Soy experta en moda y este es el truco definitivo para que no salgan 'bolas' en los jerseys de lana: muy pocos lo conocen

Si eres amante de los suéteres de lana o cashmere, seguro que más de una vez te has enfrentado al eterno problema: las antiestéticas bolitas que se forman en estas prendas tras pocos usos. Incluso muchas veces, la frustración nos lleva a pensar que una prenda es de mala calidad y que hemos "tirado" el dinero a la basura con una mala compra. 

Sin embargo, una experta en moda nos desvela un secreto sorprendente: el problema no está en la calidad del tejido, sino en su naturaleza. Los jerséis de esta composición, por más de buena calidad que sean, a los pocos usos ya les aparecen bolas, pero la solución nos la da la especialista y el resultado, comprobado, es sorprendente. 

La clave, el truco infalible para mantener tus prendas en perfecto estado está en el congelador. Como lo lees. Este truco del congelador es una solución práctica que te permitirá seguir luciendo tus suéteres favoritos como nuevos durante más tiempo. 

Cuando las bolas en tus jerséis son una señal de calidad

"La lana, lo bueno, sale bola", afirma rotundamente la experta en un video publicado en la red social TikTok. A menudo, los consumidores creen que si un suéter empieza a formar bolitas (también conocidas como pilling), es porque está mal confeccionado o es de baja calidad.

Sin embargo, la realidad es completamente opuesta. "La gente compra un suéter hoy y, en una semana, le sale bola. Piensan que es malo, pero no. Si lleva cashmere o lana y es bueno, sale bola", explica.

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Para respaldar su afirmación, la experta comparte su experiencia personal: "He trabajado en Carolina Herrera con prendas muy buenas, que yo las tengo, y a la semana han tenido bola. Tengo un suéter en casa que vale 400 euros y a la semana me salieron bolas". Esto confirma que incluso las marcas de lujo y los tejidos de alta calidad no están exentos de las tediosas bolas.

El pilling ocurre porque las fibras más largas y delicadas, como las del cashmere o la lana, tienden a desprenderse y enredarse en la superficie de la prenda. Esto es completamente natural y, de hecho, un indicativo de que el material es auténtico. "Si no lleva lana, no sale bola", asegura la experta. Por lo tanto, si amas la suavidad y el lujo de estas fibras, debes aceptar que forman parte de su encanto.

El congelador como aliado de tus prendas

Aunque las bolas son inevitables, la experta nos regala un truco práctico y sencillo para minimizar su aparición: meter las prendas en el congelador. Así lo explica: "Yo siempre digo: 'mételo en el congelador'. Cuando llego a casa, lo meto en el congelador unas 12 horas".

El método, aunque sorprendente, tiene una explicación lógica. Al exponer la lana o el cashmere a bajas temperaturas, las fibras delicadas, como el mohair o el pelito que sobresale del tejido, se congelan y se debilitan.

"Todo este pelito, todo lo que lleva mohair y lana, se congela. Entonces lo dejo todas esas horas para que se congele y ya no te sale bola tan pronto, porque el pelito se ha congelado, se cae y ya no sale la bola", detalla la experta.

Este proceso es completamente seguro y no daña las fibras, siempre que las prendas se coloquen dentro de una bolsa protectora antes de ser congeladas. Así, evitarás que el tejido entre en contacto directo con el frío extremo, lo que podría resecarlo.

¿Cómo aplicar este truco?

Si quieres probar este sencillo método, aquí te dejamos los pasos:

• Limpia tu prenda. Antes de congelar, asegúrate de que esté limpia y seca. Si es necesario, utiliza un cepillo suave para retirar cualquier suciedad superficial.
• Guárdala en una bolsa protectora. Usa una bolsa de plástico con cierre hermético para evitar que el frío reseque las fibras o que la prenda absorba olores del congelador.
• Déjala reposar en el congelador. Coloca la bolsa en el congelador durante unas 12 horas. Este tiempo es suficiente para que las fibras se congelen y se estabilicen.
• Retírala y úsala como siempre. Una vez transcurrido el tiempo, saca la prenda, deja que alcance la temperatura ambiente y estará lista para usar.

Cuidar tus prendas con otros trucos complementarios

El congelador es una solución eficaz, pero hay otras medidas que puedes tomar para alargar la vida de tus suéteres y evitar las bolas:

• Lava con delicadeza. Siempre utiliza agua fría y un detergente especial para lana o prendas delicadas. Lavar a mano o en un ciclo suave de la lavadora es lo ideal.
• Seca al aire libre. Nunca uses la secadora, ya que el calor puede debilitar las fibras y empeorar el pilling.
• Guarda con cuidado. Dobla tus prendas en lugar de colgarlas, para evitar que el peso estire el tejido.
• Cepilla regularmente. Un cepillo específico para lana o quita-bolas puede ayudarte a eliminar fibras sueltas antes de que se conviertan en bolitas.

Al final, entender que las bolas no son un defecto, sino una característica inherente a los tejidos naturales, es clave para disfrutar de tus prendas. Como dice la experta, "a la que le gusta, tiene que saber que, en el punto, sale bola".