Activista y traductora para el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas

La chispa de las revoluciones en los países árabes fue encendida por un hombre: Mohamed Bouazizi, un vendedor ambulante tunecino que se inmoló y desencadenó una serie de levantamientos y revoluciones en la región. Sin embargo, debido a la falta de una sociedad civil fuerte, estos movimientos quedaron inconclusos.

Tras el asesinato de Mahsa Amini, una joven detenida por la policía de la moral por mostrar unos mechones de cabello y que murió bajo custodia debido a los golpes recibidos por parte de los agentes, las mujeres salieron a las calles en Irán. De este hecho se cumplen dos años. 

Las mujeres iraníes luchan por la propiedad de sus cuerpos, no inmolándose, sino quemando los símbolos del patriarcado religioso, símbolos que muchas mujeres de los países vecinos reconocen muy bien. "Yo soy dueña de mi cuerpo, no el Estado, ni la calle, ni el hogar", proclamaron.

De manera histórica, las mujeres que lucharon junto a los hombres para liberar a sus países de los patriarcas gobernantes fueron asesinadas, golpeadas, disparadas y violadas, pero, tras la victoria, los nuevos patriarcas las volvieron a oprimir. Una revolución feminista apunta al patriarcado en el gobierno, en la calle y en el hogar, porque reconoce que no puede haber verdadera libertad sin la emancipación de las mujeres.

En Irán, las mujeres han tomado en sus manos el liderazgo del cambio, convirtiéndose en el objeto y el sujeto de esta narrativa. En el mundo, las preocupaciones de las mujeres suelen ser relegadas al final de las prioridades de las revoluciones y rara vez son su razón de ser.

La historia

El cambio de gobierno en 1978 fue liderado por clérigos que, de inmediato, declararon que cubrir el cabello y los cuerpos de las mujeres era su mayor logro. Los clérigos se convirtieron en los dueños y controladores de esos cuerpos y cabellos.

Durante la revolución, las mujeres lucharon al lado de los hombres, pero, tras la victoria, el clero impuso el uso obligatorio del velo, convirtiéndolo en el símbolo de su islamismo y su gobierno teocrático. Cuando las mujeres y las niñas queman el velo obligatorio en público y ondean sus cabellos y cuerpos ante los ojos de los gobernantes religiosos, ¿no es este un acto revolucionario contra aquellos que les han robado sus derechos y dignidad?

"Soy dueña de mi cuerpo, soy un ser humano más allá de mi cabello y mi cuerpo. Tú no eres mi dueño"

El mensaje de este movimiento a los opresores es claro: "Yo soy dueña de mi cuerpo; soy un ser humano más allá de mi cabello y mi cuerpo, y tú no eres mi dueño". Sin embargo, la revolución más difícil es la que tiene lugar en el hogar, porque todos los dictadores regresan a sus casas. Esta revolución, después del asesinato de Mahsa Amini, ha tenido lugar en los hogares de la mayoría de los iraníes. La tutela del hombre hacia la mujer, bien sea del padre, el hermano o el esposo, en los hogares y en las calles se ha roto para siempre. Padres, hermanos y esposos se unieron a las mujeres en las calles en esta revolución feminista.

En el ámbito político y con el cambio de gobierno, esta revolución feminista no ha logrado resultados debido a la represión. El derramamiento de sangre continúa su camino a través de la revolución social, en los hogares y en las calles, cambiando la mentalidad de los hombres de esta tierra y ganando su apoyo hacia las mujeres, avanzando con fuerza.

El movimiento 'Mujer, Vida, Libertad' ha tenido un impacto inspirador a nivel mundial. A continuación, se detallan algunos de estos efectos.

Apoyo de feministas y académicos

Cientos de académicos feministas, filósofos y profesores universitarios, al publicar un manifiesto, declararon su "solidaridad transnacional" con las protestas en Irán, calificándolas de "revolución feminista". Este manifiesto ha sido firmado por figuras prominentes como Judith Butler, Jacques Rancière, Sara Ahmed, Seyla Benhabib y Alenka Zupančič. Los firmantes afirman: "Debemos ver estas luchas como parte de una cadena y continuar reconociendo que nuestras luchas son comunes".

Gloria Steinem, símbolo del movimiento feminista estadounidense, apoyó el movimiento 'Mujer, Vida, Libertad' y lo llamó una revolución feminista. Añadió que las protestas de las mujeres en Irán son una lucha por el derecho a la autodeterminación.

El programa de televisión italiano Le Iene lanzó una campaña en protesta por la muerte de Mahsa Amini y en apoyo a las mujeres manifestantes iraníes, pidiendo a sus espectadores que se cortaran el cabello, lo colocaran en un sobre y lo enviaran a la embajada de Irán en Roma, para luego compartirlo en las redes sociales. Por otro lado, en la ciudad de Bolonia, Italia, durante un partido de baloncesto femenino, una valla publicitaria en el estadio mostró la imagen de una joven cortándose el cabello con el mensaje "Libertad para las mujeres de Irán".

En Alemania, un grupo de activistas con sede en Berlín organizó una sentada frente a la oficina del Partido Verde en Berlín durante una semana, las 24 horas del día, "en apoyo al movimiento feminista del pueblo iraní y en protesta por el silencio de los políticos alemanes".

Mona Eltahawy, feminista y escritora egipcio-estadounidense, también elogió el coraje de las mujeres iraníes, apoyando este movimiento y llamándolo una revolución feminista. Michel Maffesoli, sociólogo francés, profesor emérito de la Universidad de la Sorbona y antiguo discípulo de Gilbert Durand, también elogió y apoyó este movimiento, así como lo hizo el filósofo y sociólogo Slavoj Žižek quien afirmó: "Estoy seguro de que el espíritu de esta protesta seguirá latente bajo la superficie de la sociedad".

En Canadá, organizaciones feministas como la Fundación de Mujeres Canadienses vincularon sus campañas a la lucha global por la igualdad de género e inspiraron sus acciones en el movimiento 'Mujer, Vida, Libertad'. Otras muestras de apoyo incluyen el Congreso Mundial de Inteligencia Artificial, Kim de l'Horizon, ganador del libro del año en el ámbito de la lengua alemana, y la Fundación Clooney.

Tras el asesinato de Mahsa Amini, se llevaron a cabo protestas de solidaridad en todo el mundo, incluidas ciudades como París, Sídney, Londres, Nueva York y Toronto. Por ejemplo, miles de personas se reunieron en Berlín para apoyar a las mujeres iraníes.

Un nuevo enfoque

Los activistas de India y Pakistán utilizaron el movimiento para resaltar problemas relacionados con la violencia de género y la represión estatal. Por ejemplo, las protestas en Nueva Delhi vincularon problemas locales relacionados con la violencia contra las mujeres con la situación de Mahsa Amini. En otras zonas del país, como en el sur, han utilizado el eslogan de 'Mujer, Vida, Libertad' para resistir al gobierno y exigir su derecho a elegir su vestimenta.

El lema "Mujer, Vida, Libertad" ha inspirado a las mujeres a exigir reformas democráticas y resistir la represión militar

En Myanmar, un país donde el gobierno militar ha sido acusado de violaciones graves de derechos humanos, el lema "Mujer, Vida, Libertad" ha inspirado a las mujeres a exigir reformas democráticas y resistir la represión militar. Así, en Afganistán y Turquía, mujeres que protestaban contra la represión del gobierno también adoptaron el lema. Estas activistas utilizaron los símbolos del movimiento de Mahsa para apoyar sus demandas de libertad.

Apoyo global

Las redes sociales de Estados Unidos se llenaron por entonces de celebridades que compartían vídeos cortándose el cabello como muestra de solidaridad, convirtiendo así el gesto en un poderoso acto simbólico de resistencia. 

Coldplay quiso sumar su apoyo a la protesta iraní incluyendo en sus actuaciones en directo la canción Baraye, que se ha convertido extraoficialmente en el himno de la revolución iraní. El single de Shervin Hajipour se convirtió en un símbolo de resistencia durante las protestas de 2022 que surgieron tras el asesinato de Mahsa Amini. Coldplay, conocido por su activismo global, reconoció el poder emocional de Baraye al integrarlo en sus actuaciones en vivo y en su nueva canción We pray, apoyando así la lucha de las mujeres iraníes por la libertad y la justicia, y uniéndose firmemente a los defensores de los derechos humanos en Irán.

El músico británico Yungblud; Roger Waters, cofundador de Pink Floyd; Adam Darski, fundador de Behemoth; Viola Davis, destacada figura del cine estadounidense; Omar Momani, caricaturista jordano, y el grupo Gojira, que lanzó su canción Now is the time el 14 de octubre de 2022 en apoyo al movimiento de Mahsa, también mostraron su apoyo a los manifestantes.

Son muchos los artistas que se han sumado a este movimiento de apoyo a las mujeres iraníes. Britney Spears, Angelina Jolie, Justin Bieber, Bella Hadid, Kim Kardashian y Shakira son solo algunos de los destacados nombres.

Cambios en la diplomacia

Estados Unidos y la Unión Europea impusieron sanciones contra funcionarios y entidades vinculadas a violaciones de derechos humanos en Irán. Por ejemplo, la Unión Europea sancionó a oficiales de seguridad y de la policía de la República Islámica involucrados en la represión de las protestas. Estados Unidos y los países europeos han comenzado a incluir cláusulas más estrictas de derechos humanos en sus negociaciones diplomáticas con Irán. Por ejemplo, el Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, mencionó las violaciones de derechos humanos en Irán durante sus reuniones diplomáticas.

Marcando un hecho sin precedentes, la República Islámica de Irán fue expulsada de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer de las Naciones Unidas, un órgano dedicado a promover la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres a nivel global. Esta expulsión es la primera vez en la historia que un país miembro es retirado de un organismo de las Naciones Unidas, lo que refleja la creciente preocupación de la comunidad internacional por la brutal represión del régimen iraní contra las mujeres que exigen sus derechos fundamentales. La decisión, impulsada por el continuo ataque de Irán a los derechos de las mujeres, subraya la presión global para que el régimen rinda cuentas por sus violaciones sistemáticas de derechos humanos.

Personas con camisetas en las que se lee "Mujer, vida, libertad" participan en un flash mob en solidaridad con el pueblo iraní.

Organizaciones de derechos humanos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch intensificaron sus campañas contra las violaciones de derechos humanos en Irán, utilizando el caso de Mahsa Amini y el movimiento 'Mujer, Vida, Libertad' para destacar la situación de los derechos humanos en Irán.

Oposición iraní y activistas

La oposición y los activistas fuera de Irán han ayudado a mantener la atención global sobre este tema. Organizaron campañas y manifestaciones multitudinarias para atraer la atención del público y de los gobiernos del mundo hacia la represión de las mujeres en Irán.

Cultura, simbolismo, libertad

Películas y exposiciones artísticas, como las presentadas en el Festival de Cine de Sundance, han abordado temas relacionados con las protestas en Irán, utilizando la historia de Mahsa Amini para explorar cuestiones más amplias de género y resistencia.

Por su parte, organizaciones como Reporteros Sin Fronteras y la oenegé Internet Sin Fronteras han trabajado para eludir la censura en internet en Irán, proporcionando herramientas y apoyo a los activistas de campo iraníes durante las protestas.

Teorías feministas

Investigadores las prestigiosas universidades de Harvard y Oxford han analizado el movimiento 'Mujer, Vida, Libertad', examinando sus implicaciones para la teoría y las actividades feministas en el contexto de los regímenes autoritarios.

Estudios sobre activismo global, incluidos los realizados por la Universidad de California y otros institutos, han examinado la eficacia de los movimientos de solidaridad transnacional y las actividades digitales inspiradas por las protestas iraníes.

Estos ejemplos demuestran el impacto amplio y diverso del movimiento 'Mujer, Vida, Libertad' y su influencia internacional sobre los derechos humanos globales, el activismo feminista y la diplomacia internacional.

A pesar de la violencia, las mutilaciones de manifestantes, los envenenamientos dirigidos contra alumnas, las expulsiones y suspensiones de la universidad, y la violencia diaria contra las mujeres por parte de la policía de la moral en las calles de Irán, esta revolución feminista continuará su lucha con el apoyo de los hombres de esta tierra.

Este movimiento no solo busca reivindicar los derechos de las mujeres, sino también crear una sociedad más justa y humana. La determinación y la voluntad encarnadas en este movimiento prometen un futuro más brillante; un futuro en el que mujeres y hombres, sin discriminación, puedan vivir en paz y libertad. Esta lucha no solo es importante para el presente, sino también para las generaciones futuras, y nos llevará hacia cambios fundamentales y duraderos.

En última instancia, la victoria de esta revolución feminista será la victoria de toda la humanidad.