El verano es la temporada del deleite, pero también, la de todos los peligros. Rayos UV, sal de mar, cloro… son solo algunos de los problemas a los que se enfrenta nuestro cuerpo y que conviene anticipar para evitar daños, en ocasiones, irreversibles.

Ya son bien conocidos los efectos del cloro en la piel. ¿Pero qué ocurre con el pelo? Sensible a los cambios ambientales, puede sufrir de forma directa durante estos meses, por su contacto continuo con el agua de la piscina. Así puedes prevenir el daño y cuidar tu melena de forma eficaz.

¿Por qué es problemático?

El cloro tiene efectos nocivos en el pelo: "Utilizado en las piscinas, el cloro es altamente oxidante y puede causar daños significativos. Elimina los aceites naturales del cabello, esenciales para mantenerlo hidratado y protegido. Esto deja el cabello seco, quebradizo y puede provocar virajes de color en el cabello teñido, como sucede con los rubios, que adquieren tonos verdosos", explica Teresa Climent, licenciada en Farmacia y Technical Manager de Nuggela & Sulé.

Utilizado en las piscinas, el cloro es altamente oxidante y puede causar daños significativos. Istock

¿Cómo prevenir?

"Prevenir que el cloro dañe el pelo es crucial para mantener una melena sana durante la temporada de piscinas. Una de las formas más efectivas es mojar el cabello con agua corriente antes de entrar a la piscina, ya que al estar mojado absorbe menos el cloro. Otra de las opciones es utilizar un acondicionador sin enjuague antes de nadar, para crear una barrera protectora, así como enjuagar el cabello inmediatamente después de salir de la piscina para eliminar cualquier residuo de cloro", explica la doctora Carmen Orozco, de Hospital Capilar.

Asimismo, el uso de gorros de natación es muy recomendable para proteger el cabello del cloro. De hecho, los de silicona son, generalmente, más efectivos que los de látex o tela, ya que proporcionan un mejor sellado y son más duraderos. 

Además, existen otros productos capilares que pueden ayudar a crear una barrera protectora contra este químico. "Los aceites naturales, como el aceite de coco o el aceite de argán, son excelentes opciones, ya que recubren el cabello y evitan que el cloro penetre en la cutícula. Además, los acondicionadores sin enjuague y los sprays protectores específicamente formulados para los que disfrutan del tiempo en las piscinas pueden proporcionar una capa adicional de protección, manteniendo el cabello hidratado y menos susceptible a daños", sostiene la doctora de Hospital Capilar.

¿Cómo cuidarlo posteriormente?

Si tu pelo ya ha estado en contacto con el cloro, los profesionales del Hospital Capilar recomiendan lavar el pelo con un champú clarificante una o dos veces por semana para eliminar los residuos de cloro y otros productos, así como usar un acondicionador hidratante después de cada lavado, ya que es crucial para reponer la humedad.

"El champú más adecuado para casos de exposición frecuente al cloro es uno clarificante, ya que está formulado para eliminar eficazmente este químico, los minerales y otros residuos acumulados en el cabello. Además, es beneficioso elegir un champú que contenga ingredientes hidratantes y nutritivos, como la glicerina, el aloe vera y las proteínas de seda, que ayudan a restaurar la humedad y la elasticidad del cabello", expone la doctora Orozco.

De igual forma, recuerdan que incorporar mascarillas capilares una vez a la semana puede ayudar a mantener una melena suave y saludable. También hay varios tratamientos que pueden ayudar a cuidar el cabello que está más expuesto al cloro, como, por ejemplo, los de queratina, que son muy efectivos, ya que fortalecen el cabello y mejoran su resistencia a los daños.

Además, los tratamientos de acondicionamiento profundo, que incluyen ingredientes como el aceite de jojoba y la manteca de karité, pueden restaurar la hidratación y suavidad del cabello. Si buscas una solución rápida, las ampollas capilares reparadoras también son una excelente.