Roberto García Osorio trabaja en la Unidad de asistencia en rampa del aeropuerto de Ibiza, realizando funciones de agente jefe y formador. Llegó en 2005 a la isla pitiusa, de la cual se considera hijo adoptivo y un completo enamorado.
García Osorio cuenta a MagasIn cuáles son sus rincones favoritos de Ibiza.
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Ibiza es un destino soñado ubicado en el Mediterráneo español, un lugar donde te puedes sentir en total libertad y disfrutar de su ambiente hippie, de su moda y de sus mercadillos. Además, de bañarse en el mar o disfrutar de atardeceres con inspiradoras vistas.
Esta genuina ciudad, capaz de ofrecernos la noche más divertida, cuenta con un increíble conjunto histórico y una biodiversidad marina única, declarados ambos Patrimonio Mundial.
En este artículo descubrirás todas las paradas turísticas que no pueden faltar si te desplazas a Ibiza. Una de las islas españolas más famosas y con más turismo del país. Estos son sus rincones mágicos:
Las costas
Imaginar la isla de Ibiza es pensar en calas y playas de aguas cristalinas y arena blanca. Algunos de los destinos que no pueden faltar en tu visita son Ses Salines, Cala Salada, Cala Saladeta, Cala Bassa o Cala D´Hort; así como contemplar el popular atardecer de la Cala de Benirras al son de los tambores hippies y disfrutar de una deliciosa cena en alguno de los restaurantes del puerto.
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¡A comer!
Nuestro experto Roberto García, nos recomienda probar el bullit de peix, uno de los platos más típicos de Ibiza. Se trata de un guiso compuesto por pescado y acompañado de patata y arroz a banda. Es un plato de pescadores, que se sirve con un arroz hervido en el caldo que se obtiene. Lo auténtico es comérselo en la misma cazuela donde se ha cocinado.
Como postre, nada mejor que pedir la greixonera, uno de los postres pitiusos más reconocidos. Esta receta se realiza con ensaimadas del día anterior y forma parte de la carta de casi todos los restaurantes de la isla.
Arte fenicio
El Museo Monográfico Puig des Molins se encuentra en una pequeña colina situada al sudoeste de la bahía de Ibiza que recibe su nombre de los molinos de viento que coronan su cima. Data del siglo XIV. Fue el lugar elegido por los fundadores de la ciudad de Ibiza, los fenicios, a mediados del siglo VII a. C., para enterrar a sus difuntos. Durante toda la antigüedad, se emplazó allí una necrópolis urbana.
Necropolis Puig des Molins
Si queremos seguir disfrutando del arte que inunda esta isla, podemos dar un paseo callejeando por Dalt Vila, centro histórico amurallado de la ciudad declarado Patrimonio de la Humanidad. Dentro de sus muros, nos encontraremos con el Museo de Arte Contemporáneo de Ibiza, la catedral de Santa María de las Nieves, el Ayuntamiento, el edificio de Can Botino y la fortaleza y los baluartes de Ibiza. Un auténtico paseo inundado de arte ibicenco y un placer para la vista.
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Para los pequeños
Un lugar que encantará a los niños es el Aquarium Cap Blanc. También conocido como Sa cova de ses llagostes, ya que años atrás era un criadero de langostas. Es un acuario marino instalado en una cueva natural, donde se pueden observar las especies marinas típicas de Ibiza. Se trata de un pequeño acuario, pero hacen una fantástica labor como centro de recuperación de especies marinas.
Las mejores vistas
La Torre des Savinar, más conocida como la Torre del Pirata, fue utilizada como torre de vigilancia tiempo atrás y es, sin duda, uno de los lugares más espectaculares de la isla.
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Desde este mirador situado en la Reserva Natural de Cala d’Hort se pueden divisar los islotes de Es Vedranell y Es Vedrá, un mágico y legendario islote de 382 metros de altura. Además, es uno de los puntos más característicos de la isla donde se puede disfrutar de las mejores puestas de sol.