Desde revolucionario a innecesario, pasando por atractivo y opresor, los calificativos que ha recibido el sujetador no han podido ser más dispares. Esto se debe a que, al igual que su diseño, su concepción ha ido evolucionando a lo largo de los siglos.
[De los vestidos de lana del siglo XIX a los mini bikinis: así ha cambiado la moda de baño femenina]
En magasIN, te relatamos la biografía de la prenda que ha formado parte de nuestra historia —y de nuestros armarios—.