La aparición de la atleta estadounidense Simone Biles (Columbus, 1997) era una de las más esperadas de los Juegos Olímpicos de París. Tras pasar varios años alejada de la competición de alto nivel por su salud mental, la deportista volvió por todo lo alto este 28 de julio.
Realizó una primera demostración en la barra de equilibrio, obteniendo una puntuación de 14,733, una de las más altas durante la mañana. Con este resultado, recordó su ímpetu y permitió guiar a Estados Unidos a la final.
Pero Simone Biles no solo brilló por su impecable actuación deportiva. También lo hizo por su atuendo. Los uniformes de los deportistas suelen ser el foco de atención por su estética, habitualmente llamativa, y su poder simbólico. El maillot lucido por la atleta no falló a la regla.
Lució un body brillante, de color azul, gris y negro, decorado con más de 6.000 cristales de la famosa firma Swarovski. También cuenta con detalles de perlas, como guiño a la ciudad de París, y estrellas bordadas en homenaje a la bandera de estadounidense. El modelo se llama Star Spangled Shine.
Se estima que su peso ronda los 360 gramos y que su precio es de aproximadamente 3.000 dólares. Lo firma GK Elite. Este maillot no solo vistió a la campeona, es el del conjunto del equipo estadounidense, compuesto por Jade Carey, Sunisa Lee, Jordan Chiles y Hezly Rivera, además de la atleta.
Una pasarela de moda
Los Juegos Olímpicos se han vuelto a convertir en una suerte de pasarela de moda. Los uniformes lucidos por los atletas, firmados por casas de prestigio, aúnan comodidad y estética.
En esta edición, los deportistas franceses lucen chalecos y chaquetas de sastrería en tono azul, que combinan con pantalones tipo sastre y la tradicional camisa blanca. Una apuesta firmada por Berluti, propiedad de LVMH.
"Ralph Lauren se enorgullece de volver por novena vez como equipador oficial del Team USA para vestir a los mejores y más brillantes atletas del país en uno de los mayores escenarios del mundo", anunciaba por su parte la firma estadounidense, el día de la inauguración de los Juegos. El uniforme confeccionado para esta edición recoge los colores de la bandera, el azul, el blanco y el rojo, e incluye diseños clave como la blazer de lana.
Italia no se queda atrás: Armani firma el uniforme presentado para estos JJOO. Incluye una serie de polos, camisetas y chándal que los deportistas lucirán durante los más de 15 días del campeonato.