El secreto de la juventud eterna es algo que buscamos sin cesar. Ya no solo sentirnos con energía durante toda la vida, sino también, vernos igual que hace unos años. Conservar el color de nuestro pelo natural y, sobre todo, la elasticidad y firmeza de nuestra piel que, cada año que pasa, va perdiendo facultades.
Por mucho que los cosméticos no pueden hacer magia, es cierto que si los elegimos correctamente podemos neutralizar por completo todas esas pequeñas marcas que nos hacen mirarnos con desconfianza ante el espejo. Y lejos de ser productos elevados de precio, algunos llevan siglos con nosotros, como el aceite de rosa mosqueta.
El aceite de rosa mosqueta para la piel se ha utilizado desde la época de los antiguos egipcios como parte de una rutina regular y natural de cuidado de la piel. Todo ello gracias a que está repleto de casi todos los elementos nutritivos y antienvejecimiento posibles.
Qué es la rosa mosqueta
El aceite de rosa mosqueta, también conocido como aceite de semilla de rosa mosqueta, se obtiene de las semillas de la rosa mosqueta, un arbusto silvestre de flores rosadas y blancas que se cultiva principalmente en Chile y en otros países de Europa Central y del Este; mediante la técnica del prensado.
Durante mucho tiempo se ha confiado en el aceite de rosa mosqueta por sus poderes saludables para la piel, gracias a la excelencia y unicidad de la flor de la que se extrae: destaca por su alto contenido en vitamina A, vitamina C y vitamina E. Añadido a ello, es uno de los aceites más populares al no ser comedogénico en comparación con otros cosméticos comercializados para la cara y el cuello.
El aceite de rosa mosqueta está repleto de vitaminas, antioxidantes y ácidos grasos esenciales que favorecen un cutis sano, brillante, hidratado y con una pigmentación uniforme. Es considerado como el cosmético antiedad por excelencia y uno de los grandes elixires de la juventud.
El uso de un producto natural para el cuidado de la piel, como un limpiador de rosa mosqueta, es seguro para todo tipo de pieles. Las propiedades de sus ingredientes ayudan a reparar la piel y a rellenar las arrugas. No solo beneficia nuestro rostro, sino que no daña los poros ni la superficie de la piel.
Beneficios antiedad de la rosa mosqueta
Todos los beneficios antiedad que contiene la rosa mosqueta se debe a que es un aceite rico en propiedades esenciales, que estimula la renovación cutánea y suaviza la piel, previniendo, así, el envejecimiento cutáneo. De hecho, contiene el trío de ingredientes de belleza definitivo: ácidos grasos antiinflamatorios y vitaminas A y C.
Los ácidos grasos antiinflamatorios y las vitaminas A y C del aceite de rosa mosqueta tratan los signos del envejecimiento, ayudan con la pigmentación, hidratan, reparan la piel dañada y brindan un fuerte impulso protector antioxidante.
La vitamina A presente en el aceite es necesaria para la producción de colágeno, ayuda a eliminar las arrugas y a suavizar la piel, lo cual reduce las marcas para aumentar el tono de la piel. Se ha demostrado que la rosa mosqueta inhibe la creación de MMP-1, una enzima que descompone el colágeno en el cuerpo.
El colágeno es el componente básico de la piel, es esencial para su elasticidad y firmeza; sin embargo, nuestro cuerpo naturalmente produce menos cantidad a medida que envejecemos. Mientras ya hemos visto como actúa la vitamina A, la C se consolida como el compuesto antiedad por excelencia.
La vitamina C es la reina de todos los antioxidantes, por lo que a la vez que combate los radicales libres responsables del envejecimiento, aporta hidratación a la piel y es necesaria para el crecimiento y reparación de tejidos en todas las partes del cuerpo.
Además de estas vitaminas, los polifenoles, antocianinas y la vitamina E tienen propiedades antiinflamatorias para ayudar a nutrir, reparar y mejorar la apariencia de la piel, por lo que el aceite de rosa mosqueta puede ayudar a igualar el tono de la piel y reducir la aparición de manchas oscuras.
Las propiedades astringentes del aceite de rosa mosqueta ayudan a cerrar los poros e iluminar la piel, así como a devolverle la firmeza. En un estudio de 2015, los investigadores encontraron que los participantes que tomaron polvo de rosa mosqueta por vía oral experimentaron un aumento notable en la elasticidad de la piel.
Cómo usar el aceite rosa mosqueta
El aceite de rosa mosqueta se puede añadir a nuestra rutina de muchas maneras, incluso podemos optar por cosméticos que lo contengan en su formulación, aunque la forma más eficaz es comprar el más natural y aplicarlo directamente en el rostro.
Debemos empezar con una pequeña cantidad, aplicando unas gotas sobre la piel limpia antes de acostarnos. De esta forma, veremos si nuestra piel responde bien o, si nos ha causado alguna pequeña irritación o efecto contrario.
El aceite de rosa mosqueta es un excelente desmaquillador, así que también podemos añadirlo como tal, simplemente debemos aplicar un poco de aceite de rosa mosqueta en un algodón o pañuelo de papel y lo emplearemos para limpiar el rostro.
Siempre debemos aplicar un protector solar con al menos SPF 30 mientras usamos aceite de rosa mosqueta, ya que este mismo exfolia la piel y la piel exfoliada es más vulnerable al daño de los rayos UV.