Todos los años pasa lo mismo. ¿Te sientes un poco perezoso este mes de enero? ¿Y si fuera por el Blue Monday, que se celebra este lunes 15 de enero de 2024? Detrás de este anglicismo se esconde el lunes considerado como el día más deprimente del año.
Aunque no ha sido demostrado por estudios científicos, parece que este día, y más en general este periodo, es propicio para la aparición de signos temporales de depresión, que probablemente persistirán si no se solucionan.
Fue en 2005 cuando el psicólogo Cliff Arnall señaló esta fecha utilizando una ecuación que a primera vista puede parecer muy científica. Se trata de una fórmula que tiene en cuenta la falta de luz, el clima, la nostalgia asociada al final de las fiestas y la presión a la que nos sometemos cuando hacemos buenos propósitos que pueden resultar irrealizables.
El concepto se tradujo en la fórmula matemática: [W = (D-d)] x TQ : M x Na. La "W" significa "tiempo" (weather, en inglés), "D-d" el gasto de dinero durante las fiestas, "T" el tiempo transcurrido desde Navidad y "Q" el tiempo transcurrido desde los propósitos hechos a principios de año. Por último, la "M" representa la motivación y la "Na" la necesidad de actuar.
De hecho, es una estratagema de marketing para incitar a la gente al consumo. Se dice que Cliff Arnall prestó su nombre a una agencia de relaciones públicas que trabajaba para la agencia de viajes británica Sky Travel. La agencia popularizó la expresión con la esperanza de impulsar las ventas sembrando en la mente de los clientes potenciales la idea de que habría un día más deprimente que cualquier otro y que viajar sería el principal remedio.
Arnall, que se describe a sí mismo como psicólogo, admitió en 2010 que no había nada científico detrás de este cálculo. Desde entonces, aboga por su "abolición", especialmente en el marco de una campaña patrocinada por la Oficina de Turismo de Canarias.
Según confesó en 2018 al diario británico The Independent, en realidad es todo lo contrario al Blue Monday. "Ya sea para embarcarse en una nueva carrera, conocer nuevos amigos, emprender un nuevo hobby o planear una nueva aventura, enero es en realidad el momento perfecto para tomar las grandes decisiones para el año que comienza", explicaba en la entrevista.
Sin embargo, aunque en teoría no hay un día más duro para nuestra mente que otro, el periodo invernal no siempre es propicio para el buen humor. ¿Qué se puede hacer al respecto sin preocuparse?
En primer lugar, la actividad física regular, que se sabe que mantiene la salud mental y alivia el estrés gracias a la producción de norepinefrina y dopamina.
En segundo lugar, que llueva y haga frío no significa que tengas que abandonar tus pequeños proyectos. Planea un fin de semana fuera, redecora una habitación, ve al cine o salga con amigos o familiares.
Tomar suplementos de vitamina D (generalmente sufrimos una carencia de vitamina D durante este periodo), siguiendo el consejo de un médico es una buena opción para tener energía. El zinc y el magnesio también son recomendables durante este periodo. Comer mucha fruta y verdura para beneficiarse de todas sus bondades y vitaminas es esencial para combatir la depresión invernal.
Por fin, dedica tiempo a relajarte, por ejemplo viendo una serie bajo una manta, tomando una taza de té o de chocolate caliente, leyendo un buen libro, dándote un baño o haciéndote un tratamiento facial... Sobre todo los domingos, para empezar la semana más relajada.