El pasado domingo 17 de septiembre, un cónclave royal tuvo lugar en la ciudad de los rascacielos donde se reunieron dos reinas consortes y una primera dama. El motivo: asistir al evento 'Champions for children' de UNICEF que se ha celebrado en Nueva York. Se trata de una conferencia que tenía como misión situar a los niños en el centro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU ahondando en la necesidad de invertir en su futuro.
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Jill Biden, que ejercía de oradora en tan importante acto, contó con dos invitadas de excepción, que siempre se han mostrado especialmente preocupadas por los problemas de la infancia, causa a la que dedican parte de su labor institucional. Rania de Jordania viajaba hasta Nueva York para apoyar la causa con su presencia, unos días más tarde de participar en otro importante evento empresarial en Londres; su agenda internacional está repleta.
La reina Matilde de Bélgica también estaba presente en este encuentro organizado por la Directora Ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, con motivo de la publicación de un nuevo informe de la organización que pone de manifiesto la vulnerabilidad de los niños al tiempo que destaca la oportunidad sin precedentes de moldear el futuro de los niños, transformando y acelerando el progreso.
Las tres compartieron confidencias e intercambiaron opiones antes y durante la conferencia. Además, hicieron gala de su particular estilo con destacadas opciones estilísticas. La esposa de Abdalá II estrenaba en Nueva York una falda lápiz de largo midi, con franjas degradadas en tonos que iban del berenjena al negro y verde, firmada por la casa Dior y perteneciente a su colección otoño-invierno 2023/24. Tiene un precio de 1.900 euros. La combinó con una blusa negra y zapatos de tacón con la puntera rosa metalizada de Tom Ford. Éste era su segundo viaje fuera de Jordania en pocos días, ya que antes había estado en Londres participando en la Cumbre de Liderazgo Global CogX, celebrada en el estadio The O2. También allí destacó por su estilismo de Alexander McQueen.
En cuanto a la reina belga, elegía un conjunto de camisa masculina blanca con falda tipo años 50 de rayas black&white y salones. No era el único acto de Matilde en la ciudad, pues este lunes 18 de septiembre también asistía a su reunión anual con el Secretario General de las Naciones Unidas y el Vicesecretario General encargado de temas relacionados con el desarrollo sostenible. En cuanto a Jill Biden, se decantaba por un traje en color azul bebé con camisa a juego.
Rania y Matilde de Bélgica, en el encuentro de UNICEF.