Creativa, pasional y muy emocional. Así se define Gala Meyer, hija del fundador de Desigual, Thomas Meyer, que decidió seguir los pasos de su padre y crear una marca de joyas desde cero: Zalio.
Estudió artes visuales en Estados Unidos y se dedicó durante un tiempo al esquí de competición, por lo que nunca pensó que su futuro se encontraría entre piezas de joyería. Pero la maternidad dio un vuelvo a su vida y le hizo replantearse que era lo que quería hacer de verdad. Fue así como descubrió el arte de la joyería
Un año más tarde de su primera colaboración con Desigual, Gala y su padre vuelven a unirse para lanzar la segunda colección de joyería de la firma catalana. Con el mar como inspiración, esta colección presenta, 20 piezas bañadas en oro de 18 quilates o plata de 1ª ley y circonitas incrustadas, que pretenden convertir lo cotidiano en algo precioso y simbólico.
Desde magasIN hemos tenido la oportunidad de hablar con Gala sobre este nuevo proyecto, las dificultades de emprender siendo joven, la maternidad y, en resumen, su ilusión y conexión con las joyas.
Acabas de lanzar la nueva colaboración de tu marca de joyas, Zalio, con Desigual. ¿Cómo la definirías?
Es una colección que está inspirada en el mar. Es muy especial para mí porque está hecha con las caracolas que yo recogí de pequeña en la playa, las tenía guardadas y siempre he tenido la idea de hacer algo con ellas. Para esta colección me vinieron a la cabeza y decidí hacer un molde de donde saqué réplicas exactas. Después trabajé con ellos creando piezas muy finas y elegantes.
En esta ocasión, al trabajar con las caracolas, he sido más intérprete que creadora, siento que he hecho más el proceso de interpretar las caracolas.
Además, tiene un claro mensaje: el paso del tiempo. Muchas de las caracolas que yo guardaba y que he utilizado, ya están rotas o no tienen el mismo brillo que cuando las cogí. Por eso creo que la colección va muy ligada con el paso del tiempo, el cuidado y lo bonito de envejecer.
Decidimos lanzar esta segunda colaboración porque nos gustó mucho la primera colección, fue muy bien y acabamos muy contentos. A gente les gustaron mucho las piezas, así que decidimos seguir adelante.
¿Cómo haces para encajar el estilo de Zalio, con el de Desigual, que ya de por sí es muy específico y marcado?
Me he tenido que ajustar un poquito, pero sobre todo en cosas técnicas o específicas de la industria. A nivel creativo, al ser la joyería un departamento nuevo dentro de la firma, me están dando mucha libertad, he podido crear algo desde cero.
Además, pienso que está conectado con Desigual porque mi esencia, como soy y como me expreso, encaja muy bien con los valores de la marca. Comparto muchos de los valores de la empresa, es muy emocionante.
Siento que puedo ser yo y expresarme libremente sin tener que ajustarme tanto a Desigual, porque ya va de la mano en mis creaciones de forma natural.
¿Por qué surge Zalio?
La palabra Zalio lleva en mi vida desde que tengo 15 años. En ese momento yo estaba buscando definir una sensación, una emoción que tenía dentro y que no podía describir porque no encontraba las palabras, y al final la encontré. Para mí, Zalio describe el momento en que una persona se da el permiso de sentirlo todo.
Cuando tuve la idea de crear mi marca, tuve claro que se llamaría así. Yo utilizo las joyas para expresar lo que siento dentro y como comprendo la vida. Originar la marca surge de una curiosidad para entender todos los aspectos de la vida, todas las emociones, el porqué estamos aquí.
Desde pequeñita he tenido todo esto dentro, pero no ha sido hasta hace unos años que lo he empezado a expresar con la joyería. Siempre he sido una persona muy expresiva y creativa, con muchas preguntas.
¿Por qué te decidiste por la joyería y no por la moda, como tu padre?
En realidad, nunca me plantee trabajar en el apartado de la moda, tampoco en el de la joyería. Sí, es verdad que soy una persona muy emocional y siempre he tenido una conexión especial con las joyas, con todos los objetos en realidad.
Todos los objetos ceremoniales, los altares… Toda esa parte de conexión y espiritualidad, de crear algo para honrar un momento, me llamaba mucho la atención. Entendí que con las joyas podía crear esto, y pensé: ¿Si esto me hace sentir tanto y me encanta, por qué no empiezo a crearlas yo?.
Ahí fue cuando empezó. La moda me gusta para mi día a día. Pero no para diseñarla. Me interesan mucho más las joyas y su combinación con la moda.
Has creado tu marca desde cero, ¿cómo ha sido la experiencia de emprender siendo tan joven?
Está siendo muy difícil, me cuesta mucho, pero muchas veces me doy cuenta de que la mayoría de impedimentos me los pongo yo, que está todo en la mente. Soy consciente de que tengo muchas facilidades por mi apellido y la familia en la que he crecido, pero también hay otra cara de la moneda. Hay muchas más expectativas y prejuicios.
Al final, yo soy quien tengo el poder de elegir como enfrentarme a cualquier situación. Puedo decidir ponerme en la posición de víctima y lamentarme, o tomar las riendas de la situación y buscar como solucionarlo. Lo mismo me pasa con la experiencia de emprender joven. Todos tenemos dificultades, la clave está en como las enfrentamos.
Hablabas de las facilidades de tu apellido… ¿Qué importancia tiene la figura de tu padre, Thomas Meyer, en tu faceta laboral?
Es una persona fundamental en mi carrera. Sabe mucho de la industria de la moda, de lo que es emprender… Ha recorrido un largo camino con mucho trabajo y mucho esfuerzo, y está muy orgulloso de todo lo que ha conseguido. Tener un referente así es increíble.
Yo soy todo lo opuesto a él, me gusta mucho más la parte creativa y emocional, y a veces nos cuesta entender la visión del otro, pero es justo ahí cuando unimos fuerzas y conseguimos los mejores resultados. Es mi padre, y me siento muy orgullosa de tener una persona como él que me apoya y siempre está ahí para guiarme.
Has sido madre hace relativamente poco, ¿cómo vives la conciliación entre tu trabajo y la maternidad?
No siempre es fácil, pero mi hija es la creación más importante de mi vida, es la razón por la que hago joyas, todo empezó cuando nació ella. Durante el primer año, tuve que parar mis estudios y me volqué en ser mamá y cuidar de mi bebé. Conforme iban pasando los meses, realmente sentía que necesitaba hacer algo que fuese no ser madre, necesitaba ser yo, Gala.
Fue ahí cuando empecé a pasar unas horitas al día en el estudio. Al principio ‘jugaba’ con diferentes materiales aprendiendo como se creaban las joyas, y de pronto surgió Zalio.
La maternidad es lo más grande que tengo en mi vida, con sus beneficios y sus dificultades, y todo esto también está reflejado en mis creaciones. Cada joya que hago está 100% influenciada por ella.
Tanto la industria de la moda como la de la joyería se está viendo últimamente amenazado por tiendas que promueven el fast-fashion. ¿Cómo crees que podemos acabar con este sistema de compra, y apostar por una mayor sostenibilidad?
Son dos apartados donde es muy importante la concienciación en ambos sentidos: tanto del productor como del consumidor. En joyería es fundamental, desde el principio del proceso de creación y producción, tener esa conciencia sostenible en cada paso. Creo que la sostenibilidad, además de tener un gran impacto en el medio ambiente, va mucho más allá.
El concepto de sostenibilidad tiene que expandirse y ganar profundidad¡, va mucho más allá de utilizar materiales que no dañen el medio ambiente. No estoy a favor de tiendas como Shein, pero también hay que analizar el uso que le damos a lo que compramos.
Si decides comprarte una pieza muy cara y exclusiva, pero al final nunca la usas, por muy sostenible que sea la pieza, el consumo no lo es. Si, en cambio, adquieres una pieza de menor calidad en otro tipo de tienda, y la llevas todos los días de tu vida, sí estás realizando un consumo responsable, y, por lo tanto, sostenible. Es un campo en el que aún tenemos que aprender y mejorar muchísimo.
Un sueño por cumplir a nivel laboral.
Un sueño por cumplir a nivel laboral.
Qué celebrity te gustaría que llevara una joya de tu marca.
Me gustan mucho Fka Twigs y Björk. Son dos artistas que creo que encajan muy bien con la filosofía de Zalio.
¿Qué dicen de Gala Meyer sus joyas?
Todo. Es mi manera de expresar lo que pienso y siento. De poder conectar con otra gente. Mi objetivo es, que al comprar mis joyas, los clientes también puedan expresar lo que llevan dentro.