Este 13 de septiembre, el recinto ferial de IFEMA ha acogido la segunda jornada de la 80.ª edición de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid. Tras un primer día de aclamados desfiles, entre ellos, los de Simorra y Pedro del Hierro, que celebra su 50 aniversario, varios diseñadores han presentado sus colecciones primavera-verano 2025 en un ambiente inmejorable.
La segunda jornada ha arrancado con la revelación de la nueva línea de ANGEL SCHLESSER. La firma, miembro fundador de la Asociación de Creadores de Moda de España (ACME), presenta sus colecciones en la pasarela madrileña desde el 1988. Su estilo se caracteriza por su aura atemporal, con una fuerte apuesta por la confección y una hábil combinación entre tradición e innovación.
Este viernes ha presentado ANTONTE, un homenaje a la pureza y simplicidad de la naturaleza. "Utilizando lino de alta calidad, hemos creado prendas que no solo son cómodas y transpirables, sino también ecológicas. Cada pieza de la colección ha sido diseñada pensando en la sostenibilidad y la elegancia atemporal, fusionando la belleza de los materiales naturales con un enfoque contemporáneo", explica la firma.
La línea destaca, sin duda, por su audaz exploración de formas y volúmenes. Las formas del cuerpo aparecen y desaparecen, bajo tejidos voluptuosos, que juegan con las proporciones, en una paleta de colores neutra y 'tranquila', con el beige como hilo conductor.
"Desde vestidos etéreos con pliegues dramáticos hasta blusas con mangas amplias y faldas con volúmenes sorprendentes, cada diseño ofrece una experiencia visual única, combinando comodidad con un estilo vanguardista", explican desde ANGEL SCHLESSER.
La segunda presentación del día ha quedado en manos de Isabel Sanchis y de su hija Paula Maiques. Su propuesta primavera-verano 2025 está inspirada en la escultura. Madre e hija la describen como una colección "femenina y poderosa, con siluetas de volúmenes puros y geométricos", donde destacan "flores, corbatas y lazos con efecto trepanado sobre mini vestidos, abrigos y vestidos más imponentes que juegan con plisados realizados con tejidos que simulan un jarrón de cerámica".
"La escultura nos gusta muchísimo. Siempre estamos mirando libros, viajando, o consultando internet, por suerte tenemos una accesibilidad enorme, y siempre nos vamos fijando en lo que nos rodea. En este caso, pensamos en una pieza de escultura y en cómo la podríamos convertir en vestido. La parte de prêt-à-porter de la colección está más en flores, corbatas, lazos esculpidos, en relieve, la parte más costura destaca por volantes pesados que vuelan y parecen jarrones de cerámica", explica Paula Maiques sobre el surgimiento de esta colección.
Para esta línea, han apostado por numerosos tejidos, entre ellos, el crepe de seda. "Hemos investigado mucho en los microplisados, requieren trabajo porque no hay máquinas que lo puedan hacer", explica Isabel Sanchis. "Son piezas que necesitan cuatro o cinco personas para la confección. Pero el efecto es precioso", añade Paula.
Su colección aún, por lo tanto, tradición e innovación: "Siempre innovamos, pero nos gusta que se vea el estilo de la firma. En este caso, por ejemplo, nunca habíamos apostado por tonalidades tan suaves como los rositas o los malvas", detalla Paula. En efecto, la colección destaca por su paleta de tonos pastel, acompañadas por el poder del tradicional blanco y negro.
Sobre los diseños en sí, Isabel Sanchis recuerda que han renovado el tuxedo, apostando por la chaqueta con pantalones invertidos, por ejemplo. "Ha sido más rompedor, menos habitual en nosotros", apostilla Paula. Aparecen, en su propuesta, toques de lencería en algunas prendas que aportan un detalle femenino junto con lazos y que también complementa el equilibrio entre romanticismo y seducción.
Confiesan que todos los diseños de la colección han supuesto un reto: "Los plisados, los tejidos plisados… el tema de confección ha sido una locura, hasta que hemos encontrado el punto exacto", destaca Paula. "Los tirantes rígidos también ha supuesto una dificultad", añade Isabel, recordando que han contado con la ayuda del taller, un total de 40 a 50 personas.
La colección realza, por ende, el trabajo artesanal combinado con nuevas técnicas como el micro plisado solei hecho a mano y vestidos envolventes para crear piezas especiales. Está pensada para una mujer muy determinada: "Una mujer decidida, que le guste destacar en algún momento, que aprecie un buen patronaje y que tenga carácter y personalidad".
Le ha sucedido la propuesta de Hannibal Laguna. La firma ha presentado Sunflourish, "una propuesta luminosa y colorista inspirada en el mágico equinoccio de esa primavera idílica que nos anuncia un ciclo solar creciente y el despertar de la naturaleza".
Esta celebración ha quedado patente en siluetas ultrafemeninas, tan características del estilo del diseñador, con la flor como protagonista. Esta aparece "en un ritual de movimientos, posicionándose sobre vestidos largos con mucha caída, faldas midi que despliegan grandes vuelos y volúmenes poderosos".
Todo ello en "tejidos naturales trabajados con la técnica del moulage y bordados con laboriosos procesos que recuerdan el poder de la artesanía. El efecto acuoso del paillette, el crepe doble, el tafetán crujiente, la seda en todos sus gramajes y la transparencia cristalina del tul invisible también cobran protagonismo". Los tableados y drapeados de muselina, realizados a mano, modelan el torso. A nivel cromático, destacan tonos vibrantes como el naranja o el rojo.
La colección celebra el cuerpo femenino, desvelando los hombros, con sensualidad y delicadez. Sin duda, "es una colección creada para provocar el ensueño y el deseo de vestirnos con anhelos de un chic especial, con toques de glamour, sofisticación y feminidad".
También ha destacado la propuesta de Elio Berhanyer. Desde septiembre de 2023, Sergio De Lázaro es el director creativo de la casa. Su éxito al frente de la firma no tardó en llegar: consiguió el Premio L'Oréal en la anterior edición de la MBFWM.
Este 2024, ha regresado con una colección de nombre tan evocador como contundente, Círculo. "El concepto de la colección gira alrededor de El Círculo, como elemento bipolar y como expresión de la perfección imposible, del elemento abstracto. Bipolar porque nos remite a elementos oscuros, como cierre, aislamiento, 'círculo vicioso', 'dar vueltas en círculo para no llegar a ningún sitio'", explica la firma.
Las siluetas se llenan de curvas y círculos que cortan y crean tangencias, vacíos y ausencias, opacidades y transparencias, cambios de ritmo y contrastes. La sensualidad, la sensibilidad y la conciencia quedan plasmadas en vestidos amplios, rectos, pero también otros más cortos, sugerentes, que celebran el poder del cuerpo femenino.
La línea incluye materiales naturales y frescos como el popelín de algodón o la lana, todos tejidos más tradicionales, con otros eficientes y tecnológicos en acabados metalizados o seersucker, y organza de seda. Los completa el denim de acabado tornasolado, en tonos entre dorado e índigo.
Estas texturas se refuerzan con la apuesta cromática del diseñador: tonos calizos y azules, que recuerdan la costa mediterránea, pero también el color ruleta (rojizo) y el dorado. El negro también destaca, en contraste con otros tonos.
El diseñador Juan Carlos Pajares, bajo su firma JCPAJARES, ha presentado su esperada colección ANNUAL 25. Este lanzamiento marca la quinta colección anual de la firma y como suele ser el caso, aúna pasado y presente, con la artesanía como premisa.
Para esta línea, el diseñador "ha buscado inspiración en las técnicas tradicionales de Castilla-La Mancha, una región conocida por su gran herencia cultural y artística. En colaboración con maestros artesanos, Pajares ha revitalizado técnicas centenarias que se encontraban al borde de la extinción, dándoles una nueva vida y relevancia en el panorama de la moda actual".
Con esta colección, el diseñador recuerda la aplicabilidad de la artesanía en la moda de lujo contemporánea. Por ello, deja de ser "un concepto meramente nostálgico para convertirse en una herramienta de innovación estética".
Este concepto se refleja en siluetas de impecable confección, con el toque atrevido y vanguardista del diseñador. Los tonos cálidos y estampados que evocan los atardeceres rinden homenaje al trabajo artesanal. El negro, por oposición, subraya simbólicamente las dificultades a las que también se enfrenta.
Todo ello, en tejidos comolana merina, puntos y crepes de seda, denim desteñidos a mano, poliéster reciclado, tejidos deadstock provenientes de excedentes, linos, tules y tejidos con pedrería y paillettes con motivos florales, con la sostenibilidad como bandera.
El diseñador malagueño Álvaro Calafat ha presentado ODDITIES ODYSSEY, una colección que "recrea un gabinete de curiosidades o cuarto de las maravillas en el que objetos extraños, coleccionables y misteriosas imágenes surgen de universo creativo del diseñador".
Dominada por los tonos neutros, con el beige y el gris en cabeza, y tejidos como la seda, el algodón, la piel y el tencel, la colección sigue afianzando el compromiso del diseñador con la sostenibilidad.
De Rerum Natura. El título de la colección de Malne, la última de la jornada, se presenta como una declaración de intenciones. Para esta primavera-verano 2025, la firma se ha inspirado en el poema del físico y poeta romano Tito Lucrecio. La firma lo plantea como "una oda a la naturaleza y un camino hacia la felicidad y un cambio de conciencia ante el universo que nos rodea".
Como no podía ser de otra manera, ha apostado por tejidos naturales como el lino, la rafia y la seda, así como estampados de animales y flores. Los diseños plasman este deseo liviano, con suavidad y fluidez. Las prendas clásicas de corsetería, encajes y corsés destacan especialmente en una propuesta que vuelve a valorar la importancia del savoir-faire y de una visión sostenible.