El calor del verano hace que el agua sea el protagonista de muchas de las actividades de ocio de esta época del año. Y es que el ascenso de las temperaturas hace necesario refrescarnos con un chapuzón. Las playas son la opción favorita, pero en zonas de interior existen muchas otras posibilidades que no tienen nada que envidiar a la costa.
En este sentido, las piscinas naturales suponen una opción ideal para escapar del calor veraniego en lugares donde no hay costa. Además, al estar ubicadas en enclaves naturales, permiten disfrutar de parajes impresionantes e incluso realizar actividades como el barranquismo o rutas.
Existen infinidad de manantiales y playas de agua dulce en España que son auténticos paraísos. Algunas de ellas desconocidas para muchas personas. Es el caso del Salto de Bierge, en Huesca, una piscina natural que, además, cuenta con una espectacular cascada.
El Salto de Bierge es una zona de baño situada en el municipio de Bierge, a unos 50 minutos en coche de Huesca. La piscina natural se ubica en un espacio protegido, el Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara, por lo que existe una estricta normativa que limita, por ejemplo, la instalación de establecimientos o el uso de colchonetas y barcas.
Lo cierto es que esta piscina natural se encuentra en un entorno natural envidiable que lo convierte en un activo turístico y económico clave para el municipio de Bierge y la Comarca de Somontano. Situado en la confluencia del río Alcanadre con la presa hidroeléctrica de Bierge, esta zona de baño atrae a miles de bañistas cada verano.
Aguas cristalinas y una cascada de ocho metros
El Salto de Bierge es también un lugar imprescindible para visitar por su espectacular cascada de, nada más y nada menos, que ocho metros de altura. Tirarse desde lo alto de este punto, eso sí, está prohibido por motivos de seguridad desde el año 2016.
En verano, la piscina natural se convierte en un lugar de atracción para bañistas, gracias al remanso de agua de más de 400 metros cuadrados de superficie que se forma antes de precipitarse por el azud. El color de sus aguas cristalinas hace que sea, además, uno de los puntos más fotografiados de la provincia de Huesca.
Existen dos zonas bien diferenciadas en el Salto de Bierge. Por un lado, la parte inferior, una gran poza con grandes losas de piedra donde poder colocar las toallas y, por otro, la zona superior, una piscina de aguas tranquilas y poco profundas. Además, hay un área arbolada con abundante sombra donde se concentran muchas familias para realizar picnics.
El río Alcanadre, desde su nacimiento en la Sierra de Galardón, hasta su desembocadura en el Cinca, sorprende por sus barrancos. De hecho, es un paraíso para los barranquistas, que encuentran un punto ideal para practicar su actividad deportiva. Además, el Salto de Bierge es punto de llegada y partida de varias rutas deportivas y de senderismo para los grandes amantes de la naturaleza.
La piscina natural del municipio de Bierge se ha convertido en uno de los lugares más populares y concurridos de toda la Sierra de Guara, especialmente en verano. Debido a la gran afluencia de personas, el Ayuntamiento de Bierge regula en verano su entrada. Para acceder es necesario adquirir los tickets por internet con antelación. Su precio es de tres euros para mayores de 6 años. Los niños menores de esa edad tienen entrada gratuita.
El aforo diario del Salto de Bierge está limitado a 250 personas (220 bañistas y 30 barranquistas). En cuanto al horario de apertura en verano -del 10 de junio al 31 de agosto-, es de 09:00 horas a las 19:00 horas de lunes y viernes. Sábados, domingos y festivos, el cierre se extiende a las 20:00 horas.