoyo.
Falta mucho, porque al final los que nos tienen que dar valor para tener esa igualdad, todavía no nos la están dando: promotores y televisión, que es lo que más mueve, y aunque damos pasitos, es muy complicado.
¿Cuáles son las dificultades del motorcross frente a carreras por ejemplo como MotoGP?
Comparar MotoGP con Motocross es como comparar el descenso con la bici de carretera. La diferencia principal es el cambio de trazada. La velocidad requiere de una concentración extrema y de no fallar, de dibujar perfectamente las trazadas. En cambio, en el motocross tienes que improvisar muchísimo. Estar mirando nuevas trazadas, cambiar líneas y creo que el nivel físico, desde mi ignorancia porque no he corrido en velocidad nunca, diría que en motocross es un poco más exigente.
¿Cuáles son tus sueños?
Los sueños van cambiando. No suelo tener, y si los tengo que tener son bastante realistas; hace mucho, a nivel deportivo era ser competitiva, en el Mundial. Y ahora van cambiando. Me motiva muchísimo que Daniela pueda ganar el mundial, que yo la esté ayudando y es una oportunidad. Estoy muy feliz pudiendo estar en esta ecuación de ayudar a Daniela a que sea Campeona del Mundo. Que sería el sueño de ella, pero podría ser un sueño compartido. No podría decir un sueño, o el sueño de mi vida… y lo que venga bienvenido sea, yo daré el 100%.
Daniela Guillén, recién cumplidos los 17 años, ha sido la debutante más joven en la historia del Campeonato Mundial de Motocross.
“La primera vez que me subí a una moto fue a los tres años de edad cuando una vecina trajo una moto a casa y desde ese momento ya no me he vuelto a bajar de una”, asegura la joven.
Y continúa: “Mis padres desde bien pequeña siempre me han apoyado y ayudado a que yo pudiera cumplir mi sueño”.
Has sido la debutante más joven hasta el año pasado, incluso comenzaste cuando aún no había categoría femenina y ganabas a los chicos...
Desde pequeña he competido con chicos, por lo que era la única chica de la categoría y los comentarios machistas eran evidentes, pero sobre todo, por los padres que los hacían.
Al final, entre los pilotos siempre nos hemos respetado, tanto en la pista como en el paddock.
¿Cuántas horas entrenas a las semana para el mundial?
Entreno seis días a la semana, ya que tengo un día de descanso total. De estos seis días, hago moto cuatro o cinco, combinándolo con la actividad física guiada por mi entrenador personal y mi nutricionista.
¿Cuál es tu meta Daniela?
Ser campeona del mundo.