La Familia Real holandesa se ha dado cita en uno de los acontecimientos más importantes del año, que se celebra el tercer martes de septiembre y que cuenta con todo el boato que se espera en un acto de la Monarquía. Se trata del Día del Príncipe y en él, los Estados Generales se reúnen en sesión conjunta ante el trono, y en el que el soberano pronuncia el perceptivo discurso que es escrito por el primer ministro y su gabinete.
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Este 2023, Máxima de Holanda se ha coronado con el estilismo elegido. Es conocido su gusto por romper el protocolo a nivel de estilo y por arriesgar en momentos señalados como éste, pero aún así ha sorprendido por el colorido y la espectacularidad de una de las prendas elegidas.
La Reina ha bajado del lujoso carruaje que ocupaba para entrar en el palacio Noordeinde luciendo un vistoso abrigo de colores, sin cuello ni solapas, con ribete ondulado y largo hasta los pies. Una pieza original del diseñador belga Claes Iversen, autor de sus looks más comentados. De nuevo, ha logrado que todas las miradas se claven en ella.
Estrictamente hablando, no puede decirse que haya roto ninguna regla de etiqueta, pues el dress code marca que hay que ir de largo y con tocado. Máxima ha cumplido, pero a su manera. La prenda exterior abrigaba un dos piezas de top y pantalón palazzo en color melocotón y confeccionado con las telas sobrantes de otros diseños; también de Iversen. Otra sorpresa, pues es la primera vez que la esposa del rey Guillermo lleva pantalón en el Prinsjesdag (su nombre en holandés). Rematando el conjunto, un adorno floral en el pelo, tamaño XL.
La Reina ha acaparado todo el protagonismo, aunque sus hijas mayores, Amalia y Alexia, también han deslumbrado con sus estilismos. La heredera al trono ha elegido el azul eléctrico para la ocasión, con un elegante diseño envolvente de Safiyaa, complementos nude, un tocado tipo turbante y unos pendientes; estos dos últimos pertenecen a su madre. Por supuesto, también llevaba la gran cruz de la Orden del León de los Países Bajos, que su padre le otorgó al cumplir los 18 años.
Por su parte, la hija mediana de los Reyes ha brillado como nunca en el Día del Príncipe con un vestido en color azalea de la firma Zhivago. La parte de arriba simula una capa y la falda es de corte sirena dibujando su silueta. Alexia se ha dejado el pelo suelto, recogiendo uno de los laterales con un discreto tocado floral. Al igual que su hermana, ha 'asaltado' el armario de Máxima para coger prestados unos guantes de piel en color granate.
Una vez dentro del palacio, el Rey ha pronunciado su discurso anual y seguidamente los Orange casi al completo (faltaba la hija menor que estudia bachillerato internacional en Italia) han salido al balcón a saludar.