Judit Nedderman es una cantautora catalana con una trayectoria impecable. A sus 32 años ya cuenta con 5 álbumes de estudio en el mercado y ha colaborado con artistas de la talla de Alejandro Sanz o Joan Manuel Serrat.
[Susana Cala: "Mi primer disco habla sobre mi proceso tras acabar con un noviazgo muy largo".]
Además, ha compuesto música para teatro, llegando a ser la ganadora del Premio Max a mejor composición músical para espectáculo escénico en 2022.
Ahora acaba de lanzar su quinto disco, ‘LAR’, un proyecto que define como “un disco que huele a casa, cruje como las casas, tiene humedades y en él entra luz a raudales”. Compuesto por diez canciones y producido por Hernán y Paco Figueras, la compositora se encuentra en el mejor momento de su carrera.
Desde magasIN hemos tenido la oportunidad de hablar con ella sobre sus nuevas canciones y el proceso de composición, entre otras muchas cuestiones.
¿Cómo te sientes tras sacar al mercado tu quinto álbum de estudio?
Estos días me he sentido muy feliz porque siento que la salida ha sido muy bonita. La gente estaba muy atenta porque creo que la campaña que hemos hecho, de ir sacando poco a poco los singles y finalmente el álbum, ha funcionado.
Es un disco muy importante para mí, no sé si es porque es el quinto, pero sí que siento que es como una consolidación y un nuevo inicio. Me siento un poco fuera de lo que está de moda, pero noto que a la gente le llega, y por ver el recibimiento vale la pena seguir haciéndolo. Así que estoy feliz.
¿En qué se diferencia ‘LAR’ de tus otros trabajos?
Es un disco muy luminoso y muy alegre. Comparte con otros esta sensación de calma que mucha gente comenta que sienten cuando me escuchan. Me dicen que les tranquilizo, que les doy mucha paz y les ayudo a sentirse bien, y esto para mí es como el leitmotiv de mi discografía.
Llevo una época bastante feliz, así en términos generales, y creo que esto lo he volcado mucho en las canciones. Tampoco ha sido algo premeditado. Voy componiendo a medida que voy viviendo cosas. Y en los últimos años, el vivir la pandemia me ha servido para conectar con las cosas bonitas y darme cuenta de que en lo pequeño también está la felicidad y a aprender muchísimo de la expectativa del hecho de estar esperando.
He concluido que lo importante es celebrar lo que nos esté pasando, sea lo que sea. Esto es lo distinto de ‘LAR’, porque en los otros discos creo que el foco estaba más en las emociones difíciles, aunque siempre había una parte optimista, pero este es 95% optimista.
¿Cómo ha sido el proceso de composición?
Lo he ido escribiendo sobre la marcha. Siempre me pasa igual. Es decir, yo saco un disco, empieza la gira y al cabo de dos meses, empiezan a venir ideas y entonces, claro, empiezo a grabar cosas.
No decido ‘voy a hacer un disco’ es como que voy viviendo, voy componiendo, voy acumulando y al cabo de seis, siete meses, un año, veo que ya tengo suficiente material como para empezar a vislumbrar un nuevo álbum.
Cuando empiezo a trabajar con los productores me inspira mucho el momento de llevarles las canciones.
En este caso los productores fueron Hernán Figueras y Paco Figueras, que cuando ellos empiezan a poner su talento y sensibilidad y enriquecen los temas a nivel armónico y de estructura, nace otra vez las ganas de seguir componiendo para seguir llevando más temas y que sigan creciendo en esa dirección.
Esto continua hasta que tengo como diez o 11 canciones y ya decidimos grabarlo.
Tu discografía está compuesta por canciones en distintos idiomas, ¿qué te ofrece cada uno de ellos?
Yo al principio solo cantaba en catalán, y empezar a componer en castellano fue una sugerencia de Alejandro Sanz. Me dijo ‘¿tú no compones en castellano?’. Me quedé muy sorprendida porque pensándolo digo, ‘pues es verdad que no’.
Siempre grababa en castellano versiones de canciones, pero nunca me había dado a mí misma la oportunidad de componer en español. Entonces empecé y vi que era un idioma superdisponible para mí en cuanto a inspiración y que me daba otras melodías.
El catalán es mi lengua materna y creo que soy muy dulce en catalán. Y esto me gusta porque no sé me conecta con mi parte más amorosa, al contrario que el castellano que me lleva a una parte más directa.
El portugués es muy como un juego, como una mariposa. No es tan directo como el castellano, pero me da mucha alegría y entonces me gusta mucho también usarlo.
La música es similar porque a mí lo que me gusta es que la gente escuche el disco y te das cuenta de que he cambiado de idioma porque suena un poco distinto. Pero que no sea exagerado.
¿Has encontrado impedimentos en la industria musical cuando cantabas solo en catalán?
Yo he notado que a partir del disco anterior, Aire, que fue el primero que era prácticamente todo en castellano, sí que hemos empezado a tocar más fuera de Cataluña.
Antes al cantar en catalán, veníamos a tocar a Madrid, pero no se me ocurría, no sé, buscar conciertos en Sevilla o en Galicia, o en sitios donde hemos empezado a trabajar en la última gira, por miedo a que no gustara.
A partir del cuarto yo como que abrí la perspectiva también por sugerencia de Alejandro, decir, oye, pues sabes, puedes salir, el mundo es muy grande. Esto me cambió el chip y en ello estoy. Ahora el objetivo es ir trabajando sitios nuevos, empezar y ver qué pasa.
Los ejemplos que tengo, como Drexler mismo, Rozalén, El Kanka, que son artistas que admiro muchísimo y que veo que han hecho una carrera como de picar piedra y de ir a las salas pequeñas, consolidando su público y que han ido creciendo poco a poco.
Veo que ellos lo hacen y entonces confío que esto también puede pasarme a mí.
En este disco tienes una canción que habla sobre la guerra de Ucrania, 'PAU'. ¿Qué función crees que tienen las canciones protestas dentro de nuestra sociedad?
Yo creo que es muy importante porque la música puede, aparte de abrir el espíritu, abrir conciencia. Y en el caso de esta canción concreta, claro, me pidieron que fuera a cantar a la manifestación en Plaza Cataluña ante miles de personas que se estaban manifestando contra la guerra.
El día anterior estaba ahí en casa preocupada por qué iba a cantar y cogí la guitarra y bueno, me salió la canción sola, casi como si me la mandará alguien, esto pasa muy poco por lo que fue muy impresionante.
Cuando estuvo acabada sentí que era una canción importante porque iba más allá de mí. Como artistas creo que tenemos una responsabilidad porque podemos poner las palabras, nosotros escogemos lo que decimos y esto es una responsabilidad que me gusta asumir.
Hablabas antes de la colaboración con Alejandro Sanz… ¿Cómo fue y que supuso en tu carrera?
Fue muy sorprendente porque claro, me llamó y me dijo que me había escuchado, que le había encantado y que quería grabar una canción en catalán y castellano. Eso me emocionó muchísimo porque yo estaba muy preocupada por la falta de abrazo que fuera más allá de lo político, porque es impresionante la gasolina que se le echa a poner la gente en contra y eso a mí me entristece muchísimo.
Para mí da igual lo que sientas políticamente, las otras personas son iguales que tú. Al final cada uno vota lo que tiene que votar y ya está. Esto opino que es responsabilidad de los políticos y me parece increíble que los políticos lo hagan tan mal, que nos manipulen de esta manera.
Esta propuesta de Alejandro me pareció supernecesaria porque la lengua se politiza un montón, y al final las lenguas son una riqueza que tenemos, que hay que celebrarla, explorarla y mezclarla. La canción que me propuso era un abrazo entre catalán y castellano.
Entonces me sentí muy afortunada que de todas las personas que pueden cantar en catalán, pues me escogiera a m. Grabamos a distancia, pero daba igual porque lo entendíamos igual. Yo escucho la canción y digo ‘es que lo cantamos desde el mismo punto’. Por otro lado, me ha ayudado muchísimo porque me ha dado grandes consejos. Lo que él desprende para mí ha sido muy inspirador.
Has recibido un Premio Max por componer la música de la obra 'Canto jo i la muntanya balla'. ¿Cómo fue la experiencia?
Esto fue impresionante porque me lo propuso Guillem Alba y Joan Arqué, que son los directores, y yo le dije ‘¿Sabéis que yo nunca he compuesto para teatro no?’, pero me decían que lo iba a hacer muy bien y que estaban convencidos de que tenía que ser yo.
Además, el libro en el que está basado la obra, me vino como por tres bandas o cuatro a la vez, me lo recomendó muchísima gente. Entonces dije bueno, va, pues lo hago. El proceso de creación fue muy interesante porque fuimos primero a hacer un ensayo con todos los actores que fue muy inspirador.
Durante el verano yo me leí la novela y fui haciendo como cápsulas de música que me parecía que ilustraban la sensación de la obra. Luego sí que me pidieron un par de canciones con letra, que estás sí que fueron más similares a lo que estoy acostumbrada a hacer.
Cuando fui a los premios Max y me explicaron que eran los premios más importantes de teatro y cuando dijeron mi nombre, yo pensé que era imposible, que era la primera vez que hacía música para el teatro y que allí había músicos y compositores buenísimos. Me sentí un poco como una intrusa, pero al final dije bueno, pues ya está esta, voy a disfrutarlo y a agradecerlo. Es un premio muy importante que, además, quieras o no, da prestigio.
¿Cuál consideras que ha sido el mejor momento de tu carrera?
Tengo tres. El primero el concierto en el Palau de la Música el año pasado, que además vino Joan Manuel Serrat. Cantamos juntos 'Lucía' y él, antes de cantar, explicó que era la última vez que cantaba en el Palau.
Luego también, cuando Alejandro me invitó al estadio en Barcelona, que me me presentó y hubo una ovación de 40.000 personas en Barcelona. Me cuidó muchísimo y fue muy generoso sobre el escenario.
Y luego un tercer momento muy especial el día que cumplí 30 años teníamos bolo en la sala Barts de Barcelona. Tuvimos que hacer dos pases de lo mucho que se llenó y fue además el primer concierto justo después de la pandemia. Fue muy bonito.
Un artista con el que sueñas con colaborar
Si pienso así a lo grande pues cantar Stevie Wonder, porque me ha acompañado toda la vida y es una voz que realmente pongo y digo '¿pero qué está pasando?'.
Un sueño profesional por cumplir
Viajar. Me encantaría poder ir a cantar a Sudamérica. Cuando empecé mi sueño era tocar en Girona y y ahora que Girona ya es como una normalidad, pues cada vez sueño un poquito más allá y a ver, a ver si va ocurriendo.
¿Por qué tiene la gente que escuchar 'LAR'?
Porque lo he hecho con mucho amor y creo que puede haceros felices durante 36 minutos.