Del amor al odio solo hay un paso: qué es y por qué ocurre el síndrome de la repulsión súbita en pareja

Cuando se trata de hablar sobre el mundo de las emociones humanas, el amor y el desprecio son términos totalmente contradictorios en sí mismos. Sin embargo, estos dos sentimientos que, en principio, resultan aparentemente opuestos, pueden converger bajo lo que se han denominado como el síndrome de la repulsión súbita.

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Este se trata de un término psicológico que ha llamado la atención de expertos en relaciones humanas. El mismo fue descrito en 2007, y se refiere a aquella brusca e inesperada reacción o sentimiento que nos produce aquello que percibimos sobre nuestra pareja y que nos genera una aversión o desprecio inmediato e irrevocable.

Los síntomas de este síndrome pueden variar de una persona a otra, pero suelen incluir sentimientos de disgusto, irritación, incluso odio hacia la pareja dentro de una relación sentimental. Esta transformación emocional puede ser tan repentina como desconcertante, dejando a ambas partes de la relación confundidas, pero también heridas.

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El rechazo puede ser causado por cosas tan sutiles y pequeñas, incluso parecer superficiales, como un gesto, un detalle referente a su físico o forma de vestir, así como una decisión que haya tomado respecto a su vida personal o laboral, o sus gustos. Es una cuestión impredecible.

¿Cuáles son las causas?

Entre los factores que señalan los expertos, los mismos guardan relación con una serie de factores, como la acumulación de pequeñas molestias que no han sido conversadas y trabajadas en pareja, así como la monotonía o la falta de comunicación asertiva. También se puede ver influenciado por cambios hormonales, estrés o experiencias traumáticas del pasado.

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Otras que pueden mencionarse son el final del amor de tipo erótico, la amistad entre la pareja o la ternura. También puede darse en una situación donde una de las partes esté más centrada en observar y destacar los defectos de su contraparte, en detrimento de los aspectos referentes a las virtudes de la misma. 

Una de las cosas que más ha captado la atención sobre esta tipología de síndrome es que no solo se manifiesta en relaciones sentimentales descompuestas o casi rotas, sino también en aquellas de apariencia estable y con perspectivas de futuro, que también pueden verse directamente afectadas por esta desconcertante transformación emocional respecto al vínculo de pareja. 

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¿Es irreversible?

En la mayoría de ocasiones, la falta de compresión dentro (y fuera) de la pareja sobre lo que están viviendo, además del estigma social que existe en torno al síndrome de la repulsión súbita, dificultan la toma de acciones. Así, las parejas afectadas se ven menos preparadas para buscar la ayuda profesional que requieren para afrontar su situación. 

Ante esto, resulta de vital importancia señalar que los profesionales de la psicología y los terapeutas especializados en relaciones de pareja, pueden proporcionar asesoramiento y estrategias para ayudar a las parejas a comprender este síndrome, y así reconstruir su vínculo para salir más reforzados de la adversidad o tomar la decisión de emprender caminos separados.

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Para abordar este tema es fundamental que exista una predisposición de trabajar activamente en cuestiones como la comprensión o la empatía, para que una pareja pueda navegar por este desafío emocional. Hay que ser sinceros sobre cómo nos sentimos, pero evitando hacer daño al contarlo.

En este sentido, los profesionales aconsejan no hacer ghosting, especialmente si se trata de una relación de corta duración que se encuentra en sus primeros momentos. Si lo que realmente deseamos es poner fin a la unión, debemos hacerlo sin hacer referencia a esas situaciones o rasgos que han generado ese sentimiento de profundo rechazo.