Sara Trejo posa en el interior de la librería.

Sara Trejo posa en el interior de la librería.

Estilo de vida

Lana, de la librería Amapolas en octubre: "En España son las mujeres las que fomentan la lectura"

Visitamos este templo de literatura en Madrid para conocer su curiosa historia y hablar de la importancia de la lectura como vía de sanación.

27 junio, 2024 02:30

"Un lector vive mil vidas antes de morir. La persona que nunca lee solamente una". Esta es una frase de George R.R. Martin, el autor de Juego de tronos, que debemos grabarnos a fuego. Las librerías son esos templos de aventura y conocimiento que seguramente todos deberíamos visitar más, porque más allá de ofrecer una compilación de obras, muchas de ellas se han convertido en centros de reunión, con actos literarios interesantes y los libreros y libreras como guías culturales.

Entre todas ellas, Magas ha elegido 'Amapolas en octubre', ubicada en pleno centro de Madrid, con una historia curiosa y un sabor que atrapa. "No es solo una librería. Es un hogar. Un refugio. Un espacio de encuentros y algún desencuentro novelescos", dice la escritora Laura Riñón, fundadora y anfitriona, como a ella le gusta definirse.

Junto a ella, Sara Trejo, que está al frente del establecimiento atendiendo a los lectores y dando sus sabios consejos. No la llames por su nombre, porque ella en realidad es Lana… Todo tiene su explicación y ella misma nos lo explica.

"Laura abrió la librería en 2019 y el nombre de 'Amapolas en octubre' nace de su novela del mismo título que publicó en 2016. Aquí se ha reproducido el ambiente de la historia y muchas personas que venían preguntaban por Lana, que es como se llama la protagonista. Cuando yo empecé a trabajar, el único requisito que me pidió es que yo adoptara ese nombre. Aceptó porque estaba encantada de ser un personaje de la novela y seguir aumentando un poco la fantasía entre realidad y ficción", revela.

'Amapolas en octubre' está ubicada en el barrio de la Justicia de Madrid.

'Amapolas en octubre' está ubicada en el barrio de la Justicia de Madrid. Cortesía

Sara es periodista y el destino le tenía reservado esta aventura porque ella fue, precisamente, la primera persona que entró en la librería cuando se inauguró. En sus estanterías puedes encontrar un sinfín de títulos, entre los que hay muchos de editoriales pequeñas e independientes. Su labor: dar visibilidad a esos otros escritores y apoyar el talento. "Intentamos descubrirles otro tipo de historias o de novelas que a lo mejor no se van a encontrar de forma habitual. Mostrarles editoriales diferentes que no tienen tanta visibilidad", asegura.

Leer sana el alma, despierta la imaginación y genera ilusión. ¿Hay diferencias entre géneros? Pues sí, parece que las hay. "El público que viene es variado, pero hay más lectoras que lectores", confirma.

También existen diferencias de gustos: "La novela, la narrativa, suele ser un género que piden más lectoras mujeres y ellos se decantan más por el ensayo. Pero no sé si es una cuestión de género… Sí que es cierto que cada vez hay más lectores masculinos que se unen a los encuentros, a las tertulias. Antes no había casi ninguno, eran más ellas las que venían. De todos modos, yo creo que en España son ellas las que impulsan la lectura".

Las nuevas tecnologías y el hecho de que la mayoría de los niños y jóvenes se pasen media vida pegados al móvil no empujan a fomentar la literatura. En opinión de una experta como Sara Trejo, que ve a muchos padres con hijos pasar por 'Amapolas en octubre', es "contraproducente" obligarles a leer. Sin embargo, ellas en la librería han creado unas cajitas a las que llaman 'el cofre del teléfono' para guardarlo ahí, ponerlo en silencio o en modo avión, y lo dejas en otra estancia de la casa mientras, por ejemplo, disfrutas de un libro. "Han tenido un éxito tremendo porque es como un control de estímulos", dice Sara.

Otras de sus iniciativas tiene que ver con fomentar la lectura en las empresas a través de lo que llaman 'Librería ambulante'. "Es un conjunto de libros que nosotros seleccionamos y que mandamos a las empresas. Esas obras se quedan allí y van junto con un cuaderno y unas bolsitas para que cada uno se los lleva a casa y lo vaya apuntando. Es una forma de que esos libros estén ahí, cerca de los trabajadores, a mano. Al final incluso muchos están haciendo club de lectura en torno al libro y así se fomenta también las relaciones sociales en el trabajo", nos explica.

Sara Trejo es periodista y también escribe, pero solo para ella. "Laura Riñón siempre dice que todo el mundo debería escribir, otra cosa ya es publicar. Yo creo que escribir y leer es curativo". No podemos irnos de 'Amapolas en octubre' sin preguntarle a Lana, su alterego, alguna recomendación literaria para los políticos en este clima constante de confrontación.

"A mí me encanta Empeñados en ser felices de Miguel Muñárriz, por las risas. Este autor de Asturias, fue librero, y es escritor y periodista. El libro recoge muchas anécdotas acerca de la literatura y del mundo cultural en España. Creo que es un libro que te ayuda a conocer otras vidas y a valorar todo lo que tenemos, lo ricos que somos en cultura".