Cada vez más extendida en España, el yoga es una actividad que lleva décadas asentada en el mundo occidental. Está demostrado que incluir la práctica de esta disciplina se consiguen numerosos beneficios para cuerpo y mente, desde la reducción del estrés a la mejora de la coordinación y concentración.
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La variante del yoga facila consiste en técnicas que permiten mantener un rostro firme a través de ejercicios sencillos. Lo que habitualmente se intenta conseguir en cabinas de estética, pero de manera totalmente natural, sin ningún pinchazo o láser.
Centrados en la salud física, el yoga facial aporta flexibilidad a la piel, estimula la circulación y elimina la flacidez de la cara. Al igual que con otras prácticas, en cualquier plataforma, como por ejemplo, YouTube, o en cualquier red social, podremos encontrar ejemplos visuales que pueden servir de guía a la hora de llevar a cabo esta disciplina.
¿Cuánto tardan en verse los resultados del yoga facial?
La gran pregunta es si el efecto del yoga facial realmente se nota y en qué período de tiempo. Pues bien, teniendo en cuenta que no todos tenemos el mismo tipo de piel, el resultado puede verse antes o después, pero según los expertos en esta disciplina, se necesitan tan solo 10 días para ir notando avances.
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Asimismo, deberíamos de dedicar de 10 a 15 minutos diarios para la realización de esta práctica. Se recomienda practicar yoga facial una vez al día y cuatro sesiones a la semana.
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Del mismo modo, el descanso también es fundamental para unos buenos resultados, ya que si no, solo conseguiríamos fatigar nuestros músculos. Existen multitud de ejercicios que se pueden practicar para incorporar esta disciplina a tu rutina facial.
Algunos ejercicios que puedes practicar
Si consideras que eres una persona con papada, podrás olvidarte de ella con el yoga facial. La técnica está en presionar el hueso maxilar con el puño de abajo hacia arriba, tratando de no crear arrugas. Al mismo tiempo, hay que sacar la lengua y mover los ojos, manteniendo 10 respiraciones. Este mismo procedimiento tiene que realizarse del mismo modo en el otro lado de la cara.
Centrándonos en la parte superior de la cara, una de las zonas en las que suelen aparecer más arrugas es en el entrecejo. Para esto, el yoga facial también nos ofrece una técnica. En este caso, debemos de sujetar las cejas con nuestros dedos y fruncir el entrecejo para fortalecer el músculo. Para una mayor eficacia se recomienda realizar tres series de 10 repeticiones cada una.
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En la rutina de yoga facial no puede faltar tampoco un ejercicio para evitar los párpados caídos, ya que se trata de una zona en la que la piel es muy fina. Para realizar este ejercicio, basta con colocar los dedos en V entre el lagrimal y el extremo del ojo, llevando la mirada hacia arriba y hacia abajo con los párpados cerrados. Para llevar a cabo los ejercicios también podrás emplear aceites o cremas.