Un domingo frío pero soleado dio la bienvenida al desfile de Modesto Lomba para este otoño-invierno 2023-2024. Y si en septiembre, el diseñador vitoriano escogía un céntrico y moderno hotel madrileño para presentar su colección para esta primavera-verano, en esta ocasión el escenario fue el Museo de Historia de Madrid.
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Esta es la 73ª colección de la firma Devota & Lomba, firma que nace en 1986 de la unión del arquitecto Luis Devota y el diseñador Modesto Lomba. Su primera colección fue la de Primavera-Verano 1987 y, en 1988 presentan en Pasarela Cibeles la de Otoño-Invierno 1989.
Han pasado tres décadas y Modesto Lomba, ya en solitario desde que, en 1993, falleciera Luis Devota, ha seguido al pie del cañón, mostrando su sólida formación en sastrería y patronaje, y esta última colección confirma la maestría de un diseñador que fue pionero en la arquitectura hecha moda.
El presidente de la Asociación de Creadores de Moda de España (ACME) desde 2000 es además un visionario, que inició en nuestro país esa corriente del diseño de moda nórdico del minimalismo sofisticado, la pureza de líneas, la perfección en el corte y la innovación en el patronaje que vemos en la Semana de la Moda de Copenhague.
En esta colección, cuyo nombre es Fuente de la Fama, Lomba se 'metió a todos los asistentes en el bolsillo' desde la salida de la primera modelo, con un vestido largo en color oro viejo o dorado oscuro, perfecto para esa mujer ejecutiva que sale de trabajar y todavía debe acudir a un evento y estar impecable.
Porque prácticamente todos los diseños llevaban bolsillos en los que meter la manos, pero también el móvil u otros objetos que la mujer trabajadora de hoy necesita para su día a día. Pero, además, es una colección muy bien pensada y meditada.
Una propuesta de 'armario cápsula', con prendas, tejidos y colores que combinan perfectamente entre sí, para formar un conjunto armónico, muy ponible y sumamente apetecible, como comentaba la prensa especializada.
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Las modelos, que salían desde el edificio y daban la vuelta a la majestuosa Fuente de la Fama (la que preside el patio y da nombre a la colección), llevaban unos recogidos muy favorecedores con trenza a modo de diadema en la parte superior (la peluquería era obra de Yos Baute para Goldwell y el maquillaje, de Goyo Acevedo para NARS).
Son volúmenes, como casi siempre en las colecciones de Modesto Lomba, que acarician el cuerpo de la mujer adaptándose a sus formas, realzando su presencia y haciendo que se sienta única.
Tejidos y siluetas fluidos, con pedrería discreta pero magnífica y colores como el morado, el frambuesa y el salmón. Pero, además, Lomba logra convertir el verde militar o verde caqui en un tono elegante y romántico.
Faldas con vuelo evasé, monos y pantalones palazzo en una apuesta por la feminidad más cómoda y la costura como juego de papiroflexia u origami gracias al cual ninguna falda es igual a otra y ninguna manga es igual a otra.
Pocos estampados, pero rotundos, desde la pata de gallo pequeña y otros cuadros, como en el chaquetón sherlok, hasta el art déco, pasando por flores geométricas y bordados discretos que, sin embargo, hacen brillar a la mujer que los lleva.
Especialmente interesante el chaquetón-kimono guateado, con estampado de cachemir, con falda de vuelo a juego, y los pantalones al tobillo, que dejan ver unos maravillosos y cómodos los zapatos de color rosa empolvado, perfectos para llevar de día o de noche.
Un éxito total, de esas colecciones en las que no puedes elegir y "te lo quedarías todo", como afirmaban algunas asistentes al acto, entre ellas, Beatriz González-Cristóbal, patrona de la Fundación Academia de la Moda Española, que veía en el desfile "una inspiración Jane Austen".
De mucho antes de que naciera la autora de Orgullo y Prejuicio (1775-1817) es el edificio que hoy acoge el Museo de Historia de Madrid y que en sus orígenes fue hospicio, al que en 1721 y 1726 le añadieron una portada, considerada como una de las más valiosas manifestaciones del barroco, obra de Pedro de Ribera.
La espectacular portada, más propia de un palacio que de una institución benéfica, fue parte de una ampliación y mejora del edificio incluía además la instalación de “fábricas” o “maniobras” de lana y lienzo, de sastrería, camisería, zapatos... para la formación de los alumnos acogidos en el hospicio.
Tres siglos después, el patio del mismo es escenario del desfile de Modesto Lomba: las modelos desfilan alrededor de la Fuente de la Fama, que da nombre a la colección: obra que el propio Ribera realizó entre 1731-1732 y que fue encargada por Felipe V para embellecer la Villa y mejorar el suministro de agua, y trasladada aquí ya en el siglo XX.
Un impresionante pilón en forma de trébol de cuatro hojas, con cuatro delfines mitológicos, hornacinas decoradas con floreros y escudos y cuatro niños que sostienen una concha invertida sobre sus hombros.
El remate, una Victoria alada con trompeta, obra de Juan Bautista, que contemplaba desde lo alto el ir y venir de invitados, modelos, fotógrafos y cámaras de vídeo en un museo que muy pocos madrileños conocen. Es de agradecer que, en el marco de Madrid es Moda, se den a conocer estos edificios que son historia de la capital.
De historia, de moda y de arte sabe muchísimo Margarita Ruyra de Andrade, directora de la Fundación Zuloaga, e impulsora de proyectos de éxito como España Fascinante y de la tienda online Es fascinante, así como de la iniciativa Spanish Friday, que se celebra cada año el segundo viernes tras el Black Friday.
La experta en arte y doctora en Marketing, que estaba en primera fila del desfile, comentaba también la belleza de las propuestas presentadas por Modesto Lomba y el escenario escogido. Margarita Ruyra prepara también "un proyecto muy especial y único, que une moda, arte e historia", del que sabremos muy pronto.
Para terminar un día con mucho arte, María Lafuente presentó sus acuarelas en el Hotel Ocean Drive de Madrid, por primera vez mostradas en una exposición.
Modesto Lomba participará también este lunes 13 en los Diálogos de Moda de Autor de Madrid es Moda, conversando con los jóvenes talentos que se forman en ESNE, Escuela Universitaria de Diseño, Innovación y Tecnología, cuyos alumnos mostrarán su creaciones el martes, en el marco de la Madrid Fashion Week.