Roma es una de las ciudades más impresionantes de todo el planeta, de hecho, en la época gloriosa del Imperio romano, se consideraba "la capital del mundo", y es por eso que "todos los caminos llevaban a Roma". Por mucho que una visita siempre sea imprescindible, para entender una parte de la historia, hay veces que llegamos a ella sin tener que viajar demasiado.
En su paso por Hispania, los romanos dejaron un legado y una cultura imborrable que a día de hoy conforma gran parte del patrimonio histórico y artístico de nuestro país. Este se extiende desde teatros y anfiteatros, hasta villas enteras, acueductos o incluso paisajes naturales.
Tarragona, Mérida, Itálica (en la sevillana Santiponce), Cartagena o Lugo son las que mejor nos hablan de aquella civilización. Mientras que es posible que hayamos oído hablar de todas las anteriores, hay algunos rincones mágicos que esconden una parte de toda la historia que ocurrió hace miles de años, pero que no son tan recordados, como Baelo Claudia, en Tarifa.
Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia, Tarifa
Baelo Claudia fue una ciudad romana situada en la ensenada de Bolonia, en la actual población de Bolonia, a unos 22 km al noroeste de la ciudad de Tarifa. Unas ruinas que no podrían estar en otro lugar, que en la Mejor playa de España en 2023.
Se trata de un yacimiento romano muy bien conservado, declarado Monumento Histórico Nacional, que se ubica en un enclave envidiable junto a la playa y es el conjunto arqueológico más importante de la provincia de Cádiz, que nos enseña cómo era la vida hace miles de años.
El Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia es un punto de referencia cultural e histórico, no solo por la narración que lo acompaña, sino también porque son los únicos restos en la provincia que están datados en el siglo II a.C., lo cual hace más especial —si es posible— al mismo.
El Yacimiento es un ejemplo de ciudad marítima romana y es que su posición es más que privilegiada, pero también es muy estratégica, ya que al encontrarse junto al mar, disponía de fábricas de salazones para el pescado.
Estas fábricas estas estaban provistas de piletas o saladeros, con el fin de macerar el pescado en sal y elaborar las apreciadas salsas de pescado. Este tipo de alimento era igual de apreciado hace miles de años, y es que la captura del atún en almadraba y su conservación constituyó una industria indispensable y fue la causa fundamental del nacimiento y prosperidad de Baelo Claudia.
Las fábricas no era lo único que albergaba el yacimiento, porque en su interior se pueden observar edificios industriales y religiosos, construcciones como murallas y acueductos, y uno de los lugares más importantes de la ciudad, el teatro, una ubicación que se sigue utilizando para distintas representaciones.
Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia.
Lo primero que llama la atención a los visitantes en Baelo Claudia, además de la ubicación y todas las columnas, es la escultura de Trajano que preside el foro y es uno de los grandes símbolos. Se trata de una réplica de la original y una de las grandes joyas arqueológicas prestadas al Museo Provincial de Cádiz.
A través de esta pieza, la ciudad romana quiso rendir homenaje al nuevo emperador, que estuvo desde el año 98 hasta su muerte en 117. Tal y como explican desde el Diario de Cádiz, la réplica se localizó en las excavaciones llevadas a cabo en la zona de la basílica de Baelo Claudia, con la cabeza separada del cuerpo.
Para visitar este yacimiento, los ciudadanos de la Unión Europea pueden acceder de manera gratuita, mientras que el resto debe pagar 1,50 euros por la entrada. Una cita que también incluye la visita al museo, para conocer la historia del conjunto arqueológico.
A pesar de que visitar las ruinas siendo europeo sea completamente gratis, La Junta de Andalucía está preparando una norma para comenzar a cobrar en los museos, conjuntos y enclaves que gestiona la Administración autonómica, por lo que podría comenzar a costar dinero dentro de poco.
Además de poder recorrer uno de los mejores ejemplos de urbanismo romano en esta ciudad marítima, el entorno que la rodea no es para menos, porque la Playa de Bolonia tiene la medalla de oro como Mejor Playa de España en el 2023. Una playa en la Costa Atlántica con arena blanca y aguas cristalinas.
Playa de Bolonia, Mejor playa de España 2023
La Playa de Bolonia no tiene nada que envidar a otros destinos del Caribe. Se trata de un entorno natural con parajes llenos de una naturaleza prácticamente virgen, con unos 4 kilómetros de arena fina y aguas cristalinas que, de forma general, no tiene grandes masificaciones.
Que esté vacía no es algo que se dé por su belleza, y es que solo se puede acceder por la N-340 y la carretera es estrecha y sinuosa, pero el camino merece totalmente la pena, ya que además, está declarada como Monumento Natural.
Al este de la playa, encontramos unas piscinas naturales que se forman cuando baja la marea. El agua del mar se estanca entre las rocas, generando un barro con el que la gente suele embadurnarse para hacer una sesión de Spa gratuita. Se puede llegar tras aparcar al final de la calle paralela, caminando en dirección a tarifa.
Playa de Bolonia.
Su "distancia" y "difícil acceso" consigue que no mucha gente acceda hasta allí y, por tanto, podamos disfrutar en tranquilidad, especialmente en verano, de una joya creada por la naturaleza.
No solo eso, sino que el territorio también cuenta con una gran duna, con más de 30 metros de altura y 500 de anchura. El viento utiliza la orientación sureste-noroeste de la costa para llevar la arena hasta el final de la ensenada, donde forma la duna especial y blanca.