Es la muñeca más conocida del mundo y, la mayoría de las niñas, ha jugado con ella. Estamos hablando de Barbie, la icónica muñeca que Mattel lanzó en 1959 y que, hoy, sigue a la venta siendo uno de los juguetes más demandados por los más pequeños.
[Barbie por fin es real: ya tiene caderas, brazos y piernas 'normales' como las mortales]
Si bien el primer prototipo de Barbie se trataba de una muñeca rubia con cinturita de avispa y piernas infinitas, Mattel ha sabido ir adaptándose a los tiempos y, con el paso de los años, han ido modificando su estilo lanzando modelos de Barbie con mayor diversidad y mucho más realistas.
De hecho, hace poco Mattel anunciaba el lanzamiento de la primera Barbie con síndrome de Down. En colaboración con la National Down Syndrome Society de EE. UU., la marca ha diseñado una muñeca que cuenta con rasgos propios de las personas con síndrome de Down, como un cuerpo más bajo con un torso más largo, una cara más redondeada, orejas pequeñas y puente nasal plano.
Tal es el detalle que las palmas de las manos de la muñeca tienen incluso una sola línea, una característica que suele asociarse a las personas con síndrome de Down. El vestuario es también muy representativo porque incluye los colores amarillo y azul, los usados para la concienciación del síndrome de Down, así como un collar con tres flechas hacia arriba, símbolo de la trisomía del cromosoma 21 que provoca este síndrome.
Un gran avance en el mundo de Barbie, que estos años ha acercado la muñeca a todo tipo de públicos sacando Barbie de diferentes etnias, cuerpos y capacidades.
La evolución de la muñeca
Como ya hemos mencionado anteriormente, la primera Barbie se creó en 1959 por Ruth Handler, cofundadora de Mattel, que escogió ese nombre para la muñeca en honor a su hija Bárbara. Enseguida se convirtió en uno de los juguetes más populares de la década de los 60.
Durante esa década la muñeca se caracterizó por sus rasgos finos y un maquillaje bien acentuado. En cuanto al vestuario, solía ser muy elegante y mayoritariamente de fiesta.
En 1961, Barbie se echó novio y apareció Ken, su versión masculina. En 1971, crearon la "Barbie Malibú", la primera que miraba al frente, ya que, hasta entonces, todas las demás tenían una mirada lateral. Y casi una década después, en 1980, apareciendo las primeras muñecas negras e hispanas.
También cambió su vestimenta, empezando a arriesgar con piezas más llamativas en cuanto a colores y volúmenes. Además, se integraron las joyas y los accesorios tales como bolsos o sombreros.
En 1998, el cuerpo de Barbie cambió y comenzó a ser algo más realista, con un torso más ancho, y en el 2000, Mattel incorporó una cintura flexible y ombligo, eliminando también el exceso de maquillaje y alineándose más a los estándares naturales de la belleza.
Las profesiones de Barbie
En cuanto a los trabajos de Barbie, siempre han sido muy diversos, ya que la idea de la creadora era lanzar un mensaje a las niñas de que podían lograr lo que se propusieran.
Fue a partir de los 70 cuando Mattel empezó a innovar con las profesiones, siendo la primera, la "Barbie cirujana". En los 80 apostaron por la música y lanzaron una colección en la que la famosa muñeca presentaba su propia banda de música.
En los 90 los trabajos se comenzaron a diversificar, representando a la muñeca en carreras que en aquella época estaban muy ligadas a los hombres como la Barbie presidente o la "Barbie oficial de policía". Incluso se llegó a crear una Barbie de la Fuerza Aérea.
Desde los 2000, prácticamente no existe una profesión que Barbie no haya representado, pasando por la "Barbie skater" y llegando a la "Barbie profesora de signos".
Una muñeca que ha ido evolucionando con el tiempo y que hoy sigue triunfando y acumulando grandes ventas. Barbie es la muñeca eterna, y así lo demuestra año tras año.