Apenas a unos meses de los Juegos Olímpicos de París, continúa el debate sobre la dificultad para compaginar lactancia materna y deporte de élite. Las redes se llenan de reivindicaciones y denuncias de las deportistas que han sido madres y que buscan su visibilización.
Una de ellas, la estrella de judo Clarisse Agbegneno, ha sido muy firme estos días en la campaña que ha iniciado por las necesidades de las nuevas madres.
También la paralímpica Sarah Storey, que ha ganado 28 medallas, ha manifestado que es totalmente loable y posible ser una atleta de élite y amamantar a un bebé. En sus redes compartió que es "posible amamantar y estar en el nivel más alto del deporte porque yo lo he hecho. Tu bebé está allí contigo, no está llorando, no está molesto y puedes concentrarte en el trabajo que tienes que hacer como atleta de élite", así de sencillo.
Las que abrieron camino
En torno al tema de la conciliación y la maternidad, son muchas las deportistas que han ido abriendo camino a las generaciones posteriores.
Así Antonella González, jugadora del club argentino de baloncesto, Tomás de Rocamora, dio el pecho a su bebé de once meses en un descanso de un partido y la imagen se viralizó en redes sociales, cosa que sorprendió a la protagonista y abrió el debate de la lactancia en el deporte de élite.
En nuestro país, Teresa Portela, Isabel Macías o Leire Olaberria abrieron el camino a las que vinieron detrás. "El tema sigue impactando y tenemos que trabajar para una conciliación necesaria en el alto rendimiento", aseguraba Macías.
¿La lactancia resta rendimiento?
Por otro lado, la OMS recomienda la lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses. Pero esto, en las deportistas de primer nivel, con un impacto físico, supone incertidumbre.
En EEUU, fueron Serena Williams y Alex Morgan, dos de las deportistas más mediáticas, quienes trataron de normalizar la maternidad con su ejemplo.
La futbolista se mostró durante los partidos con el Tottenham dando el biberón a su bebé, mientras que Williams ha realizado campañas reivindicando sus derechos. A pesar de esto, el entrenador de Serena cuestionó su rendimiento, asegurando que no volvería a su nivel hasta dejar la lactancia.
Aunque había decidido dar el pecho a su hija durante tres meses, finalmente lo extendió cinco meses más, al sentirse muy vinculada a su pequeña Olympia. Pero, tras una serie de malos resultandos en la pista, la tenista dice: "Cogí a mi hija, lloré y le dije que teníamos que dejarlo ahí", confirmó la ganadora de 23 Gran Slams.
Análisis del COI sobre lactancia
Ante esta avalancha de reivindicaciones y polémicas, el COI realizó un estudio del que extrajo unas conclusiones, que se difundieron en una reunión en Lausanne:
Con la lactancia hay un incremento del gasto calórico que normalmente va asociado a una pérdida de peso.
No se ha comprobado que la alta intensidad del deporte influya en la calidad de la leche materna.
El ejercicio aeróbico moderado mejora la calidad y cantidad de la leche materna, mientras que el ejercicio intenso puede aumentar el ácido láctico.
No hay evidencia de que se produzca osteoporosis o fracturas ni que suponga un factor de riesgo.
Tras estas apreciaciones, el comité ofreció tres recomendaciones:
Utilizar un sujetador deportivo enfocado en la sujeción en lugar de la compresión.
Realizar una hidratación correcta antes de la actividad deportiva.
Alimentar al bebé antes de realizar ejercicio para evitar estar incómodas.
Habitaciones para todas en los Juegos Olímpicos de París
Ahora, a pocos meses de los Juegos Olímpicos de París, que comenzarán el 26 de julio, el Comité Olímpico Francés se ha pronunciado sobre las necesidades de las atletas que son madres y están en periodo de lactancia, estableciendo que durante los Juegos de este verano se proporcionará habitaciones de hotel, destinadas a este fin.
Tradicionalmente, se prohíbe a los niños entrar en la villa de los atletas donde se alojan los participantes y entrenadores durante los Juegos.
La medida llega después de las reivindicaciones de las atletas en las redes, y ya se ha confirmado que a las deportistas en periodo de lactancia se les ofrecerán habitaciones en un hotel cercano a la villa, de 10.000 habitantes, que se ha construido en Saint-Ouen, al norte de París.
Estas habitaciones podrán ser utilizadas por las atletas para domir con sus bebés, o por sus parejas, ya que los pases para que los niños entren en la villa están 'muy restringidos'. También habrá un área social especial para las familias en el hotel.
La secretaria general del Comité Olímpico Francés, Astrid Guyart, ha declarado que esta iniciativa "no tiene precedentes y queremos que se convierta en permanente, que no sea algo puntual por tratarse de los Juegos Olímpicos de París".
Conciliación y deporte de élite
Lo cierto, es que la conciliación es uno de los mayores retos a los que tienen que hacer frente las deportistas de élite fuera del terreno de juego, y es la gran deuda de las instituciones y federaciones con un colectivo, que se ve forzado a combinar en la mayoría de los casos su máximo momento profesional como deportista con la edad fértil.
Una de las deportistas españolas que más se ha manifestado en este sentido es la exnadadora artística y actual presidenta de la Comisión de Maternidad y Deporte del Comité Olímpico Español (COE), Ona Carbonell, madre de dos hijos, que decidió retirarse de la primera línea poco después de dar a luz al segundo.
Carbonell contó en una entrevista a EFE que "la conciliación en el deporte no es un reto fácil. Yo lo viví como algo bonito porque tuve el apoyo de mi entrenadora, de mi equipo y la federación, pero la mayoría de las deportistas no lo tienen".
La medallista aseguró que, aunque quería ser madre antes, "costaba encontrar el momento. El cuerpo es nuestra principal herramienta de trabajo y hacemos un cambio brutal durante el embarazo y el postparto", destacaba Carbonell, que ahora ayuda a las deportistas que quieren ser madres desde el COE.
"Estoy segura de que la maternidad y el deporte pueden ir de la mano, como han demostrado grandes deportistas de la talla de Serena Williams y Naomi Osaka (tenistas) o la velocista norteamericana Allyson Felix, que fue medallista olímpica después de ser madre", asegura.
Para que haya más avances, subraya que hace falta que la conciliación "se visibilice mucho más, que las deportistas tengan toda la información posible para tomar esa decisión y que tengan facilidades y becas", pero confía en que la sociedad "está en el camino correcto".