Esta carta es para todas las mujeres que habéis dado un paso adelante en esta 11ª edición de Las Top 100.

[Así es el listado de 'Las Top 100 Honorarias', el club de mujeres más selecto]

Más de mil mujeres habéis dado un paso adelante, habéis puesto al día vuestros currículums, vuestras historias y relatos, y habéis hecho un profundo repaso de vuestras trayectorias para traducirlo en un pequeño resumen que el jurado debió evaluar.

Ha sido un enorme trabajo y una gran satisfacción ver cómo crece un listado cuyo objetivo siempre fue hacer visibles a más mujeres para que otras se vieran reflejadas en esos espejos. Seguir generando nuevas y maravillosas referentes.

Abrir puertas es uno de los compromisos que pedimos a quienes son elegidas cada año, y éste, muchas estrenarán el sello que las convierte en parte de esta comunidad que ahora encabeza Cruz Sánchez de Lara con sus Magas, y cuya potencia es enorme porque detrás hay un medio que hoy es número uno, como EL ESPAÑOL.

Descubro en esta edición muchos perfiles que desconocía y me enorgullece que cada vez podamos y sepamos encontrar el talento, atravesando la geografía y los sectores donde cada una de vosotras pisa fuerte, con la conciencia y el compromiso de lo que significa ser elegida, representando a una enorme cantidad de mujeres que con vuestros ejemplos se animarán el próximo año, a convertirse en candidatas.

Decía André Breton que es necesario andar por la vida con el ojo en estado salvaje. Estamos en un período de mutación. Todo a nuestro alrededor se está transformando y vemos constantemente cómo se configuran nuevos escenarios en el mundo. 

¿Qué rol vamos a ocupar? ¿Qué compromisos tomaremos?

Es el momento de que pongamos manos a la obra con todo aquello que venimos debatiendo desde hace tantos años. Es momento de actuar y de hacernos escuchar

La tecnología no para de avanzar. Se inventan nuevos dispositivos que se integran con nuestros trabajos, que nos ayudan en muchísimas actividades y nos abren puertas. Pero también nos ponen en un lugar de observadoras de la nueva realidad cuando deberíamos ser productoras y actoras. En el sentido de hacer y de ser parte.

Os pido que estéis atentas, que seáis críticas y que reposicionéis la ética como un valor cada vez más necesario. Debéis decidir cómo queréis que lo nuevo sea parte de vuestras vidas, que venga a sumar -no a restar- y mucho menos a hacernos retroceder con todo lo que muchísimas mujeres han conseguido a lo largo de la historia.

Para ello, debéis estar presentes allí donde se crea, donde se inventa, donde se implementa. Conocer, aprender y enseñar, pero también cuestionar y reflexionar

Donde estemos, debemos dar la nota

Son muchos los desafíos y los temas que a diario inundan los medios. Allí debemos estar, como protagonistas, portavoces, creadoras de opinión en muchísimos temas relevantes de los cuales esta vez solo elegiré tres:

  • La salud. Desde el 2020 empezamos a ser cada vez más conscientes de lo frágil que somos ante la implacabilidad de la enfermedad. Si algo entendimos gracias a la pandemia, fue que únicamente podíamos salvarnos en comunidad. Somos partes de un todo y así debemos actuar. No somos sólo las cuidadoras, también somos las que investigan, las que toman decisiones, las que descubren y las que hacen. 
  • La política. Surgen todos los días nuevas ideas. Pero también bastiones de las viejas formas que no nos incluyen ni representan. Es urgente expresarnos, que haya voces que nos representen y llegar a los estratos más altos donde las cosas que nos importan se deciden. Voces y oídos dispuestos a escuchar los problemas que nos aquejan y que se ignoran. Soluciones de las que seamos parte, generar debates y participar de las conversaciones. 
  • El medioambiente. Que nuestro hogar está en peligro lo sabemos desde hace mucho tiempo. Pero hemos llegado a un punto en el que ya no hay retorno. Tenemos que cuidar nuestro entorno y defender la vida. No solo porque es nuestra casa y está en juego nuestra salud, sino porque las generaciones futuras, nos demandarán por haber desatendido algo tan esencial.

Un protagonismo activo y generoso

Vosotras asumís un protagonismo que estoy segura será activo, y generoso.

Pensad en qué mujeres deberían estar en el escenario el año próximo, de cuántas que no descubrimos nos podéis alertar. Poned vuestro foco, vuestra reflexión y participación, para que escuchemos vuestras voces y propuestas.

No es una utopía pensar que desde vuestros lugares y con vuestro liderazgo, contribuiréis activamente en la construcción de un futuro que refleje valores y aspiraciones de una sociedad que espera respuestas diferentes a los temas de siempre.

Estoy convencida de que cada año, con cada nueva edición, un enorme caudal de talento y energía se pone en marcha. De que contagiaréis a hombres y mujeres que os tendrán como faros. Iluminando un camino más ancho en el que andar codo a codo, bregando por las mejores causas. ¡Enhorabuena de corazón!