Ana Pastrana (Madrid, 1963) conoce al dedillo la industria textil. Iba para funcionaria de la Administración cuando su hermana la llamó para hacer una suplencia durante el cierre anual de cuentas de una empresa del sector. Al poco tiempo, con 25 años, se convertía en directora comercial. Hoy dirige la colección de mujer de Pedro del Hierro y es responsable de los departamentos de Compra y Diseño.
Recientemente, ha estado en París viendo las propuestas de primavera 2024. “Estamos con los briefings, estudiando cómo ha empezado la temporada, qué tiene la competencia, plataformas de tendencias, desfiles… ya tenemos una idea de hacia dónde vamos”.
Su lugar predilecto para estudiar la competencia es Londres, de donde llegó ayer noche. Se ríe contando su periplo por las tiendas. “Enseguida se nota que somos del gremio; dedicamos tiempo a tocar los tejidos, leer las etiquetas, comprobar composiciones, donde está fabricada la prenda, mirándolo todo”.
Pastrana insiste en la importancia de la planificación: “Me acuerdo de cuando en otro grupo me preguntaban por qué hacía tanto número. Es la base del negocio, les contestaba. No es normal que hagáis 23 chaquetas y 16 pantalones. Tiene que haber una estructura.”
Simpática y cercana, le apasiona su trabajo, a pesar de las horas que requiere. “Lo bueno de Ana es que tiene la capacidad de dirigir sin que parezca que manda”, dice de ella la responsable de comunicación externa de Tendam, Nuria Mayoral.
¿Qué tendencias vamos a ver esta temporada?
Esa es la gran pregunta. Hoy en día no hay una sola tendencia. Los 80 siguen, pero vienen con más fuerza los 90 y 2000. También, como reacción a la pandemia en la que la gente buscaba prendas más cómodas, de nuevo hay una vuelta al vestir. Por ejemplo, hay una fuerte tendencia hacia el traje de chaqueta que es muy Pedro del Hierro.
¿Ha dicho que se simultanean varias tendencias a la vez? ¿Antes había una sola?
Antes no había tanta información, todos seguíamos las mismas ferias. Las mismas tendencias continuaban durante toda la temporada y cambiaban para la siguiente.
Vivimos en una era de inmediatez. De las múltiples tendencias tienes que elegir aquello que se adapte a tu cliente. Ahora hay una parte grunge de los 90 muy divertida, pero para Pedro del Hierro, que se dirige a una mujer a partir de 40 años, no es lo más adecuado. podríamos, en todo caso, tener una pincelada de esta tendencia.
¿Durante la temporada se hacen incorporaciones?
Sí, son colecciones constantes, mensuales que abarcan todos los usos. Ayer, en Londres, aprovechamos para ver también qué podemos incorporar para completar las colecciones de verano, pensando qué proveedores cercanos o nacionales tenemos para reaccionar lo antes posible.
Pedro del Hierro ha sacado TFP by Tamara Falcó…
Es una colaboración que surgió hace año y medio. Estamos muy contentos. Es fácil trabajar con ella, por cómo se involucra. Se intercambian propuestas y decidimos las más interesantes para las colecciones.
Tamara ha venido con nosotros a esta última feria de Premiere Visión en París para conocer los proveedores, ver propuestas de coloridos, elegir estampación… Se ha interesado muchísimo por los proveedores con tejidos reciclados y todo lo referente a la sostenibilidad.
[Así es la propuesta primavera/verano de Pedro del Hierro y TFP by Tamara Falcó]
¿Cuánto venden los influencers y los famosos?
Muchísimo. Tamara tiene 1 millón y medio de seguidores. Tiene estilo y es elegante. El cliente la asocia fundamentalmente con los eventos, siendo primavera- verano la temporada estrella.
En los últimos Goya las principales actrices y actores iban vestidos de Pedro del Hierro. Esto nos posiciona, es una ventana de comunicación y marketing, sale en los medios y genera deseo en el cliente.
¿Qué importancia tiene el marketing en la moda?
Mucha importancia. En PdH todos los departamentos somos eslabones de una cadena. Por mucho que diseñemos una colección maravillosa, si luego el departamento de marketing no comunica y trasmite al cliente esas inspiraciones, no le llegan… Y lo mismo ocurre con el departamento de visual, que con su presentación en tienda atrae la atención del cliente, consiguiendo entre todos los resultados de ventas.
¿Qué hicisteis para adaptaros a las restricciones durante la pandemia?
Fue una locura. Hubo que reconducir producciones, pactar y colaborar con los proveedores, guardar tejidos para futuras producciones… Trabajamos como nunca. No había horas para poner todo al día. No se sabía cuánto tiempo íbamos a estar confinados, era una situación de absoluta incertidumbre.
Propuse a la dirección retomar la colección de active wear, para adaptarnos a la situación de la pandemia. Va como un tiro. Sin embargo, las colecciones de evento no se vendieron. No había bodas, bautizos, comuniones… La gente estaba en casa, en pijama, chándal o ropa cómoda, en modo teletrabajo, fue así de real ¿Para qué te ibas a comprar un vestido de lentejuelas?
¿Cómo os afectó el parón en la cadena de suministros con el cierre de China?
Muchísimo. Los productos que compramos en China tuvimos que deslocalizarlos y buscar nuevos proveedores en Pakistán e India. Ha habido producciones que nos las hemos traído para fabricar en España y países cercanos. Un valor significativo de Pedro del Hierro es que una parte importante de su producción es “made in Spain”. El cliente lo valora mucho.
¿Vais a mantener a los nuevos proveedores?
Si, vamos a seguir trabajando con ellos y creando sinergias con marcas de Tendam. Sin embargo, hay grandes grupos que ya han copado los mercados de Turquía, Marruecos y Portugal, lo que dificulta mantener algunos proveedores en estos países.
¿En España se fabrica poco?
No hay estructura. El problema de España y en general de Europa es que la industria textil se desmanteló. Quedan talleres pequeños que utilizamos para cuidar la confección de las colecciones de ocasión especial y de vestir para PdH . Por ejemplo, toda la colección de Tamara TFP se hace en España. Son prendas con coste elevado.
¿Dónde compráis los tejidos?
Para lo que fabricamos en España utilizamos tejidos nacionales, italianos o franceses. Ahora también Turquía está muy fuerte en cuanto a propuesta de tejidos.
Entre sus diversos cargos, usted es responsable de la consecución de resultados…
Eso es obligado. Esto es un negocio. Tienes un presupuesto que cumplir.
El diseño, decisión de compra, negociación de las colecciones es la parte más visible pero todo ello toma forma con una buena estrategia y planificación.
Debes tener muy claro hacia dónde vas, dónde quieres fabricar, a qué precios vas a comprar y vender, el margen que le tienes que dar a la empresa, lo que tiene que venderse en tiendas, qué productos o qué categorías son claves, qué tendencias hay…
Lleva toda la vida en el negocio de la moda, ¿cuáles son los próximos retos?
Estamos en un momento apasionante, dirigiendo nuestros esfuerzos hacia la circularidad y sostenibilidad que ha venido para quedarse. Seguimos la trazabilidad de los tejidos y producciones. Uno de nuestros últimos proyectos es quitar los plásticos de un solo uso en todas nuestras producciones.
El crecimiento online ha sido exponencial. Ahora hay que modernizar y hacer más eficiente la tienda física. El que mejor y más rápido lo haga será el gran beneficiado. Vamos a tener que correr muchísimo, estar muy al día.
¿La respuesta del cliente ante la moda sigue siendo parecida?
Te voy a contar una anécdota. En Black Friday vamos todos, hasta la directora general, a ayudar en las tiendas porque hay muchísimo volumen de trabajo. Atendí a una chica de unos 40 años a quien le gustó un conjunto de Tamara, pero no quedaba su talla.
¡Hicimos lo imposible por conseguirle las prendas porque tenía un evento especial para ella…lo conseguimos! El cliente nos transmitió su absoluto agradecimiento.
Sigue existiendo una respuesta emocional, la ropa te ayuda a sentirte segura e influye en tu autoestima.
Usted también se encarga de detectar nuevas oportunidades de proveedores y productos. ¿Cómo lo hace?
Hay varios elementos que ayudan a detectar nuevos productos, intuición, análisis competidores, feedback de los clientes…hay veces que con tus propios proveedores intentas desarrollar lo que buscas. Si no lo logramos, tenemos el departamento de sourcing dentro de la empresa que nos ayuda a encontrar el proveedor adecuado.
¿Los materiales más sostenibles encarecen el precio?
Si lo encarecen, pero cada vez se va regulando más el mercado porque todos los fabricantes tienden a utilizar tejidos reciclados. Además de los materiales, las fábricas han repercutido la subida de la electricidad y sumado a los incrementos de los costes del transporte, hacen que todo se dispare.
Intentamos siempre que no repercuta de manera tan directa en el PVP , moviéndonos a otros orígenes para rebajar costes sin menoscabo de la calidad propia de Pedro del Hierro.
Estudió Empresariales. ¿Cómo empezó en el negocio de la moda?
De manera fortuita. Yo me estaba preparando para opositar en la Administración. ¡Imagínate, de 8 a 3, qué comodidad! Mi hermana trabajaba en el departamento de contabilidad de Trucco. Estaban con el cierre anual cuando una persona se dio de baja y me llamó para que fuera a ayudarles.
Al poco tiempo, se marchó la directora comercial. El dueño, que era un gran empresario, estuvo buscando gente para sustituirla. Yo me ofrecí y me dio la oportunidad, con esa edad te comes el mundo… hasta hoy.
¿Qué cualidades cree que hacen falta para llagar donde usted?
Capacidad de motivar, coordinar y de decisión. Respeto hacia tus compañeros.
No era fácil hace treinta y tantos años estar en el mundo textil como mujer. La primera vez que me senté en el comité de una empresa era la única mujer. Con este trabajo que absorbe tantísimo la conciliación fue dura. A lo mejor, estabas en Hong Kong y tus hijos se ponían enfermos…
Hay mucho sacrificio, mucho esfuerzo, un renovarse constantemente, actualizarse. Pero he sido muy afortunada. Desde muy joven he tenido la oportunidad de dirigir departamentos, equipos de compras, de diseños, una marca entera…
¿Tiene un don de mando natural?
Creo que sí [ríe]. En el departamento somos casi todas mujeres. Para mí la conciliación laboral fue dura por lo tanto empatizo con mi equipo procurando que la suya sea más fácil y puedan ir con toda naturalidad al médico o a una reunión del colegio de sus hijos.
Te garantizo que esa confianza te la devuelven. Lo importante es que cada uno cumpla con sus responsabilidades. En general, la gente es muy responsable