Pensar en playas paradisiacas es visualizarnos en un lugar muy, muy lejano, rodeados de exuberante vegetación, un azul cristalino del mar en el que se reflejan intensamente los rayos de sol y paz, mucha paz.
No dejes que tu imaginación viaje tan lejos. España cuenta con una envidiada costa que, sumado al excelente clima con el que contamos, hace que sea un lugar privilegiado en el que pasar las vacaciones, especialmente las de verano.
En plena Costa Dorada, existe uno de esos lugares con los que todos soñamos y que, sin embargo (y por suerte), no está tan masificado. Cala Fonda, perteneciente a la ciudad de Tarragona, es una espectacular playa virgen en pleno Mediterráneo imposible de sacarte de la cabeza.
También conocida como cala Waikiki por su semejanza con la famosa playa de Honolulú (Hawái), esta pequeña cala desborda una belleza única. Rodeada por un frondoso bosque y protegida por acantilados, disfrutarás de un litoral mediterráneo totalmente diferente.
Desde la ciudad de Tarragona tardarás algo menos de 20 minutos y desde Barcelona, unos 90 minutos, aproximadamente. Por supuesto que encontrarás playas y calas más cercanas y también muy bonitas, pero ninguna se asemeja a la belleza de cala Fonda.
La cala más bonita de Tarragona
Cala Fonda o Waikiki es la perfecta definición de la perfecta playa paradisiaca. Apenas cuenta con unos 200 metros de longitud y un ancho de doradas arenas no demasiado extenso. Un lugar escondido en el bosque de la Marquesa, lo que aporta un halo más especial aún.
La quietud de sus aguas bañadas por el Mediterráneo y la intimidad que ofrecen los acantilados de esta cala, lo hacen perfecto para desconectar y pasar un día de playa relajado.
Cala Fonda rodeada por el bosque.
Un paraíso escondido en el que no encontrarás ningún tipo de servicio. De hecho, tal es la paz que ofrece cala Waikiki que incluso podrás encontrar a personas practicando nudismo, aunque nunca ha supuesto un problema para el resto de turistas y bañistas.
Uno de los rituales más frecuentes en cala Fonda es cubrirse el cuerpo con barro que podrás coger de los acantilados. Cuentan que, dejándolo secar al sol y bañándote después en el mar, obtendrás propiedades medicinales.
Cómo llegar a cala Fonda
Desde Tarragona deberás tomar la antigua carretera N-430, dirección Altafulla, hasta llegar a la urbanización de La Morá, a unos 10 kilómetros de distancia. Aquí podrás dejar el coche y continuar a pie hasta el bosque de la Marquesa, junto a un camping.
En este punto encontraréis diferentes caminos, pero en cualquier caso, no olvides que el mar debes dejarlo a mano izquierda.
Cala Fonda, Tarragona.
Cala Fonda o Waikiki no es de las playas más accesibles que encontrarás desde la ciudad, pero sí hay que reconocer que llegar hasta ella supone un agradable paseo de no más de 20 minutos. Caminando bajo las sombras de los árboles del frondoso bosque, obtendrás una panorámica impresionante del litoral tarraconense.
Una vez llegues al acceso de la playa, deberás descender por un camino hasta la arena dorada de la cala. No es peligroso, pero es mejor ir con cuidado para evitar resbalar y disfrutar de esta paradisiaca cala de Tarragona.