Idoya Aramendi lleva a sus espaldas más de 30 años de trayectoria profesional en los que ha destacado como experta en negocio internacional, banca, corresponsales, sistemas de pagos, riesgos, compliance y gestión de sucursales en el extranjero.
Nacida en Sudáfrica, su infancia se desarrolló en un entorno internacional. Cuenta con la licenciatura en Derecho y Ciencias Económicas, así como un máster en Derecho Comunitario por la Universidad Robert Schuman de Estrasburgo.
Actualmente, Aramendi tiene como propósito orientar su segunda carrera profesional hacia los Consejos de Administración, área que conoce de primera mano, tras haber formado parte del Consejo de Administración de Iberpay, su Comisión Ejecutiva y presidir su Comisión de Auditoría.
[Las 10 Profesionales y líderes independientes 'Top 100' ganadoras de esta edición]
También ha sido vocal en AMI-Pay (Grupo Asesor sobre Infraestructuras del Mercado de Pago), AMUSE (la Asociación de Miembros y Usuarios de Swift en España) y CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales).
Quienes la conocen la consideran una profesional perseverante y disciplinada, con una personalidad creativa y una clara visión estratégica, lo que la convierte en una candidata ideal para liderar proyectos ambiciosos.
Es una mujer con una gran vocación, algo que refleja a diario colaborando en proyectos de mentoría para jóvenes en riesgo de exclusión y programas de lucha contra la violencia de género, entre otros.
[Estas son ‘Las Top 100 Mujeres Líderes en España’ de la X Edición por categorías]
Por su excelente trayectoria y su compromiso social, la consejera ha sido recientemente nombrada una de 'Las Top 100 Mujeres Líderes' en la categoría de Profesionales y Líderes Independientes.
En esta ocasión, magasIN se cita con Idoya Aramendi para conocer más detalles sobre ella en una entrevista en la que muestra su lado más personal.
Un pensamiento estrella que siempre tiene presente es…
Lo esencial es invisible a los ojos.
Es una de las frases más célebres de El Principito, que desde hace años es mi libro de cabecera. Juzgamos al otro por las apariencias, pero solo cuando escuchamos y atendemos con el corazón podemos ver la esencia de la persona.
La obra de Antoine de Saint-Exupéry nos invita a poner más confianza en nuestro corazón, es decir, en nuestra capacidad de escucha hacia el otro, que en lo que vemos. Los ojos siempre son engañosos porque sólo nos revelan nuestro propio punto de vista.
¿Una anécdota que contenga una enseñanza útil para las futuras Top 100?
La vida es una paradoja que nos enseña que, en cualquier momento, todo puede cambiar… Entre cambio y cambio, solemos olvidarlo, pero hoy vivimos sumergidos en la incertidumbre más absoluta, y como gestores o líderes estamos destinados a ejercer nuestra toma de decisiones en un contexto incierto y multifacético.
Echando la vista atrás, me vienen a la memoria eventos claves de la historia, como la adopción del euro, el ataque a las Torres Gemelas, la crisis bancaria del 2008, los avances en innovación tecnológica como consecuencia del impulso por la pandemia, la globalización de la economía y los riesgos geopolíticos…
En todos y cada uno de estos momentos de vorágine cambiante he aprendido a reflexionar y a tomar conciencia de lo imprescindible que es relativizar lo que nos sucede cada día, sobre todo cuando no tenemos ninguna capacidad para controlarlo.
También he aprendido a preguntarme, ante la adversidad, si algo será para bien o para mal. Y a ver en cada curva del camino una oportunidad de mejora, esperando que llegue lo mejor mientras nos preparamos para lo peor.
Nombre a tres mujeres referentes para usted… ¿Por qué lo son?
Isabel I La Católica, por su capacidad de mando en la Reconquista, su visión estratégica en el descubrimiento del Nuevo Mundo y su calidad humana en relación con la abolición de la esclavitud.
También admiro a la reina Isabel II de Inglaterra. Por su sentido del deber y entrega a su nación, haciendo honor a una vida dedicada a la disciplina y compromiso con su obligación.
Y, por último, la madre Teresa de Calcuta. Por su eterna sonrisa, sincera y radiante en su afán por ayudar al prójimo más desfavorecido, con la alegría de celebrar los pequeños detalles de la vida. Añadiría también el ejemplo de su madre, una mujer luchadora, valiente, precursora y anticipada a su tiempo, moderna, alegre y que la enseñó los valores de la familia y la excelencia.
Recomiéndenos una película, un libro y una canción.
¿Una película? Carros de Fuego, de Hugh Hudson. Refleja una historia de honor, lealtad y superación personal a partir del deporte.
Un libro… El largo camino hacia la libertad, de Nelson Mandela, por regalarnos un ejemplo de la generosidad de un gran líder.
Y una canción: The Way We Were, de Barbra Streisand, por recordarnos la importancia de contemplar nuestro pasado con una mirada reflexiva para poder construir nuestro presente.
¿Una característica presente en la mayoría de las mujeres?
En general, las mujeres nos definimos por nuestra capacidad multitarea y de entrega a lo que nos dedicamos, así como por el afán de alcanzar la excelencia en lo que hacemos.
La conciliación es…
Alcanzar el equilibrio. La búsqueda del consenso.
¿Un consejo para una entrevista de trabajo?
¡Sé tú misma!
Las tres cosas en las que primero se fija cuando conoce a alguien y por qué.
La mirada, como expresión de nuestro interior. La manera de darte la mano, porque dice mucho sobre cómo es nuestro compromiso. Y la sonrisa como forma de enfrentarte a la vida.
¿Con qué pequeñas cosas identifica la desconexión?
Pasear por el campo, admirar la fuerza del mar y tumbarte a mirar las nubes.
¿Un defecto ajeno que no soporta?
La arrogancia y la mentira.
Dormir es…
Un descanso necesario y saludable.
Una manía que la defina.
La autoexigencia.
Un color que jamás se colaría en su armario es…
Me gustan todos. Unos más que otros, pero tengo ropa o complementos de todos los colores y tonalidades.
¿Alguna pregunta con la que crea que se puede aprender mucho sobre los otros?
¿Cómo superas el fracaso?